Nación
Familias pasaron la noche a la intemperie en El Calvario, Meta, por miedo a nuevas réplicas del sismo
Las autoridades de la región se encuentran en alerta.
La angustia y el miedo continúa entre los habitantes del municipio de El Calvario (Meta), luego del fuerte temblor que se registró sobre el mediodía del pasado jueves, 17 de agosto, y cuya magnitud de fue de 6,1 grados, por lo cual en esta localidad se presentaron varias emergencias.
A raíz de este evento sísmico, en tan solo 40 minutos se presentaron otros ocho temblores en el país, de los cuales siete tuvieron lugar en el Meta con epicentros en: San Juanito, Cumaral, Villavicencio y nuevamente El Calvario. Y en menos de 24 horas se han registrado 98 réplicas derivadas del sismo de 6,1, según informó el Servicio Geológico Colombiano (SGC).
Aunque, por fortuna, el movimiento telúrico no dejó víctimas fatales en el municipio de El Calvario, sí se reportaron varios daños materiales. Según el reporte del Consejo Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres (CDGRD) del Meta, en el mencionado municipio seis viviendas quedaron destruidas, otras 21 averiadas, 50 más con afectaciones leves y en el casco urbano se afectó el fluido eléctrico, adicional a esto se presentaron 15 movimientos en masa.
Ante este panorama y dada la constancia de las réplicas del sismo, varias familias de El Calvario tomaron la decisión de abandonar sus viviendas y pasar la noche en otros lugares, con el propósito de estar alerta ante una nueva emergencia.
“Algunos se acomodaron en camiones, otros en la concha acústica y algunos en el parque. Bueno, y algunos durmieron en sus casas, pero obviamente no durmieron, es decir, porque realmente yo creo que todo el mundo pasó en vela”, dijo a Blu radio Wilson Antonio Alférez, alcalde de El Calvario.
Cabe precisar que ni un sismo principal ni las réplicas no se pueden predecir, “es decir, no podemos saber el momento en el que va a ocurrir, ni la magnitud ni el intervalo en el que van a estar ocurriendo”, señaló el director de Geoamenazas, John Makario Londoño.
Precisamente, el no saber si puede ocurrir o no un temblor aumentó la angustia y el miedo entre los habitantes de El Calvario. “Realmente fue una noche larga, tensa, complicada. Cada réplica era volver a repetir el susto de la primera que fue tan fuerte. Y ya llegaba la noche, esto se agrava, el susto, el nerviosismo que causa en horas de noche es más complejo que en el día”, agregó al citado medio el mandatario local .
Este viernes las autoridades y organismos de socorro continúan realizando un barrido por todo el departamento del Meta para determinar exactamente la cantidad y magnitud de los daños presentando a raíz del fuerte temblor, cuya profundidad fue menor a los 30 kilómetros.
“Nos falta muchísimo, la verdad, hay graves afectaciones, muchas viviendas con niveles de afectación diferentes”, sostuvo el alcalde de El Calvario.
Otro de los lugares gravemente afectados en el municipio fue la Institución Educativa Juan Bautista Arnaud, cuyos salones quedaron destrozados y parte del material del techo quedó en la mitad de una de las aula, según imágenes compartidas a través de redes sociales.
Afortunadamente tanto estudiantes como docentes y demás personal de la institución lograron salir a tiempo y salvar sus vidas. Este viernes, al parecer, las clases están suspendidas.
El director de Geoamenazas afirmó que las réplicas “van a estar reproduciéndose por mucho tiempo, incluso a veces semanas o meses, pero la mayoría de ellas no van a ser percibidas por las personas”.