Nación
Angustiante: techos a punto de colapsar y paredes agrietadas amenazan a más de mil estudiantes en Popayán
A diario tienen que arriesgar sus vidas a cambio de no parar sus estudios.
La Institución Educativa República de Suiza, ubicada en la vereda de Torres, en el occidente de la capital caucana, tiene en vilo a padres de familia, estudiantes y profesores que ya no saben qué hacer, pues el colegio está que se viene abajo.
La denuncia la dio a conocer Blu Radio, que indicó que “techos a punto del colapso y paredes agrietadas amenazan a por lo menos 1.060 estudiantes que, ante la falta de interés por parte de las autoridades locales y departamentales, a diario tienen que arriesgar sus vidas”.
Y es que con el fin de no dejar de aprender, los estudiantes y docentes siguen llegando a las instalaciones a seguir con la rutina, sin embargo, oran a diario por que no se genere una tragedia en medio de la jornada escolar.
Ante esto, la junta de padres de familia de la institución generó un escrito dirigido a la Alcaldía de Popayán, donde señalaron lo siguiente:
Tendencias
“Como padres de familia nos preocupa que (...) la infraestructura de la institución colapse en cualquier momento y que genere daños irremediables a toda la comunidad educativa, más aún cuando se conoce que, de parte de la institución educativa, se han realizado todas las gestiones pertinentes para dar solución a la legalización del predio, pero ha faltado voluntad interinstitucional para llevar avante este proceso”.
Según el medio, en el mismo documento los padres de familia manifiestan que no cuentan con una escritura pública del predio, situación que ha impedido gestionar recursos con el Estado para el mejoramiento y construcción de aulas de clases.
“Desde hace más de 20 años se ha venido solicitando a todas las autoridades pertinentes que se lleven a cabo los trámites necesarios para la legalización del predio, donde se encuentra la sede principal, pues, hasta el momento, la escritura no se encuentra a nombre del municipio de Popayán, razón por la cual no se ha podido gestionar los recursos financieros para la construcción de aulas, mejoramiento de espacios y de la infraestructura de la institución, la cual, como se informó con anterioridad en pasadas reuniones y oficios, ya cumplió su vida útil”.
Otras instituciones con problemas
En abril del presente año, SEMANA denunció que más del 80 % de la infraestructura del Colegio Integrado Madre de la Esperanza (Cime), ubicado en el municipio de Sabana de Torres (Santander), estaba en pésimas condiciones. En ese entonces, tanto estudiantes como docentes estaban con miedo de que la institución colapsara en cualquier momento.
“Son cerca de 1.200 estudiantes y en general toda la comunidad educativa, quienes requieren que la administración municipal y departamental intervengan el colegio. De acuerdo con Martha Eugenia Camacho, la rectora de la institución, en reiteradas ocasiones, han advertido sobre esta situación”, se informó en el mes nombrado.
“Las vigas que soportan la estructura son de madera, se encuentran podridas y vencidas, dado los años que tiene de existencia el colegio. Los pisos y techos también están totalmente deteriorados, además el colegio no cuenta campos deportivos para la práctica del deporte y esparcimiento de los jóvenes”, aseguró la rectora.
Asimismo, indicó que el riesgo aumenta cada vez que llueve, ya que las goteras se apoderan a las aulas de clase y debilitan aún más las paredes y techo. Por ello, las directivas lanzaron una alerta para que el colegio pueda ser remodelado y los estudiantes puedan ser recibir su formación en condiciones dignas; y a su vez evitar una tragedia, sobre todo porque los niños siguen asistiendo a clases en un colegio que está en muy malas condiciones.
“Es injusto que siendo el Cime uno de los colegios que más aporta a la cobertura del municipio, no reciba inversión por parte del ente municipal ni departamental en mejoras a la infraestructura, dotación y que ni siquiera cuente con el personal docente y administrativo necesario para ofrecer una educación de calidad a la inmensa población sabanera que ocupa sus aulas”, puntualizó la rectora.