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Macabro: encuentran restos humanos en basurero al sur de Barranquilla con rastros de arena y flores marchitas; esto se sabe
La Policía reveló las primeras hipótesis.
En la mañana de este viernes, 5 de mayo, la ciudadanía alertó a la Policía sobre el hallazgo de restos humanos en un basurero ubicado al suroccidente de Barranquilla, barrio La Ciudadela.
De acuerdo con las primeras versiones, un reciclador encontró los huesos de una persona en la carrera 3 con calle 49. Al llegar, las autoridades advirtieron sobre las condiciones de avanzado deterioro en que se encontraba el cadáver.
Aunque el caso es materia de investigación, se conocen algunas hipótesis. Para la Policía metropolitana de la ciudad, se trataría de un cuerpo que no alcanzó a ser exhumado y, por ende, decidieron arrojarlo a la basura.
La institución armada explicó que el cadáver estaba rodeado de flores marchitas y a su alrededor encontraron rastros de arena. En atención a esos detalles, la Policía considera que podría estar relacionado con una exhumación que no alcanzó a realizarse.
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Caso de cuerpo desmembrado
Los restos óseos aparecen a menos de 10 días de reportarse el hallazgo de un cuerpo desmembrado. La Policía enfatizó en que ambos eventos no están relacionados porque, en el caso puntual de los restos humanos, el cadáver estaba relativamente completo con su cabeza y cuerpo.
En la noche del pasado jueves 27 de abril, residentes del barrio La Luz, en el sur de la ciudad, dieron aviso a las autoridades sobre la aparición de una cabeza dentro de bolsas de basura.
El hallazgo se registró exactamente en la calle 17B con carrera 17 a eso de las 9:50 p. m. Según el reporte preliminar que manejan las autoridades judiciales, la cabeza corresponde a la de un hombre y fue encontrada en una esquina.
Algunas versiones dan cuenta de que, a pocos metros, en un basurero, apareció el cuerpo de una persona, supuestamente, de sexo masculino.
Un poco más adelante del sitio donde fue hallado el resto del cuerpo, uniformados de la Policía encontraron la cédula de una persona del sexo masculino y tratan de constatar si corresponde al hombre que fue descuartizado.
El documento, según conoció SEMANA, tiene el nombre de Amaury Antonio Barraza Acosta; en la base de datos de las autoridades, Amaury Antonio Barraza registra una captura en el año 2013, cuando se le vinculó a la banda Los Costeños tras un caso de extorsión, pero, además de ello, tiene otras cinco anotaciones judiciales por los delitos de porte ilegal de armas de fuego, concierto para delinquir y daño en bien ajeno.
El propietario de la cédula, Amaury Antonio, según conoció este medio, es reconocido en el mundo delincuencial como alias Peluca, lo que ahora tratan de establecer en Medicina legal y si la identidad del hombre con líos con las autoridades corresponde a la del cuerpo encontrado.
En ese sentido, ese es el primer caso de mutilación que se presenta en la capital del Atlántico durante este año. El último evento similar se habría registrado en junio de 2022, cuando en dos barrios de Barranquilla hallaron las extremidades
Las primeras hipótesis que manejan las autoridades es que se trataría de una especie de vendetta entre las bandas que controlan el microtráfico en la ciudad.
“La primera línea investigativa que manejamos es la presunta pugna de grupos delincuenciales. Esta sin duda es la forma de actuar de los delincuentes para tratar de infundir temor a la ciudadanía”, afirmó el coronel Óscar Daza, comandante operativo de la Policía en Barranquilla.
La Policía dispuso de un grupo de investigadores especializado para encontrar a los victimarios, así como el vehículo del cual habrían sido arrojados los restos, e hicieron un llamado a la comunidad de la ciudad para que ayudara con información que ayudara a dar con el paradero de los victimarios.
Después de unos días se conoció que la víctima de ese caso fue Ángelo Aldair Cerra Jaimes, de 34 años de edad. Según la Policía, el hecho guarda relación con una pugna entre dos bandas delincuenciales que buscaban controlar el departamento, Los Costeños y Los Rastrojos Costeños, dos grupos delictivos que si bien tienen alguna similitud en el nombre, son completamente diferentes en cuanto a su organización.