NACIÓN
Cayó en Cali la red internacional Los Rolex, dedicada a robar joyas y relojes de alta gama
La banda elegía a sus víctimas en aeropuertos y centros comerciales, especialmente turistas extranjeros.
En una operación coordinada entre la Policía Metropolitana de Cali y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación, fueron capturados seis integrantes de la estructura criminal Los Rolex, dedicada al hurto de relojería de lujo en las principales ciudades de Colombia, algunos países de Suramérica y Centroamérica.
Mediante cinco diligencias de allanamiento en las comunas 3, 5, 10 y 17 de Cali, así como en el sector de Colinas de Calasanz en Medellín, se hicieron efectivas cinco órdenes de captura y una captura en flagrancia por porte ilegal de armas de fuego.
Los extranjeros capturados fueron identificados como: Manuel Alejandro Brea García, Anderson José Farías González, Juan Carlos Hernández Hernández, Vicente Ignacio Gutiérrez Díaz, Deivy Alexander Romero Contreras y el colombiano Edwin Jhoan Romero Contreras.
“Se trata de seis hombres de ciudadanía extranjera conocidos en el mundo delincuencial como Carepan, Nenuco, Mono Loco, Deivy, Manuel y Vicente, el cerebro de esta red criminal, quien tenía la perfilación de las personas a robar; además cuenta con antecedentes judiciales en República Dominicana y Perú, por el delito de hurto”, aseguró el comandante de la Policía de Cali, Daniel Gualdrón.
La investigación de las autoridades permitió establecer que los implicados se encontraban radicados en la capital antioqueña y periódicamente se desplazaban a ciudades como Barranquilla, Bogotá, Bucaramanga y Cali, por lapsos de uno a dos meses, para cometer los hurtos. Evidencias también registran su accionar delincuencial en Argentina, Costa Rica, Ecuador y Perú.
Las autoridades detallaron que aeropuertos y centros comerciales eran los lugares elegidos por Los Rolex para seleccionar a sus víctimas, preferiblemente turistas extranjeros que ostentaban alto poder adquisitivo por su vestimenta, vehículos y en especial relojería de lujo.
“El ‘campanero’ daba la señal para dar inicio de forma automática a la silenciosa y paciente persecución del objetivo. En este punto, el turno era par los ‘marcadores’ que indicaban la ruta en tiempo real a los ‘transportadores’, los últimos de la cadena criminal y determinadores del hurto”, aseguró la Fiscalía.
En la mayoría de los casos abordaban a las víctimas de manera intempestiva en los sitios donde se encontraban, en otros hechos lo hacían en las paradas de los semáforos y en algunos casos, simulaban un accidente de tránsito para llamar su atención; iban directo a los relojes, muchos de ellos avaluados en hasta 480 millones de pesos. Se conocen al menos diez denuncias de estos hurtos con una cuantía aproximada a los dos mil millones de pesos.
Entre los elementos incautados en el desarrollo de la operación, se encuentran tres armas de fuego tipo pistola, una de ellas con rayo láser; un revólver, un arma traumática, munición de diferentes calibres, seis celulares, armas cortopunzantes, tres vehículos con fines de comiso, documentos de identidad entre cédulas y pasaportes venezolanos, dinero en efectivo (6.715.000 pesos), joyas y relojería de lujo avaluados en 500 millones de pesos y y gran cantidad de divisas entre dólares y euros.
Los capturados, entre ellos dos hermanos, fueron dejados a disposición de la autoridad competente que les impuso medida de aseguramiento intramural por los delitos de concierto para delinquir, hurto agravado y calificado, porte ilegal de armas, porte de armas de fuego de uso privativo de la fuerza pública y uso de menores para la comisión de delitos.
La directora Seccional de Fiscalías Cali, Sandra Eugenia González Mina, señaló que el importante resultado de judicialización se hizo bajo el direccionamiento de un fiscal de Estructura de Apoyo (EDA). Asimismo, que los capturados fueron cobijados con medida de aseguramiento en establecimiento carcelario.
“Los cargos no fueron aceptados por los procesados. Esta estructura criminal también hurtaba joyas de alto gramaje. Se pudo establecer que los relojes que hurtaban oscilaban entre 10 mil y 100 mil dólares”, dijo González.