Bogotá
Los Camaleones y Los Empresarios eran el terror de los comerciantes del sur de Bogotá: así cayeron las dos estructuras criminales
Seis operativos de allanamiento permitieron la captura y judicialización de varios de los miembros de estas bandas delincuenciales.
La unidad de investigación criminal de la Policía Metropolitana de Bogotá, en colaboración con la Fiscalía General de la Nación, logró desmantelar dos grupos delictivos conocidos como Los Camaleones y Los Empresarios. Esto fue posible gracias a intensas investigaciones y la recopilación de horas de imágenes de cámaras de seguridad, que evidenciaban las actividades delictivas de estas organizaciones en diferentes localidades de la ciudad.
En el marco de la investigación por delitos relacionados con la extorsión, se llevaron a cabo seis operativos de allanamiento y registro, resultando en la detención de cinco personas con órdenes judiciales y la imputación de tres individuos por el delito de hurto calificado y agravado, en colaboración para cometer actos delictivos.
Los Camaleones eran una estructura criminal que operaba en las localidades de Puente Aranda, Ciudad Bolívar, Tunjuelito y Fontibón. Se les atribuye la responsabilidad de cinco robos a establecimientos comerciales, utilizando técnicas como el hurto por ventosa (que consiste en el ingreso a comercios escalando paredes o perfrandolas) y el asalto a mano armada, con el objetivo de saquear obras o almacenes que albergaban maquinaria amarilla y herramientas de construcción valuadas en aproximadamente 367 millones de pesos.
Esta organización delictiva estaba liderada por el alias Care Crimen, y contaba con la participación de alias Nidia, Yefer y Jhon, quienes llevaban a cabo los robos intimidando y amenazando a las víctimas con armas de fuego.
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Por otro lado, Los Empresarios estaban implicados en siete robos a establecimientos comerciales en las localidades de San Cristóbal y Kennedy. Esta organización, de acuerdo con el reporte de la Policía de Bogotá, estaba encabezada por alias El Negro y contaba con la colaboración de alias Orejas y Cristian, quienes ejecutaban los robos, y alias Stic, encargado de ser el conductor y buscar rutas de escape para evadir a las autoridades junto con sus cómplices.
Estos individuos tenían antecedentes por delitos como el hurto calificado, porte ilegal de armas y tráfico o fabricación de estupefacientes. Durante los operativos, los uniformados decomisaron 18 cartuchos de munición calibre 7,65x17mm para armas de fuego, por lo que fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación, donde un juez de garantías ordenó su encarcelamiento preventivo.
La Policía Nacional hizo un llamado a la ciudadanía a denunciar oportunamente cualquier hecho delictivo a través de la línea de emergencia 123.
Cayeron señalados de asesinar a un policía
Por otra parte, el trabajo conjunto de uniformados de la Sijín de la Policía y funcionarios de Fiscalía General permitió que dos sospechosos fueran arrestados por su supuesta participación en el asesinato de un patrullero por hurtarle sus pertenecías. El uniformado estaba adscrito a la estación de policía de Kennedy, suroccidente de Bogotá.
De acuerdo con la línea de tiempo establecida para dar con los responsables, los hechos ocurrieron en la madrugada del primero de julio de 2022, donde la víctima fue abordada por dos individuos armados mientras caminaba a casa después de salir a socializar con algunos compañeros de trabajo. El oficial se resistió al robo y fue baleado dos veces, lo que le causó la muerte.
Los dos presuntos responsables, identificados con los alias de Chuki y Gomelo, fueron capturados en las últimas horas por orden judicial en las localidades de Soacha y Bosa. La Sijín de la Policía de Bogotá utilizó horas de video para identificar a los sospechosos, quienes se movilizaban en una motocicleta de alta gama en el momento del crimen.
Ambos individuos tenían antecedentes en el Sistema Penal Acusatorio (SPOA) por delitos como homicidio, hurto calificado, falsificación de marcas, uso de documentos falsos, lesiones personales, inasistencia alimentaria y tráfico y porte de estupefacientes.
Uno de los capturados, alias Gomelo, supuestamente admitió haber disparado al oficial de policía durante el robo. Un juez con función de control de garantías dictó medida de aseguramiento en un centro carcelario contra los dos sospechosos por el homicidio.