“Nos están extorsionando y el monto va de acuerdo al tamaño del pick up”: picotero habló con SEMANA y contó cómo llegan a extorsionarlos

El flagelo de las extorsiones en Barranquilla se sigue registrando pese a los estrictos controles que ha venido adelantado el Gaula de la Policía Metropolitana.

Un joven, propietario de un pick up en la capital del Atlántico, se atrevió a hablar con SEMANA del viacrucis que están viviendo en su gremio de picoteros por cuenta de las amenazas por parte de bandas criminales que les están exigiendo sumas de dinero para no atacarlos a bala.

“Nos están extorsionando y el monto va de acuerdo al tamaño del pick up porque esta gente (los extorsionistas) primero envían a personas a los lugares donde nosotros hacemos nuestras presentaciones con los DJ y ellos ahí hacen un análisis de la capacidad económica que hay”, detalló.

De igual manera, dio a conocer que lo que ocurre con los picoteros de la ciudad es un enano que ha ido creciendo con el pasar del tiempo, pero que nadie se ha atrevido a denunciar por temor a un atentado de los que estas organizaciones criminales están acostumbradas a hacer.

“A las máquinas grandes tengo conocimiento que les han exigido la suma de hasta 50 millones de pesos, pero estos hacen negociaciones y bajan la cuota, pero eso es una esclavitud porque de los toques que se realicen toca sacarles el dinero de ellos (las bandas) porque uno no quiere problemas”, expresó.

Este hombre que se atrevió a dialogar con este medio de la situación, dijo que no entregaría detalles de su caso puntual porque se delataría ante la banda a la que le toca pagar por cada toque o baile al que asista.

“Esto en el mundo picoteril se ha normalizado, aunque hay quienes prefieren desarmar sus máquinas porque dicen que no van a trabajar para otros (los extorsionistas)”, detalló.

Y es que frente al crimen de Luis Carlos Yanett Muñoz, quien era el administrador de un pick up de nombre Super Yonki, indicó que todo es confuso porque existen varias versiones de lo que pasó, pero se reafirma en que sí los están extorsionando.

“Hay quienes dicen que no tuvo nada que ver las extorsiones, pero mira que ese asesinato hizo que esta situación de los picoteros en Barranquilla explotara. Ya la Policía que mire a ver qué pasó ahí”, finalizó.

El entrevistado tampoco se quiso referir al nombre de las bandas, pero hay que decir que en gran parte del suroriente y suroccidente de Barranquilla delinquen Los Costeños y Los Pepes, pero también hay otras organizaciones que quieren tomar poderío de estos territorios.

De igual manera, le contó a este medio que el gremio está planeando una movilización para los próximos días para pedir ayuda a las autoridades locales, pero también mayor eficiencia de la Policía Metropolitana.

Un análisis

Luis Fernando Trejos, experto en temas de seguridad y profesor universitario, fue consultado por SEMANA e indicó que esta situación no es nueva en la ciudad e indicó que estos espacios que mayormente se dan el suroriente y suroccidente de Barranquilla son usados por la bandas para diferentes rentas criminales.

“La cultura picotera en Barranquilla y su área metropolitana ha sido afectada de manera directa e indirecta por las dinámicas de criminalidad que se desarrollan en este territorio por unas razones particulares: lo primero es que la cultura picotera está muy arraigada en las localidades suroriente y suroccidente de la ciudad y son precisamente esas localidades no solo en las cuales los grupos armados ilegales se han arraigado, sino que también son los territorios que están en disputas. En ese sentido, los pick up les son funcionales de distintas formas en sus rentas como lo es microtráfico”, explicó.

Entre tanto, se conoció que las autoridades de Policía en Barranquilla se encuentran analizando estos casos que se han registrado con el fin de brindarle ayudas a los picoteros que hoy también está viviendo el flagelo de la extorsión.