Bogotá
Preocupación en barrio de Chapinero por deslizamientos a causa de las fuertes lluvias
La comunidad del barrio San Martin de Porres continúa bajo alerta.
El fenómeno de La Niña ha derivado en un enero atípico en varias regiones del país. Las fuertes y constantes lluvias han generado emergencias en diferentes sectores como, por ejemplo, el barrio San Martín de Porres, localidad de Chapinero, en Bogotá.
Hace unos días se produjo una remoción de masas en un sector residencial, además, un deslizamiento de tierra llevó gran cantidad de material al canal Cataluña, ubicado en ese mismo barrio.
Por medio de Twitter, la Personería de Bogotá publicó imágenes del panorama en ese sector de Chapinero. Así mismo, anotó que ya se venían emitiendo alertas tempranas desde noviembre de 2022, sin embargo, las autoridades distritales no habrían atendido oportunamente el llamado.
#OlaInvernal Esta es la remoción de masas que se registró en el Barrio San Martín de Porres, localidad de Chapinero, la @personeriabta había emitido las alertas 🚨 respectivas a las autoridades distritales competentes desde noviembre 2022. 🧵 pic.twitter.com/VidcSqdy78
— Personería de Bogotá (@personeriabta) January 14, 2023
“Ese problema lo tenemos hace cuatro años, ya vino la Personería local de Chapinero con el alcalde Óscar Yesid Ramos, vino el Idiger, pero nunca hicieron nada”, indicó Sol Maritza Rojas, presidenta de la Junta de Acción Comunal. A su vez, resaltó que no han recibido apoyo de parte del Estado.
Tendencias
Tanto la remoción de masas como los deslizamiento ya ocurridos han encendido las alarmas en el barrio San Martín de Porres. Es de resaltar que, según los pronósticos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), las lluvias podrían continuar hasta marzo, por lo que el tiempo húmedo seguiría siendo protagonista durante el primer trimestre de 2023.
“El riesgo de nosotros es que eso se rebote hacia las casas y nos quedemos sin nada. La tierra sigue cayendo y la remoción de tierra ya está llegando hasta nuestras casas, ya no está tapando las entradas”, manifestó Blanca Lilia Piraján, residente del barrio San Martín de Porres.
Según comentó la mujer, solo en su cuadra hay 25 casas, las cuales comparten el mismo riesgo en caso de que la tierra siga cayendo o, en el peor de los casos, ocurra un deslizamiento de mayores proporciones.
Frente al potencial riesgo que corren los habitantes del barrio San Martín de Porres, la Personería de Bogotá reiteró el llamado a la Alcaldía local de Chapinero para que se activen las alertas. De paso, se le solicitó al Acueducto de Bogotá realizar el debido mantenimiento en el sector, pues la misma comunidad ha tenido que encargarse de remover el barro y los escombros frente a sus casas.
Monumental granizada en Gachancipá: las montañas quedaron completamente blancas
En la tarde del sábado 14 de enero, se registraron fuertes lluvias y una descomunal granizada en el municipio de Gachancipá, Cundinamarca. Según el reporte de los bomberos, la emergencia ocasionó inundaciones en varios sectores.
Las lluvias comenzaron hacia las 4:00 p. m. y se extendieron hasta las 7:00 p. m., por lo que fueron tres largas horas durante las cuales llovía a cántaros. A raíz de la emergencia, la comunidad reportó inundaciones en la vereda La Aurora, sectores Kanela Real, Villa Olímpica, el barrio Asivag, y en las carreras cuarta, tercera y primera.
“Se presentan también remoción en masa en la vereda San Bartolomé, en tres puntos, caída de árboles sobre la vía interveredal. Afectación por granizada en viviendas en casco rural, vereda San Bartolomé, viviendas desentejadas, pérdida de bienes materiales como lo son camas, colchones, cobijas, ropa, electrodomésticos y la capa vegetal, que es alimento para ganado y animales del campo”, detalla el reporte de los bomberos.
En total, la emergencia dejó 20 familias afectadas en el sector, donde la comunidad reportó pérdida total en sus cultivos.
“Quedamos sin pasto para el ganado (...). El galpón también se cayó ayer. Pedimos colaboración de los entes”, dijo uno de los habitantes afectados.
“Se nos mojó todo (...). Se nos metió el agua, se nos dañó el galpón, se nos dañó el establo, se nos dañaron todas las huertas, mejor dicho, pérdida total”, anotó otra vecina del sector.
“Pensamos que íbamos a morir”.
La granizada fue de tales dimensiones que el miedo y el pánico fueron las sensaciones predominantes en los habitantes de la zona que sufrió mayor afectación.
“Mucho miedo, pánico, pensamos que íbamos a morir”, dijo una vecina al oficial de bomberos que visitó el sector. Así mismo, indicó que los animales no tienen qué comer, pues el granizo arrasó con todo.
Las imágenes son impresionantes. Varias calles en la zona urbana terminaron bajo el agua, mientras que el granizo cambió radicalmente el paisaje en las montañas. La verde vegetación quedó sepultada bajo una gruesa capa blanca de granizo, como si se tratara de una nevada en los Alpes suizos durante el invierno.
Según destacaron los pobladores, nunca antes habían visto este fenómeno. Además, a causa del granizo, los animales de pastoreo quedaron sin su principal fuente de alimento.