NACIÓN
Grupo paramilitar amenazó a funcionaria de la Defensoría del Pueblo y a un grupo de líderes sociales en el Valle
Las Autodefensas Gaitanistas de Colombia hicieron la amenaza por medio de un panfleto.
Las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AUC) amenazaron a una funcionaria de la Defensoría del Pueblo y a un grupo de líderes del Valle del Cauca.
El grupo paramilitar dijo en un panfleto que los declaraba “objetivo militar” tras realizar un proceso de inteligencia que incluyó seguimientos e infiltraciones.
El panfleto intenta validar las amenazas con base en que, supuestamente, los hoy amenazados financian a la primera línea o tienen a afinidades políticas a estos grupos, los cuales surgieron en el paro nacional del 2021.
“Dentro de la coherencia de nuestra lucha anti insurgente declaramos objetivo militar a los milicianos, auxiliadores y simpatizantes de estas (primera línea)”, amedrentó el grupo paramilitar.
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La Defensoría del Pueblo reaccionó frente a las amenazas. “Rechazamos las amenazas contra una de sus funcionarias y el grupo de líderes sociales realizadas por las AUC”, dijo el defensor regional del Valle del Cauca, Gerson Vergara.
Así mismo, explicó que la entidad activó la ruta de protección ante las entidades pertinentes y solicitó a las autoridades investigar y brindar las garantías de seguridad necesarias.
“Para esa zona del país la entidad mantiene vigente la alerta temprana 001 del 2021 en la que se advierte el riesgo por la presencia de disidencias de las Farc y la guerrilla del ELN; así como presencia de grupos posdesmovilización de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), como las autodenominadas ‘Águilas Negras’ (mediante panfletos amenazantes) y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC)-Clan del Golfo, en zonas suburbanas, así́ como en algunas comunas en donde también operan grupos de delincuencia común y organizada asociados al narcotráfico, cuya violencia configura una grave amenaza para los derechos de la población civil”, aseguró la Defensoría del Pueblo.
En lo corrido de este año, de acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), han sido asesinados 14 líderes sociales y defensores de derechos humanos en el Valle del Cauca.
Hombre recobró la libertad en el Valle
En las últimas horas, fue dejado en libertad un hombre que se encontraba en poder del Frente Jaime Martínez, de las antiguas Farc. La operación humanitaria, que se desarrolló en zona rural de Valle del Cauca, contó con la participación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), la Defensoría del Pueblo, la Misión de Verificación de las Naciones Unidas y la guardia campesina del Valle.
“Las partes en conflicto deben proteger la vida y la dignidad de las personas que no participan o que han dejado de participar en las hostilidades y deben tratarlas con humanidad en toda circunstancia. En ese contexto, saludamos el gesto humanitario del grupo armado al entregarnos a esta persona para que pueda reencontrarse con su familia”, expresó Kian Abbassian, jefe de la Subdelegación del CICR para el suroccidente del país.
Afortunadamente, el hombre se encontraba en adecuadas condiciones de salud y fue traslado por el CICR a otra zona para reunirlo con sus seres queridos y así poder celebrar en esta época de fin de año su reencuentro tan esperado.
“En las liberaciones, cumplimos un rol estrictamente humanitario como intermediario neutral, en razón a ello no hacemos referencia pública sobre las circunstancias en las que pudo darse la privación de libertad de la persona entregada ni revelamos información que pueda afectar su seguridad. Estos estrictos protocolos garantizan la neutralidad, independencia, imparcialidad y confidencialidad con la que trabajamos y nos permite seguir ayudando a quienes se ven afectados por los conflictos armados y la violencia”, agregó Abbassian.
Cabe mencionar que en lo corrido del año, 61 personas han sido entregadas por diversos actores armados al CICR, por lo que la organización humanitaria reitera a las partes en conflicto que, en su calidad de intermediario neutral, está dispuesto a desarrollar otras operaciones humanitarias que conlleven a aliviar las consecuencias de los conflictos armados y la violencia sobre quienes no participan o han dejado de participar en las hostilidades.
“El diálogo que sostiene el CICR con instituciones estatales, comunidades y con actores armados es confidencial. Agradecemos respetar la reserva que mantiene de este tipo de información para poder desarrollar su labor humanitaria y proteger la dignidad de las personas recibidas”, señaló la entidad.