Nación
Investigan la muerte de un caballo que fue atacado con arma de fuego zona rural de Palmira
La Fiscalía empezó la investigación del caso.
En el municipio de Palmira, Valle del Cauca, la ciudadanía y las organizaciones que velan por el bienestar animal piden a las autoridades que se aclaren los hechos en los cuales un ejemplar equino murió en un camino que está rodeado por plantaciones de caña, localizado en la zona rural de esta población.
#Palmira Recibimos vídeo donde un caballo que halaba una carretilla fue asesinado con arma de fuego en las inmediaciones de sembrados de caña, según informan, por parte de vigilantes del Ingenio Manuelita luego de encontrar a la persona llevando caña en la carretilla 🧵 pic.twitter.com/oZRmWXebDI
— Conexión Animal (@RCAnimal) January 18, 2023
Un video publicado por el portal de internet Conexión Animal, a través de sus redes sociales, muestra al animal muerto en el suelo mientras permanece atado con correas a una pequeña carretilla cargada de caña. Según se puede escuchar en la grabación, una persona manifiesta su indignación porque al parecer fue el vigilante de un ingenio quien le propinó un disparo que le causó su deceso en el acto.
Todavía no hay ninguna clase de pronunciamiento por parte de la Alcaldía de Palmira o de la organización empresarial que es dueña de estos terrenos, aunque se conoció que un equipo del Grupo Especial para la Lucha contra el Maltrato Animal, (GELMA), de la Fiscalía General de la Nación, adelantará las investigaciones del caso para determinar con claridad la manera en la cual se presentaron estos lamentables hechos.
Otro suceso relacionado con maltrato animal que por fortuna tuvo final feliz, ocurrió en el barrio Calimio Decepaz, localizado al oriente de la ciudad de Cali, donde la comunidad denunció que un pequeño perro se mantenía atado en las escaleras externas de una casa y siempre estaba expuesto al sol y al agua.
Al lugar llegaron uniformados de la Policía Metropolitana de Cali acompañados de personal del Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente, (DAGMA), quienes pudieron comprobar que este canino de nombre Roky se encontraba en muy malas condiciones de salud e higiene.
De inmediato se procedió a notificar a su propietario acerca del proceso que deberá afrontar por maltrato animal, según lo establecido en el artículo 124 de la Ley 1801 de 2016; mientras que el perrito fue trasladado a un centro veterinario donde será atendido por las profundas lesiones que le provocó en el cuello la soga con la cual lo mantenían amarrado.
En la capital vallecaucana se dispone del Centro de Bienestar Animal, donde se brindan a la ciudadanía programas educativos y de capacitación para la protección de la fauna; además de servicios veterinarios generales en consulta, vacunación, desparasitación, hospitalización y esterilizaciones en el plan de control a la población de caninos, felinos y palomas.
Igualmente, cuenta con servicios de laboratorio clínico, albergue de animales domésticos y atención especializada en tejidos blandos, huesos, oftalmología y etiología. Existe además un equipo capacitado para brindar orientación jurídica, realizar necropsias, trazar planes de bienestar y salud animal en los hogares y coordinar operativos de búsqueda y rescate.
POR maltrato a un perrito se presentó en el barrio Calimio Decepaz de Cali. El grupo de Protección Animal de la Policía junto al Dagma Y rescataron a Roky de la manos inhumanas de su dueño. pic.twitter.com/Z9ONBpupNX
— Cali informa (@caliinforma) January 18, 2023
La legislación colombiana comprende que el bienestar animal consiste en que ninguna especie sufra por descuido de las personas o sea sometida a condiciones que deriven en enfermedades por negligencia y situaciones relacionadas con hambre, sed, estrés, cansancio y malestar físico, entre otras.
El artículo 4 de la Ley 1774 del 6 de enero de 2016, establece que hacia los animales debe existir un trato basado en sentimientos de respeto, compasión, ética y solidaridad, los cuales sirvan para erradicar el sufrimiento causado por descuido, cautiverio o prácticas de abandono.
Para una persona que cause daño o la muerte a un animal se estipulan penas de cárcel que van desde los 12 hasta los 36 meses, así como la prohibición estricta de que tengan relación con alguna especie de fauna por cuestiones de tenencia, profesión o comercio en períodos de 1 a 3 años. Igualmente, puede ser acreedora a una multa económica que está entre los 5 y los 50 salarios mínimos mensuales legales vigentes.