Bogotá
Una ambulancia protagonizó un fuerte choque en el sur de Bogotá
El conductor del vehículo del servicio de salud resultó herido.
En la mañana del sábado 29 de abril se presentó un accidente entre una ambulancia y un vehículo particular el cual dejó como saldo una persona herida.
En ese mismo sentido, las autoridades identificaron que el automotor que presta servicios de salud no habría respetado una señal de ‘Pare’, por lo que embistió al carro particular, causando así el fuerte accidente. Vale la pena destacar que la ambulancia no tenía sus luces y sirenas activadas, ya que al momento del choque no trasportaba ningún usuario.
El choque ocurrió en el barrio Santa Rita, ubicado en el sur de Bogotá y allí, una cámara de seguridad registró el momento exacto en que la ambulancia se lleva por delante al vehículo particular. Como consecuencia de este accidente de tránsito el automotor de servicio de la salud terminó estrellada contra un poste.
De acuerdo con la información oficial entregada por los Bomberos de Bogotá, la persona que resultó herida se movilizaba en el interior de la ambulancia. Se trata del conductor de este vehículo, quien por la magnitud y fuerza del golpe quedó aprisionado contra el volante del carro, lo cual no le permitió salir de este por sus propios medios, por lo que fue necesario la presencia y atención de un equipo de rescate.
“Bomberos de las estaciones Central, Restrepo y con el Equipo Técnico de Rescate, realizan el rescate y brindan atención prehospitalaria a una persona que resultó atrapada y lesionada por la colisión de un vehículo particular y una ambulancia, en la calle 40A sur con carrera 29. El paciente es entregado a Secretaría de Salud. Hace presencia Ponal de Tránsito”, señaló la información del Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá.
Luego de las labores de rescate, el conductor de la ambulancia pudo salir del vehículo y fue puesto a disposición de la Secretaría de Salud para que evalúe la magnitud de sus lesiones.
Aterrador: las ambulancias en Bogotá tienen fallas eléctricas y hay pacientes que han muerto esperando el traslado
“Es una inversión alta y eficiente. Es un paso más para tener un servicio de salud pública digno, que ayudará a mejorar la atención, oportunidad, el tiempo de llegada y la calidad de la respuesta a los bogotanos”.
Con estas palabras, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, anunció en marzo de 2022 la adquisición de 151 ambulancias tras una inversión de 36.000 millones de pesos. Lo hizo en compañía del secretario de Salud, Alejandro Gómez, en la Plaza de Bolívar.
Un año y un mes después, las promesas de López quedaron en el aire. SEMANA recopiló testimonios de conductores y personal médico del servicio de Atención Prehospitalaria (APH) de la Secretaría de Salud, con 30 años de experiencia, que señalan que esa compra terminó siendo un descalabro. Los trabajadores pertenecen a las cuatro subredes del Distrito (Centro-Oriente, Norte, Sur y Sur-Occidente) y sufren con las nuevas ambulancias.
Son tantas y tan graves las fallas de los vehículos referencia NHR que ya han cobrado la vida de pacientes. Algunas historias son desgarradoras. Por ejemplo, una alta fuente del Distrito reveló a esta revista un abrumador suceso ocurrido en el barrio María Paz, en Kennedy, con una niña de tan solo 7 años.
El Centro Regulador de Urgencias y Emergencias (CRUE) recibió una alerta por código blanco, es decir, por violencia sexual, y de inmediato designó una ambulancia para acudir al lugar.
Cuando el personal médico llegó a la zona, la escena que encontraron fue desconcertante. La menor había sido empalada por su padrastro, lo que le generó una ruptura en varios de sus órganos. La hemorragia era incontrolable. La niña, en la ambulancia, entró en paro cardiorrespiratorio, pero, lastimosamente, el vehículo tipo NHR presentó una falla eléctrica: al conectar el monitor de signos vitales y el succionador de sangre, la ambulancia se apagó por completo, no tuvo cómo arrancar y la niña finalmente falleció.
Las fallas eléctricas son el pan de cada día. Hace tan solo 15 días, un hombre de la tercera edad, y que sufrió un infarto en Arborizadora Alta en la localidad de Ciudad Bolívar, tristemente perdió la vida porque la ambulancia, recientemente comprada por el Distrito, que fue designada para su atención médica, llegó tarde después de que el vehículo se apagara y la tripulación tuviera que bajarse a empujarla.