El plan B de Máximo Noriega; salpicado en escándalo de Nicolás Petro, para llegar al poder en Atlántico

La última carta que se juega Máximo Noriega por la carrera a la Gobernación del Atlántico, luego de que el Pacto Histórico le negara su aval para la contienda de este 29 de octubre en las elecciones regionales, fue inscribir a su esposa Claudia Verónica Patiño como aspirante al cargo por el partido Fuerza Ciudadana.

“Ahora somos dos”, fueron algunas de las palabras de Claudia Verónica Patiño en medio de la inscripción de su candidatura, que se realizó en los últimos minutos permitidos del pasado 29 de julio.

“A partir de ahora, Verónica Patiño asume todo el trabajo político y electoral en esta jornada en la que llegaremos a la Gobernación en nombre de fuerza ciudadana”, dijo uno de los representantes del partido oficializando la inscripción.

Por su parte, Claudia Verónica, a quien se le vio al lado de Máximo Noriega, su esposo, durante los últimos días tratando de lograr el aval, dijo que la decisión es una muestra de que no se dan por vencidos.

“No nos damos por vencidos. Hoy le queremos decir a la ciudadanía que esta fuerza lleva algo que se llama Pacto Caribe y Pacto Caribe sale hoy en listas abiertas, en concejos, en la Asamblea y con nuestros ediles; así que queremos que toda la ciudadanía, poder contar con ustedes, saben que no ha sido una situación fácil. A Máximo, como le digo yo, somos esa bandera y ahora somos dos”, dijo Patiño mientras levantaba la mano junto a su esposo.

“Sorpresivamente” le revocaron el aval a Máximo

El cierre de inscripciones de candidaturas para las elecciones regionales de octubre se convirtió en todo un revuelo político en Barranquilla, porque a última hora la Colombia Humana decidió retirar el apoyo y el aval al candidato Máximo Noriega, quien fuera precandidato a la Gobernación de Atlántico.

“La democracia y el ejemplo comienzan por casa. Si la Colombia Humana decide no respetar mis derechos políticos ganados en la consulta interna, ¿quién les creerá cuando hablen de democracia? ¿Y el daño al gobierno del cambio? #ElAvalDeMáximo no es un capricho, es un derecho”, expresó Máximo en sus redes sociales.

Todo se desató cuando Noriega arribó a la Registraduría luego de, al parecer, recibir el aval a última hora por parte de la colectividad para lanzarse a la Gobernación del Atlántico, pero minutos después fue notificado de que ya no había aval para su candidatura.

Precisamente, el partido Colombia Humana le notificó a la Registraduría, en horas de la tarde, que revocó el aval de Máximo Noriega Rodríguez para la Gobernación del Atlántico a través de una carta fechada de este sábado 29 de julio de 2023 y firmada por Eduardo Rafael Noriega de la Hoz, delegado del Secretario General del partido.

Según la comunicación, “las agrupaciones políticas que conforman el Pacto Histórico adoptaron la decisión de abstenerse políticamente de apoyar cualquier candidatura al cargo de gobernador del departamento del Atlántico”.

Tras los hechos, el dirigente político manifestó que interpondrá una denuncia penal contra el partido Colombia Humana, porque “no solamente se me están violando los derechos, sino que se me hace una acción agresiva, burlesca y humillante. Eso es inconcebible, no se puede admitir con ninguna persona”.

Máximo Noriega manifestó que la resolución fue firmada “no por el secretario general Hincapié, sino por Eduardo Noriega, que es el personaje, al lado de Agmeth Escaf, que no quiere un candidato alternativo, sino solamente la candidatura de Eduardo Verano y Alfredo Varela. Está obsesivo en que no quiere, y violentando la Constitución me revoca el aval”.

Seguidores del precandidato realizaron una protesta el pasado viernes en la sede de la Registraduría por la renuencia de la colectividad de darle el aval a Noriega. En el lugar hubo tensión e insultos cuando hizo su arribo el también aspirante a la Gobernación Alfredo Varela, de Alianza Verde. La fuerza pública tuvo que intervenir para proteger a Varela, quien llegó al sitio con su esposa y sus tres hijos, menores de edad.

Por fortuna la situación fue controlada por los agentes de la Policía Metropolitana desplegados por seguridad electoral.