Caída de un ventilador deja varios estudiantes heridos en UniAtlántico

Estudiantes de la Universidad del Atlántico ubicada en Barranquilla, en la vía que comunica con el municipio costero de Puerto Colombia, denuncian el mal estado de algunas de las aulas del plantel, a tal punto de que tres estudiantes resultaron heridos luego de que un ventilador (abanico) de gran tamaño se desprendiera del techo y cayera sobre varios estudiantes.

El accidente ocurrió en el salón de clases número 501 del Bloque A, uno de los afectados registró cortes en la frente por las hélices del abanico, según indicó un estudiante que reportó la novedad a este medio.

“La gente de ingeniería y ciencias básicas está molesta por las condiciones en las que nos tienen dando clases”, dijo un estudiante de la universidad a SEMANA.

Desde las directivas de la universidad confirmaron el hecho e indicaron que efectivamente el caso se presentó en un salón de clases, pero señalaron que ninguno de los lesionados presentó heridas de gravedad.

“Por fortuna, se trató de lesiones menores, atendidas de manera inmediata en nuestro centro médico y, gracias a la activación del seguro para accidentes de la institución, fueron trasladados rápidamente a las clínicas respectivas”, dijeron en un comunicado desde el alma mater.

Sin embargo, manifestaron que se adelantan las investigaciones que tienen lugar para determinar las causas del hecho.

“Ante la situación, desde el Departamento de Infraestructura Física y Servicios Generales, se realizan las indagaciones pertinentes para reforzar los planes de acciones preventivas y de mantenimiento, con el fin de evitar que, en el futuro, estos accidentes se repitan”, anotaron.

Del mismo modo que aprovecharon para asegurar que han hecho inversiones en la construcción de nueva infraestructura y en adecuación y mantenimiento preventivo de la existente, pero solicitaron más apoyo del Gobierno nacional.

“Este hecho nos motiva a instar al Gobierno nacional a adoptar los mecanismos que se requieran para aumentar el presupuesto de las universidades públicas del país, y, de esta manera, poder incrementar lo correspondiente a infraestructura, en procura de otorgar mejores condiciones para la docencia, investigación, extensión y proyección social”, finaliza diciendo el comunicado oficial de la universidad conocido por SEMANA.

Encapuchados en la universidad

El pasado 30 de marzo, la tranquilidad de la universidad se vio interrumpida por hombres encapuchados que ingresaron al plantel y los estudiantes tuvieron que ser evacuados.

Los sujetos bloquearon la carrera 51b, que da acceso a las instalaciones de la universidad, quemaron objetos y repartieron panfletos en los que se identificaban y explicaban su presencia en el lugar.

De acuerdo con el comunicado que ellos mismo entregaron, se trata de miembros de la comunidad educativa al mando de quien llamaron “la coordinadora Julio Enrique Blanco”, con quien conformaron un movimiento “anarquista que busca la reivindicación de las diferentes formas de lucha”.

Con la presencia del grupo de encapuchados, los estudiantes tuvieron que salir corriendo de la universidad, algunos aseguran que desde el 2019 no se presentaba una situación parecida y que “volvieron los jueves de tropel”.

El documento entregado por el grupo de encapuchados fue titulado La rebeldía es la vida: la sumisión es muerte y fueron expuestas al menos cinco exigencias.

• Exigir a la administración las condiciones dignas donde los estudiantes podamos comer (cafetería) realizar entrega de dicha cafetería presionando a los contratistas designados.
• Exigir a la gobernación y alcaldía de Barranquilla mayor cobertura en la tarifa diferencial dada la subida del pasaje (lucha abandonada).
• Exigir a los actores respetar los espacios universitarios dando el debate de un tema tan delicado como lo es la Autonomía Universitaria que no se reduce solamente a la intromisión de la fuerza policial, sino que también a la intromisión de la política externa (venga de donde venga).
• Rechazamos rotundamente los diferentes mensajes de desinformación donde se estigmatizan las diferentes expresiones de lucha y que generan pánico y miedo a la comunidad en general. NO SOMOS TERRORISTAS.
• De igual forma, le hacemos un llamado al gobierno nacional a cumplir lo pactado en campaña a los estudiantes que es la reforma a la ley 30 dado que la financiación a la educación superior ha quedado en un segundo plano concentrando fuerzas en una irreal “reforma política”.