Caleña en Perú tuvo trágico accidente. Este fue el desenlace de su viaje

Angie Melissa Gómez, de 23 años de edad, una joven nacida en Cali que había llegado a Chile para laborar, falleció en medio de un confuso accidente de tránsito en vías de Perú.

Al parecer, Angie habría sido empujada y posteriormente un bus la arrolló cuando regresaba de Chile a Colombia. Se pudo conocer que la joven, quien fue criada en el barrio Belisario Betancur (Comuna 13) de Cali, habría decidido regresar a su ciudad natal después de un año.

Gómez había dejado a su bebé, en ese momento de 7 meses, a su madre y hermana para buscar nuevas oportunidades laborales en Chile.

El viaje de regreso habría sido el pasado 3 de noviembre, al parecer, junto a su pareja sentimental. Supuestamente, la mujer caminaba por una de las vías hacia la ciudad de Arequipa, Perú; en medio de esa travesía, Angie fue atropellada por un buscama, de dos pisos, transporte que opera entre Lima y Arequipa.

La mujer habría colisionado con el frente del bus, golpe que la habría dejado sin vida en el lugar de los hechos. Ahora, el cuerpo de Angie debe ser repatriado, costo que está alrededor en 10 millones de pesos. Su madre, la señora Sandra Cifuentes, indicó que una gestión de la Cancillería permitiría agilizar el traslado hasta Cali.

Por el momento, las autoridades están investigando las causas concretas en las que se presentó el accidente. Mientras tanto, sus familiares indican que la muerte de la joven es muy confusa; incluso, aseguran que a ella la empujaron al paso del bus, pero las autoridades de Perú no han constatado esta versión.

Dos policías fueron atropellados en Armenia

De manera favorable evolucionan dos integrantes de la Policía Nacional que fueron atropellados por una camioneta en la ciudad de Armenia, en hechos ocurridos el pasado domingo 13 de noviembre de 2022, a las 11:32 p. m., en la calle 18 con carrera 20.

Según lo manifestado por el comandante operativo de Seguridad Ciudadana, teniente coronel Fabián Mauricio Medina Argüello, los uniformados que se movilizaban en una motocicleta durante las labores de vigilancia y control fueron embestidos por una camioneta blanca de marca Hyundai, que no respetó el pare.

“Debido al fuerte impacto, nuestros policías caen al suelo y es ahí cuando el conductor del automotor actúa de manera reprochable, ya que no se bajó para ayudarlos, sino que retrocedió su automóvil y se retiró de la escena del accidente, aunque posteriormente se produjo su captura”, explicó.

El oficial indicó que después del incidente llegaron al sitio varios uniformados con personal médico para auxiliar a sus compañeros y trasladarlos a un centro asistencial, en el cual los valoraron para determinar que no sufrían fracturas, pero sí múltiples golpes que hacían necesaria la inmovilización de la pierna derecha en ambos; por esto, la patrullera que conducía la motocicleta recibió 16 días de incapacidad y el subintendente que iba con ella cuatro días.

Al conductor se le practicó la prueba de alcoholemia, arrojando resultado positivo en grado 1, por lo que se procedió a la suspensión de su licencia de manera temporal por seis meses y fue dejado a órdenes de la Fiscalía General de la Nación para que responda por el presunto delito de lesiones culposas.

El coronel Fabián Medina expresó su malestar, porque la pena es excarcelable al ser inferior a los cuatro años, ya que no se contempla una sanción ejemplarizante para que las personas no actúen de una manera tan irresponsable y pongan en riesgo las vidas de los demás.

Un hecho similar se registró a inicios de octubre en la vía La Cordialidad a la altura del municipio de Galapa, Atlántico, donde un vehículo particular arrolló a los uniformados de la Policía Nacional Rafael Barraza Iriarte, de 33 años, y Karoll Barrios Manotas, de 22, quienes sufrieron múltiples fracturas.

En esa ocasión, el conductor, a quien se identificó como Elvis Camilo Escorcia Suárez, de 24 años de edad, también se dio a la fuga, aunque fue detenido después durante los operativos de búsqueda adelantados en la ciudad de Barranquilla.

En otro caso ocurrido en Bogotá, lamentablemente no sobrevivieron Leonardo Vargas Torres, de 26 años, y Maryori Dayana Fernández, de 22, quienes el 3 de julio de este año se dirigían para atender una riña y terminaron arrollados por un bus del Servicio Integrado de Transporte Público (SITP).