Continúan las agresiones: agente de tránsito fue golpeado por un motociclista en Bucaramanga

Un nuevo hecho de intolerancia contra un agente de tránsito se registró durante la tarde de este jueves, 2 de marzo, en Bucaramanga. Dos hombres, quien se movilizaban en motocicleta, agredieron a funcionario de la Dirección de Tránsito en plena vía pública.

El hecho, que quedó registrado en un vídeo, ocurrió exactamente en la carrera 33 con calle 56, donde el agente de tránsito realizaba controles y verificación de documentos a los conductores. Según se observa en las imágenes, el funcionario le solicitó los documentos al conductor de una moto, quien se negó y se resistió al requerimiento.

Tras dicha petición, el motociclista intentó irse y hacer caso omiso, situación que al parecer generó la confrontación. Pues, para evitar que el hombre huyera del lugar, el agente de tránsito le cerró el pasó atravesando su motocicleta, enseguida otra motociclista que presenciaba la escena reaccionó.

“Uno de nuestros agentes cumplía con su función legal de requerir a un motociclista dedicado al transporte ilegal y que en ese momento movilizaba a una persona sin casco de protección. Al ser requerido, opuso resistencia y argumentó no poseer la documentación en regla”, explicó Carlos Enrique Bueno, director de Tránsito Bucaramanga.

Esta persona, sin medir consecuencias, se acercó al agente y lo tumbó de la motocicleta halando de la llanta delantera. El funcionario quedó tendido sobre la vía, con una pierna atrapada, toda vez que la moto le cayó encima. Esta situación fue aprovechada por los dos motociclistas, quienes así lograron escapar del punto.

“Pero una persona con sentido equivocado de la solidaridad intervino para que el infractor evadiera el llamado de atención y la consecuente aplicación de la sanción”, agregó el director de la entidad.

Ciudadanos que se encontraban en el lugar auxiliaron al agente y lo ayudaron a levantarse. Al sitio llegó personal de la Policía, pero para ese momento los infractores ya no estaban.

“Afortunadamente, son más las personas buenas que entienden la misión de nuestros agentes y acatan el cumplimiento de la ley. Gracias por la solidaridad y el apoyo”, sostuvo Bueno.

Finalmente, el director de Tránsito de Bucaramanga, aseguró que “aunque estos hechos nos entristecen, no nos afligen, por el contrario, nos animan a seguir trabajando con mayor optimismo por la movilidad segura y responsable”.

Según cifras entregadas por la entidad, durante el 2022, en Bucaramanga se registraron cerca de 15 casos de agresiones contra agentes de Tránsito. Ante esta situación, la Policía metropolitana ha estado haciendo acompañamiento a los funcionarios de la DTB.

Cabe recordar que semanas atrás se registró un hecho similar. Esta situación tuvo lugar en la calle 67, cerca del sector conocido como la Puerta del Sol, donde los alféreces adelantaban actividades de registro y control a vehículos. En medio del operativo, le hicieron la señal de pare a una pareja de motociclistas, que al parecer intentó evadir el retén.

Una vez los funcionarios de tránsito lograron que el conductor se detuviera, se acercaron a él y le solicitaron los documentos de la motocicleta para verificar que todo estuviese en orden. Sin embargo, esto desató una reacción violenta del motorizado.

En medio del procedimiento, el motociclista sacó un arma blanca, tipo navaja, que guardaba la mujer que lo acompañaba como parrillera en un bolso; el sujeto descendió de la moto e intentó herir a uno de los agentes para escapar del sitio.

En las imágenes se observa cómo un grupo de cinco funcionarios de la DTB persiguen la motocicleta, algunos intentan reducirlo con palos e incluso lanzándole piedras. Tras una corta persecución, logran alcanzarlo y acorralarlo contra la facha de una construcción, donde luego de propinarle golpes, consiguieron quitarle el arma blanca.

“Este es el arma blanca con el que el sujeto intentó herir a nuestro compañero, gracias a Dios esta situación no pasó a mayores”, se escucha decir a uno de los uniformados que muestra la navaja y posteriormente la camisa de su compañero rasgada.