NACIÓN
Con sobrevuelos vigilan alerta de inundaciones en el sur de Atlántico
Desde el aire continúan las labores de monitoreo frente a las inundaciones en el departamento.
Después de las fuertes lluvias presentadas a lo largo del territorio nacional, y las afectaciones que ha originado la ola invernal en el sur del departamento del Atlántico, las autoridades departamentales, la gobernación del Atlántico, y la Fuerza Aérea Colombiana realizan misiones de monitoreo en los sectores vulnerables del departamento.
Tras un recorrido realizado por funcionarios de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo (UNGRD), el Fondo Adaptación y el Ministerio de Ambiente, en las zonas cercanas al Embalse del Guájaro, en jurisdicción de Sabanalarga, debido a los altos niveles de las aguas, la Corporación Regional Autónoma (CRA) declaró la alerta roja en el sector.
A través de plataformas de vigilancia y reconocimiento de la Fuerza Aérea Colombiana, se sobrevuelan los municipios afectados por la ola invernal, especialmente aquellos que colindan con el embalse de El Guájaro. “Esto, con el fin de mitigar el riesgo por inundación, e implementar de inmediato las medidas preventivas por parte de la Gobernación del Atlántico”, anotaron las autoridades.
A estas labores, se han sumado los líderes comunales, quienes, desde las compuertas del Canal del Dique, adelantan trabajos de infraestructura en compañía de la Secretaría de Prevención y Atención de Desastres.
“El Comando Aéreo de Combate No.3 en articulación con la Gobernación del Atlántico, la Unidad Nacional para la Gestión de Riesgo de Desastres continuará las labores de monitoreo y prevención, en pro de mitigar el riesgo por inundación e identificar los puntos críticos donde se puedan ver afectados los atlanticenses”, manifestaron desde el comando de la fuerza aérea.
El secretario del Interior y Gobierno del Atlántico, Yesid Turbay, el día que fue declarada la alerta roja, manifestó que, posterior al recorrido por las poblaciones de Aguada de Pablo, Las Compuertas y La Peña, se realizó un Consejo Departamental de Gestión del Riesgo para analizar la situación que se presenta en el Embalse del Guájaro.
Por su parte, la subsecretaria de Prevención y Atención de Desastres del departamento, Candelaria Hernández, señaló que “entre las solicitudes que se han hecho a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo está el desplazamiento de unas tractobombas de más de 36 pulgadas que tienen en el departamento de Bolívar, con la finalidad de poder trasladarlas en hasta el Embalse, extraer el agua y poder enviarla hasta el Canal del Dique”.
Por el desbordamiento de una represa y el arroyo grande, 929 familias resultaron afectadas en Palmar de Varela, incluidos 160 campesinos del corregimiento de Burrusco, que perdieron sus cultivos de pancoger, y en Baranoa, se desbordó un arroyo que inundó 250 casas. Al parecer, el afluente estaba sedimentado por basuras.
El mayor Néstor Armando Rodríguez, comandante de la Defensa Civil en el Atlántico, confirmó que estas emergencias se registraron en horas de la noche del sábado 8 de octubre tras las fuertes precipitaciones.
“Afortunadamente, no tuvimos personas heridas, tampoco viviendas que se hayan desplomado, solo inundaciones que generaron el daño de algunos enseres. Apenas tuvimos conocimiento de la situación, procedimos a entregar colchonetas y algunos mercados para abastecer a las familias”, aseveró el comandante.
Un total de 180 familias quedaron con pérdidas en sus viviendas, de las cuales 12 quedaron inhabitables en 15 barrios conocidos como 11 de Noviembre, Villa Leyla, Circunvalar-11 de Mayo, Fundace, Santa Elena, Calle 26 entre carreras 14 y 5, Loma Fresca, Oasis, 7 de Octubre, Villa Clara, Torcoroma y Barahona.