Cinco integrantes de la banda Los Garroteros fueron capturados en Piedecuesta, Santander

Los Garroteros, así se denominaba la banda delincuencial que dirigían Jefferson Johansen Rivero Chaux y Jhonny Esteban González Mosquera, la cual fue desarticulada en las últimas horas en el municipio de Piedecuesta, Santander, por la Policía.

Esta organización criminal, conformada por seis hombres, se dedicaba al tráfico y a la comercialización de estupefacientes en el barrio El Refugio, la vereda Los Monos y establecimientos comerciales del municipio Garrotero, según las autoridades.

“Fueron capturados cinco hombres por orden judicial, mediante la realización de seis diligencias, registro y allanamiento. Estas personas fueron investigadas durante cinco meses, en los cuales se realizó actividades de policía judicial y técnicas especiales de investigación criminal”, explicó el coronel José Óscar Jaramillo Niño, comandante (e) Policía Metropolitana de Bucaramanga.

Entre los capturados se encuentra uno de los cabecillas, Johansen, quien es conocido con el alias de Culos, y cuatro expendedores, quienes fueron identificados por las autoridades como: alias Cletus, Veneco, Ranger y Larry.

Jhonny González, el otro cabecilla y quien es conocido como alias Pocho, aún falta por capturar. Los cinco hombres detenidos, según las autoridades, están involucrados en más de 11 procesos judiciales por diferentes delitos.

“Con esta desarticulación se afectan los eslabones de la cadena criminal como son cabecilla y expendedores. Estas personas delinquían bajo la modalidad de domicilio y punto fijo, afectando entornos recreativos y zonas comerciales del municipio de Piedecuesta”, agregó el coronel Jaramillo.

De acuerdo con la investigación, Los Garroteros obtenían ganancias de hasta 15 millones de pesos mensuales producto de la venta de estupefacientes. Así mismo, se estableció que dos de los capturados eran administradores de establecimientos comerciales dedicados al lenocinio, donde vendían la droga.

A estos lugares se les aplicó una suspensión temporal a su actividad comercial y con las evidencias recopiladas serán presentados para extinción de dominio, indicó la Policía.

Adicional a esto, durante el operativo los uniformados incautaron 560 gramos de estupefacientes, 13 cartuchos calibre 38, 13 cédulas (las cuales se investiga si pertenecen a personas víctimas de hurto), tres celulares, dos armas de fuego, un arma traumática y una gramera.

Los cinco “garroteros” capturados fueron dejados a disposición de la Fiscalía y un juez de Control de Garantías le dictó medida de aseguramiento privativa de la libertad en centro carcelario.

“En audiencia les fue legalizada la captura y se les imputó cargos como presuntos responsables de los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones. Tres de los capturados aceptaron los cargos, ahora están a la espera de la sentencia condenatoria”, dijo Oliden Riaño, director seccional de Fiscalía Santander.

Por su parte, el secretario de Seguridad de Piedecuesta, Camilo Andrés Jerez Cote, aseguró que este tipo de operativos representan un parte de tranquilidad para la comunidad, toda vez que incrementan la percepción de seguridad en el municipio.

“Estos resultados generan una percepción de seguridad en el municipio, por ello desde el fondo de seguridad seguiremos respaldando cada institución judicial brindando apoyo en materia tecnológica, en vehículos, con el fin que puedan dar unos resultados más efectivos”, indicó el funcionario local.

Cabe precisar que en lo corrido de este año, en el área metropolitana de Bucaramanga han sido capturadas 2.415 personas por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, según cifras entregadas por la Policía.