Después de diez horas fue reabierta la carretera Popayán - Cali; derrumbe había provocado cierre total de la vía

El Mayor Jaime Ramírez, de la Policía de carreteras, confirmó que la vía Popayán-Cali fue reabierta luego de que personal del Instituto Nacional de Vías (Invías) adelantaran trabajos en la carretera por al menos diez horas.

La emergencia se había reportado en el sector El Descanso, corregimiento de Pescador, en el municipio de Caldono (Cauca).

“Informamos a todos los usuarios de la vía que la carretera Popayán-Cali se encuentra habilitada en estos momentos. Invitamos a todos los ciudadanos en general a que respeten y acaten la normatividad de tránsito; no excedan los límites de velocidad, no adelanten en sitios prohibidos y recuerden que en casa alguien los espera. Un feliz viaje”, sostuvo.

Cabe recordar que la tierra se desprendió de una montaña ubicada justo a un lado de la carretera y cayó sobre esta importante vía, provocando el cierre total de la misma.

El Instituto Nacional de Vías (Invías) reportó la emergencia en sus canales oficiales: “En el departamento de Cauca, se reporta cierre total en el sector El Descanso”, informó en la tarde del miércoles, 29 de marzo.

El derrumbe, que taponó ambos sentidos de la vía, se presentó exactamente en el kilómetro 47.

De acuerdo con las autoridades, este deslizamiento de tierra se habría presentado tras las fuertes lluvias de las últimas horas en el departamento del Cauca. Incluso, las autoridades ordenaron la evacuación preventiva en tres barrios del municipio de Corinto ante la creciente súbita del río La Paila, donde organismos de socorro adelantan una inspección.

Según el reporte, las zonas más afectadas son La Playa, La Esmeralda, Pedregal, el sector de la galería y los bares.

“Se informa que a esta hora (10:45 p. m.) en la zona rural ha mermado la intensidad de las lluvias, por lo que se espera que en las próximas horas el cauce del río pueda retornar a su normalidad, por lo tanto, las personas que deseen retornar a sus viviendas el miércoles, los cuerpos de socorro apoyarán la labor de limpieza de las casas inundadas”, reportó la Alcaldía de Corinto.

Igualmente, se adelantó un censo de las afectaciones ocurridas en la zona urbana y rural.

“Solicitamos a la comunidad estar atentos a los llamados que se puedan dar por el Sistema de Alerta Temprana y dirigirse en caso de evacuación al Coliseo Municipal. Como ciudadanos debemos ser responsables de la Gestión del Riesgo de Desastres, atendiendo la información oficial que emita la Administración Municipal y no dirigirse a las zonas de riesgo, en este caso, la ribera del río La Paila”, recomendó la Alcaldía.

Por el momento, según informaron, la vía por el puente del río La Paila hacia el municipio de Miranda, Cauca, se encuentra con lodo por el desbordamiento del afluente, por lo que se recomienda transitar con precaución.

Entretanto, otro municipio que se ha visto afectado por las fuertes lluvias es Suárez, también ubicado en el norte del Cauca, donde hay más de 1.600 familias damnificadas. Incluso, dos escuelas se encuentran sin energía y ocho corregimientos de este municipio están sin el servicio de agua.

“En todos los salones hay inundaciones; también hubo muchos vendavales en las casas. Las clases por ahora están suspendidas, ya que hay una orden de nuestra señora rectora para suspenderlas. El momento del fuerte aguacero fue algo desesperante, ya que muchos habitantes se vieron afectados”, señaló José Alirio Ortiz, miembro de una de las instituciones educativas afectadas.

Mientras que uno de los afectados le dijo a Blu Radio que su vivienda se le vino abajo por pedazos y perdió todos los electrodomésticos.

“En primer lugar, bendito Dios que no hubo pérdidas humanas, pero desafortunadamente todo se perdió (enceres, la cama, colchones, electrodomésticos). No hubo tiempo para nada, porque cuando empezaron las lluvias, estaba sentado en un cojín con un niño de 15 meses, cuando empezó a caerme encima bloques de cemento, láminas, me tocó salir corriendo con el niño debajo de los brazos”, relató Samuel Lucumí Ambuila, habitante de Suarez.

También dijo que pasó la noche junto a su familia de pie en una esquina de la vivienda porque no tenían donde resguardarse. “Le pido a la unidad de Gestión del Riesgo es que busquen todos los mecanismos para colaborarnos a todos los que hemos sufrido con esta ola invernal. Eso fue desesperante, hubo tormentas eléctricas, cayó granizo, hubo vientos fuertes, de todo. No necesito que me den plata, necesito que me ayuden con materiales para recuperar mi vivienda, que no tengo donde más meterme, igualmente mi familia”, manifestó Lucumí.