Comerciante fue baleado por sicario cuando trataba de vender camioneta blindada en Bogotá; esto se sabe

José Ernesto Patiño Cardona, un comerciante de 44 años, fue asesinado el pasado 6 de noviembre en el norte de la capital, específicamente en la calle 189 con carrera 8. El hombre, proveniente de Dagua, Valle del Cauca, fue sorprendido en la mañana de ese lunes por sicarios que lo siguieron en moto y le dispararon a la altura de la cabeza.

Todo quedó registrado en videos de cámaras de seguridad del sector que muestran el instante en el comerciante baja de su camioneta blindada color vinotinto y, poco después, fue baleado por el parrillero en moto que le disparó en dos ocasiones.

Se conoció que la víctima alcanzó a ser trasladada con vida al Hospital Simón Bolívar; sin embargo, habría fallecido poco después de ser atendido por el personal médico y a causa de los impactos.

Patiño Cardona, al parecer, residía en la localidad de Suba y ese día habría salido de su casa con el objetivo de mostrar su camionera a posibles compradores. Las autoridades tratan de establecer si su muerte se trató de una retaliación, ya que el hombre habría recibido amenazas contra su vida por parte de una organización criminal dedicada a extorsionar y secuestrar.

De igual forma, también tratan de esclarecer si habría tenido alguna relación con esa organización, pues la víctima habría estado presa dos años en la cárcel La Picota por tenencia de objetos provenientes de actividades ilícitas. Este jueves, 16 de noviembre, según trascendió, la camioneta haría parte de una escuela de aviación aeronáutica.

Todo este caso es materia de investigación por parte de la Fiscalía Seccional Bogotá.

Cayeron seis miembros de Tren de Aragua que extorsionaban a comerciantes

Por otra parte, en una contundente acción contra la presencia del Tren de Aragua en Bogotá, la Policía Nacional logró la captura de seis individuos, tres colombianos y tres venezolanos, señalados de cometer diversos delitos, entre ellos homicidio y extorsión.

La operación tuvo lugar el pasado primero de noviembre en la localidad de Kennedy como parte de la Operación Bogotá, desarrollada en una residencia ubicada en la Avenida Primera de Mayo. En este operativo, los agentes de la Policía Metropolitana detuvieron a los miembros del Tren de Aragua, una organización criminal de origen venezolano reconocida por sus actividades delictivas en la capital colombiana.

De acuerdo con las autoridades, estos criminales utilizaban panfletos amenazantes para intimidar a sus víctimas, exigiendo el pago de 400 mil pesos semanales para permitirles continuar sus actividades comerciales sin temor a represalias.

Durante la operación fue arrestado uno de los principales cabecillas de la banda, apodado El Negro, quien cuenta con un extenso historial criminal con más de 14 anotaciones desde el año 2002, vinculadas a delitos como hurto, fabricación, tráfico y porte de estupefacientes, así como posesión de armas de fuego y/o municiones.

Tras meses de seguimientos, los uniformados determinaron que la acción delictiva de esta banda se concentraba principalmente en las localidades de Bosa, Kennedy, Chapinero, Los Mártires y Santa Fe, con un enfoque particular en sectores como San Victorino, Plaza de las Américas y la Avenida Primera de Mayo.

En el transcurso de la operación, se incautaron diversos elementos, incluyendo 500 dosis de marihuana, 400 dosis de bazuco, 20 panfletos amenazantes con el logo del Tren de Aragua, 15 cartuchos de diferentes calibres, ocho teléfonos celulares, cinco armas de fuego, un arma traumática modificada, una granada de fragmentación y un proveedor.

La operación ha tenido un impacto significativo en la cadena criminal de la extorsión en Bogotá, estimándose que esta banda había recaudado más de 250 millones de pesos mensuales mediante actividades ilícitas.

Los seis detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General para su respectiva judicialización, enfrentando múltiples cargos que incluyen homicidios, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, posesión de armas de fuego y/o municiones, así como extorsiones mediante el uso de granadas de fragmentación.