Bogotá
Violencia en el SITP: conductor y usuario se fueron a golpes dentro de bus; el funcionario fue despedido
El 14 de marzo ocurrió una pelea entre dos personas dentro de uno de los vehículos del transporte público de Bogotá. Las autoridades se encuentran realizando las pesquisas correspondientes.
Un nuevo caso de violencia ocurrió el 14 de marzo al interior de un bus de SITP en la localidad de Usme en Bogotá. En esta ocasión y por el video que circuló en redes sociales, el conductor reaccionó agresivamente ante el reclamo de un usuario, arrinconándolo y golpeándolo.
En el fragmento del material audiovisual, se muestra cuando el conductor del bus ataca a un usuario cerca de una ventana, propinándole en reiteradas condiciones golpes en la cara y pecho.
#INACEPTABLE. En video quedó registrado un acto de intolerancia en el que un conductor de SITP en la loc. Usme (Bogotá) le propinó una golpista a un joven que le había reclamando no haberse detenido en una de las paradas.
— Colombia Oscura (@ColombiaOscura) March 16, 2023
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Con base en la información de los ciudadanos que presenciaron el momento, la raíz del suceso habría sido que el usuario le dijo al conductor que no había parado en uno de los puntos que cubre la ruta, el cual era el que él necesitaba. Al inicio, hubo un intercambio de palabras, varias de estas subidas de tono. Sin embargo, la situación se hizo más tensa, a tal punto que culminó a los golpes.
Horas después, dos entidades se refirieron sobre el hecho. Por un lado, TransMilenio emitió un comunicado en el cual dio a conocer las medidas que se tomaron. Por otro, la entidad indicó que rechaza enfáticamente cualquier tipo de agresión verbal, física o manifestación violenta que ocurra al interior de sus instalaciones, dado que no representan los valores institucionales de la empresa.
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Sumado a ello, informaron que empezaron a recoger la información necesaria para establecer las causas que ocasionaron el suceso. Mientras tanto, le solicitaron al concesionario donde el conductor estaba adjudicado que llevara a cabo las acciones correspondientes para hacer cumplir las normas del manual de operaciones del sistema. Finalmente, la compañía indicó que el operador quedó suspendido de sus funciones.
El concesionario al cual estaba ligado el protagonista del video era Gran Américas Usme S.A.S, organización que también se pronunció sobre el caso. Al igual que TransMilenio, lamentó y rechazó los hechos ocurridos, informando que el suceso se encuentra bajo investigación al interior de la entidad, lo que conllevará a “tomar las acciones necesarias, para evitar y sancionar este tipo de conductas que bajo ninguna circunstancia son toleradas por el concesionario, que no nos representan y van en contra de nuestros valores corporativos”.
Adicionalmente, afirmaron que están de acuerdo con la resolución de conflictos mediante el diálogo, dado que es el camino para construir paz de forma conjunta y articulada entre empresas, particulares y funcionarios. “Ninguna circunstancia justifica la violencia entre usuarios y operadores”, señaló el comunicado.
El ciudadano implicado en el suceso fue reconocido como Henry Perilla. Por su parte, TransMilenio no ha dado a conocer el nombre del exfuncionario implicado, sosteniendo que, como se encuentra en medio de una investigación, el nombre se mantendrá reservado.
Estaciones más peligrosas
A inicio de año, la Secretaría de Movilidad de Bogotá dio a conocer las estaciones de TransMilenio más peligrosas, basándose en el grado de robos que se presentan en cada uno.
Avenida Jiménez, Universidades, Portal Norte, Banderas, Calle 76, Las Aguas, Marly, Calle 72 y Calle 26 fueron las estaciones más inseguras que expuso el informe. Cabe mencionar que dos de las tres estaciones que hacen parte del Eje Ambiental están en los primeros puestos, junto con la estación de la Jiménez, la cual conecta esta zona con la vía a las Américas.
Por otro lado, el estudio reveló que la modalidad de hurto más frecuente es el denominado cosquillero, en el cual los ladrones aprovechan la masa de personas esperando o entrando al bus para manosear a los usuarios y quitarles sus pertenencias sin que se den cuenta. Por su parte, el Concejo de Bogotá dio un balance del número de hurtos que se dieron el año pasado en Transmilenio y allí se encontró que hubo 14.000 casos de los cuales 8.000 fueron en buses y los 5.778 restantes en estaciones.