NACIÓN
El alarmante panorama del bocachico en Colombia, ¿está en riesgo?
Con este descubrimiento se podrán realizar investigaciones más profundas que faciliten la reproducción de la especie.
El hábitat de los peces se está degradando. El pescado es un recurso natural y, a su vez, de acceso abierto; esto lo convierte en un recurso estratégico y con alto grado de amenaza debido a su constante pesca, así mismo sus hábitats están siendo contaminados, situación que acelera su posible desaparición.
Ante este preocupante panorama, desde 2018 un grupo de científicos colombianos, uruguayos y chinos comenzó a estudiar el bocachico, la especie de pescado más consumida en Colombia, con el fin de proteger y conservar el uso sostenible de los recursos pesqueros nativos del Magdalena Medio.
Durante este lapso, se han desarrollado diferentes investigaciones en biología básica y aplicada, producción, reproducción, nutrición, nutrigenómica, genética y genómica. Según el primer reporte de este estudio, cuyo avance es el 94,4 %, los científicos ya encontraron el genoma para evitar la extinción del bocachico.
“Iniciamos haciendo captura, muestreo de peces en diferentes cuerpos de agua natural donde él habita y, finalmente, logramos extraer el cerebro de un espécimen hembra, del río Magdalena, de 860 gramos de peso y 43 centímetros de longitud”, explicó zootecnista Jonny Yepes Blandón, coordinador de la investigación.
Lo más leído
El pez se llevó a los estanques de la piscícola San Silvestre, en Barrancabermeja (Santander), mientras se esperaba su adaptación en cautiverio para hacer allí los análisis en diferentes laboratorios tanto nacionales como internacionales. Estos finalmente revelaron que el bocachico tiene 23 pares de genoma, al igual que el ser humano, pero los diferencia que esta especie cuenta con alrededor de 1.200 millones de nucleótidos y el humano, 3.000 millones.
“Con el genoma ensamblado y anotado será posible estudiar con mayor resolución el desarrollo y comportamiento del pez frente a alteraciones ambientales e identificar características genéticas de interés para la reproducción y producción, con lo cual se pueden desarrollar mejores alternativas de solución a la crisis de nuestros recursos ícticos y pesqueros. Servirá incluso para el ensamblaje de genomas de otras especies, ya que este es el primer genoma ensamblado para el género Prochilodus y para toda la familia Prochilodontidae”, precisó el experto.
La investigación se sustentó en siete puntos claves:
- Es una especie endémica de Colombia, presente en las cuencas de los ríos Magdalena, Cauca, Sinú y Atrato.
- Es un pez emblemático que ocupa el primer lugar en las pesquerías continentales de Colombia, con un alto impacto en la seguridad alimentaria y generación de ingresos para las comunidades ribereñas.
- Goza de gran aceptación en el mercado, buena adaptación al cautiverio y resistencia a la manipulación.
- Se ha visto afectado por la sobrepesca, el uso de artes de pesca como el liso o trasmallo, la contaminación y por la degradación ambiental de los ríos y ciénagas que conforman su hábitat.
- El bocachico fue clasificado como vulnerable en el Libro rojo de peces dulceacuícolas de Colombia.
- Es una especie para la cual hay reducida información genética y genómica clave para iniciativas de conservación y repoblamiento.
- Es la especie más usada en repoblamientos de la cuenca del río Magdalena.
Según las estadísticas pesqueras de la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (AUNAP) en 1974 había un registro de 80.000 toneladas de aprovechamiento de bocachico en el país, especie que en los últimos años ha bajado hasta las 10.000 toneladas. No obstante, continúa siendo el pez que más aporta a los volúmenes de pesca en los ríos Magdalena, Sinú y Atrato y sus afluentes.
Este estudio fue costeado por Isagen en convenio con la Piscícola San Silvestre y publicado en la revista especializada Frontiers in Genetics el pasado mes de enero.