Golpe a la delincuencia: desarticulan banda dedicada a vender drogas en Cartagena

Un nuevo golpe contra el grupo armado organizado Autodefensas Gaitanistas de Colombia, vinculada al tráfico de estupefacientes, fue propinado por la Policía Nacional con el apoyo de la Fiscalía General de la Nación, capturando a tres presuntos delincuentes, por el delito de tráfico de estupefacientes, en el corregimiento de Bayunca.

De acuerdo con la Policía Nacional, por medio de varios allanamientos en el sector La Invasión, del corregimiento de Bayunca, logrando desarticular una cadena multicriminal dedicada al abastecimiento de sustancias estupefacientes, especialmente marihuana, base de coca y drogas sintéticas.

“En el lugar se encontraron 750 dosis de marihuana, 265 dosis de pastillas de bazuco, 120 pastillas alucinógenas, un arma de fuego tipo pistola, tres cartuchos, una licuadora, una gramera y mil empaques para dosificar la sustancia”, indicaron las autoridades.

La investigación determinó que este punto de expendio, al parecer, distribuía mensualmente más de 15 mil dosis de estupefacientes, dejando una renta criminal cercana a los 200 millones de pesos al mes.

Entre los capturados figuran: alias Cocá, quien sería el cabecilla y presunto responsable del expendio de las sustancias estupefacientes, en inmediaciones de entornos escolares, logrando erradicar este punto fijo de expendio.

Los capturados fueron dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación por el delito de fabricación, tráfico o porte de estupefacientes, donde un juez de control de garantías definirá su situación judicial.

El coronel José Ricardo Archila Zapata, subcomandante de la Policía Metropolitana de Cartagena de Indias, invitó a los cartageneros a seguir cooperando, bajo absoluta reserva, con las autoridades, para identificar a los delincuentes y las estructuras criminales que atentan contra la seguridad y convivencia de la ciudadanía.

Desarticulan banda encargada de extorsionar a profesores

Tras ocho meses de investigación, liderada por el Gaula de la Policía de Bolívar, en coordinación con el Gaula Militar y la Fiscalía General de la Nación, las autoridades anunciaron la desarticulación de una estructura delincuencial, señalada de extorsionar a profesores, comerciantes, profesionales de la salud y ganaderos en ese departamento.

Según la Policía, para cometer sus fechorías, los indiciados engañaban a sus víctimas, identificándose como supuestos integrantes de grupos al margen de la ley como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), las disidencias de las Farc y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC).

Se trata de una estructura delincuencial denominada Los Bróker. Según el material probatorio, delinquen en varias ciudades del país y tenían injerencia en varios municipios de Bolívar como Magangué, Cicuco, Talaigua Nuevo, Hatillo de Loba, Mompox y Barranco de Loba.

En Magangué, fueron capturados siete de ellos, entre los que se encuentran alias Fauth, presunto cabecilla de esta estructura y quien tiene anotaciones por hurto, tráfico, fabricación y porte de estupefacientes; alias Jordi; alias Eloy; alias Tres Pelos; alias Peligro; alias Cuadrado, y alias Vladimir, este último con anotaciones judiciales por homicidio.

En Bogotá fueron capturados alias Geovany y alias Yesica, esta última tiene anotaciones por estafa; en Valledupar, alias Martha y alias José; en Soledad, alias Yeny; en Cartagena, alias Brayan; en Medellín, alias Yulieth; en Bucaramanga, alias Karol; en Calarcá, alias Ángela, y en Sincelejo, alias José Braker.

La Policía explicó que seis de los capturados operaban desde centros carcelarios e intimidaban a sus víctimas, simulando ser miembros de grupos al margen ilegal para generar temor. Desde las cárceles, por ejemplo, llamaban a los afectados y, al parecer, les exigían un pago quincenal y mensual desde 100.000 pesos hasta 20 millones de pesos, que debían consignar por entidades de recaudo de dineros y números de cuentas bancarias asignadas.

Incluso, algunos internos de centros carcelarios también eran víctimas, pues les hacían pagar cuotas quincenales de 20.000 pesos para poder ingresar colchonetas y otros elementos; si se negaban a pagar, eran amenazados con ser abusados sexualmente.