“Hay democracia si participa la comunidad académica”, así se pronunció Leopoldo Múnera, como nuevo rector de la Nacional

La Universidad Nacional tiene nuevo rector luego de la gran polémica que surgió por la elección de José Ismael Peña, que llevó a la comunidad académica a manifestar su rechazo, y que, este jueves 6 de junio, tras una reunión extraordinaria del Consejo Superior Universitario (CSU) se decidió que Leopoldo Múnera es quien dirigirá la institución educativa.

Múnera contó con el respaldo de cinco consejeros, en medio de la sesión extraordinaria, en la que otros consejeros (Ignacio Mantilla, Diego Torres y Verónica Botero) abandonaron la reunión. El Consejo Superior Universitario firmó una resolución en la que dejó sin piso la elección de Peña, quien fue escogido por un proceso democrático el 21 de marzo de 2024.

Tan pronto se conoció la elección del nuevo rector, los estudiantes y docentes de la Nacional felicitaron a Múnera, quien se desplazó acompañado por varios alumnos hasta el auditorio León de Greiff, donde se pronunció ante la decisión que hoy lo faculta para liderar la universidad.

El nuevo rector agradeció el apoyo de los estudiantes y profesores resaltando el papel de la comunidad académica que impulsó su candidatura: “Hay autonomía si el sujeto es la comunidad académica; hay transformación de la universidad si la transformación la hace la comunidad académica; hay democracia si participa la comunidad académica”, dijo Múnera.

El docente también indicó: “A pesar del cansancio, a pesar de la ansiedad, de la dificultad, del desconcierto, hemos asistido a un nuevo renacer. Hay que ver lo que ha sucedido en Bogotá, pero también las dinámicas propias de los profesores en las facultades que se autoproclamaron en claustros”, destacando el papel que desempeñan las nueve sedes de la Nacional, “y con ellas hay que trabajar en los territorios”.

Múnera hizo una invitación a que, además de trabajar en los territorios, hay que “pensar en la nación desde los territorios, es un trabajo y un reto que tenemos de aquí en adelante”, y recordó que “estamos aquí por la movilización, estamos aquí en un nuevo despertar de la Universidad Nacional”.

En medio de su discurso envió un contundente mensaje al mencionar que “el proceso constituyente no para” en la institución académica, ante lo cual fue ovacionado por los que estaban presentes en el auditorio.

“Hay que organizarlo, hay que darle el apoyo institucional para que podamos tener la reflexión colectiva sobre la universidad que queremos, colectiva, para que seamos muchas mentes pensando la Universidad Nacional, para que aprendamos a respetar el pluralismo, a escucharnos, a saber que hay ideas desde diferentes partes”, dijo.

Múnera explicó que es un proceso que “no está ligado a ningún gobierno, que viene de atrás, que es nuestro proceso. Es un proceso que estamos haciendo y que vamos a seguir haciendo. Después de estos dos meses necesitamos un diálogo para ver cómo retomamos todas las actividades”.

Esto debido a que durante el tiempo que se rechazó la elección de Peña, la Nacional decidió entrar en un paro indefinido, por lo que ahora el recién elegido rector señaló: “Habrá una propuesta de calendario académico que no tiene la prisa de retomar todo ya porque eso es imposible”.

“Tenemos que tener un momento de reflexión sobre lo que ha pasado, que podamos asimilar lo que ha pasado y que podamos organizar nuestros tiempos de aquí a final del próximo año y que tengamos tiempo para el proceso constituyente”, sostuvo.

Múnera puntualizó que la Universidad Nacional “tiene una autonomía que no se negocia y esa autonomía es muy importante, y que esa autonomía no es del grupo que dirige la universidad”.

La elección de Múnera como nuevo rector se hizo en una jornada en la que varios profesores denunciaron que el Gobierno nacional pasó por encima de la autonomía universitaria.

Tan pronto se conoció la designación del nuevo rector de la Universidad Nacional, el representante de los maestros en el Consejo Superior, Diego Torres, le pidió a la Procuraduría General de la Nación, al Consejo de Estado y a la Fiscalía General de la Nación que iniciaran las acciones legales necesarias para apoyar a la Universidad y se defendiera su autonomía universitaria.

La universidad vivió momentos de tensión cuando Múnera fue el escogido tras el triunfo de Peña, por lo que el presidente Gustavo Petro puso en marcha toda una estrategia para evitar que el segundo asumiera el poder en la institución universitaria. De hecho, la ministra de Educación, Aurora Vergara, se opuso a firmar las actas de la sesión en la que ella había participado, y evitó que Peña se posesionara en su cargo.