NACIÓN
Alarma por abuso sexual en Cartagena: siete niñas fueron, al parecer, abusadas en un colegio
Son 72 las personas que han sido procesadas por diferentes delitos que atenten en contra de la integridad de niños, niñas y adolescentes de la ciudad.
El pasado 9 de agosto, las autoridades de la ciudad fueron alertadas ante la denuncia de varios casos de abuso sexual en una institución educativa oficial de Cartagena. Al parecer, un estudiante de grado once fue el responsable de los hechos contra dos niñas de seis y ocho años.
La secretaria de Educación del Distrito, Olga Acosta Amer, explicó que en este momento se encuentran abiertas las investigaciones en la institución para indagar lo sucedido. “Esto es una situación absolutamente grave que nosotros condenamos y vamos a llegar hasta las últimas consecuencias para, en compañía de los entes encargados, lograr que esto se castigue con mano firme, porque desde la entidad no permitiremos que ninguna persona manosee y mucho menos violente a los niños en las instituciones educativas”, señaló la funcionaria.
“Ya tenemos nosotros en atención a las menores de edad entre seis y siete años. Con los padres de familia se hizo la entrevista y ellos colocaron la denuncia correspondiente del caso, donde un estudiante de grado once es señalado de tocar a las menores mientras realizaba su alfabetización en los grados inferiores. Las menores participaron en entrevistas psicológicas, también accedieron a exámenes físicos a fin de determinar todos los hechos; ya hay una denuncia penal en camino para determinar qué se puede hacer”, manifestó el comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena, brigadier general Nicolás Zapata.
Así mismo, explicó que en lo que va corrido del año, 72 es el número de personas que han sido procesadas por diferentes delitos que atenten en contra de la integridad de niños, niñas y adolescentes de la ciudad, con tocamientos, agresiones y abusos sexuales.
“Esta es una situación de tipo tres, que requiere ya no un tema de manejo de la escuela, sino que trasciende a las competencias del colegio y se pueden considerar como delitos sexuales, ya tiene que entrar a intervenir un adulto representante de los niños que son quienes hacen que se activen las rutas, tal y como se hizo desde el primer momento por parte del rector”, señaló el comandante.
Por otro lado, la Secretaría de Educación reconoció que la situación es más alarmante de lo que se contemplaba y que, además de estos dos casos, otras cinco niñas han manifestado haber sido agredidas sexualmente por el joven de 18 años.
“Son siete las niñas del mismo curso, quienes fueron tocadas por un muchacho del mismo colegio que estaba haciendo servicio social obligatorio, en donde solamente había entrado siete veces al colegio de las 40 horas que debía prestar”, precisó Acosta Amel.
Mientras tanto, el comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena explicó cuál es el paso a seguir luego de las denuncias.
“Una vez conocido el caso por parte de la policía de infancia y adolescencia, frente a los presuntos actos abusivos en contra de las menores, lo que se hizo inicialmente es colocar en conocimiento de la autoridad competente, en este caso, la Comisaría de Familia y el Bienestar Familiar. Ellos ya se encuentran realizando el trámite respectivo con la Fiscalía y de parte de la Policía se dio inicio a la ruta de atención, se ha orientado correctamente a la familia y se ha hecho el acompañamiento. Lo que sigue en adelante es el conocimiento de la Fiscalía, para que se tomen las decisiones oportunas por parte de este ente”.
Condenan a un seminarista por abusar a un menor de edad en Antioquia
Un juez envió a la cárcel a un religioso de 43 años que abusó sexualmente de un menor de edad mientras estaba matriculado en un internado del municipio de la Estrella, población del sur del Área Metropolitana del Valle de Aburrá. Así lo señaló la Fiscalía General de la Nación en medio de un proceso penal que inició en 2020 luego de la denuncia de la familia.
El material probatorio da cuenta de que el seminarista, oriundo de Guatemala, cometió los delitos entre julio y agosto de ese mismo año, época en que el mundo estaba confinado por la alta presión que hubo en los sistemas de salud por cuenta de la pandemia de covid-19. Ante la soledad del momento, violentó a un niño de 12 años.