Aberrante: un hombre abusaba sexualmente de sus pequeñas hijastras de 8 y 9 años en Buenaventura

Un juez de conocimiento condenó a 36 años de prisión a un hombre acusado de abusar sexualmente de sus dos pequeñas hijastras de 8 y 9 años en Buenaventura, Valle del Cauca.

El curso de la investigación permitió determinar que las agresiones contra las hijas de su compañera sentimental se prolongaron durante cuatro años, cuando tenían 8 y 9 años. El sentenciado aprovechaba los momentos en que la madre de las menores salía a trabajar para cometer todo tipo de vejámenes sexuales contra ellas.

En el proceso, se pudo establecer que el hombre ingresaba a las habitaciones de las hijastras en horas de la madrugada y las intimidaba para poder abusarlas sexualmente. El hombre fue encontrado responsable de los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años y actos sexuales con menor de 14 años.

Esta condena se conoce luego del lamentable caso de una menor de edad en Aguachica, Cesar, quien fue abusada y asesinada por un hombre.

Luego de conocerse el lamentable asesinato de la niña Kelly Carolina Carballo Santana, de nueve años, en Aguachica, Cesar, las autoridades confirmaron que capturaron al principal sospechoso de este crimen.

Se trata de Lubin José Chinchilla Carrascal, de 76 años, conocido como ‘El viejo’, según reseña el boletín oficial compartido por la Seccional de Investigación Criminal (SIJIN), en coordinación con la Fiscalía Segunda Seccional de Barrancabermeja.

Este hombre deberá responder por los presuntos delitos de feminicidio, tortura y acto sexual abusivo agravado con menor de 14 años. Los hechos ocurrieron el pasado 13 de mayo de este año, cuando ‘El viejo’ al parecer abusó sexualmente y torturó a la niña.

Posteriormente la habría asesinado en su lugar de residencia, luego la trasladó y abandonó el cuerpo de la niña en el km 63 de la vereda El Minuto, en la vía que conduce de Aguachica a San Martín.

En la escena del crimen (habitación del capturado), la cual se allanó, se encontraron por unidades de criminalística fluidos de vestigios (sangre y semen), un arma cortopunzante, cuerdas y plásticos similares a los encontrados cerca al cuerpo abandonado, un teléfono celular y ropa que la niña tenía el día que desapareció.

Kelly Carolina desapareció en la zona comercial ubicada en la calle quinta, lugar en el que fue vista por última vez, por lo que las autoridades desplegaron un operativo para poder dar con su paradero. Sin embargo, el desenlace fue trágico para la familia de la menor, que se dedicaba a cuidar motocicletas los fines de semana junto a su hermano.