Cárcel
Más de 500 nuevos cupos penitenciarios y carcelarios serán entregados en Cartagena
La apertura del nuevo pabellón tiene como objetivo brindar mejores condiciones de vida y garantizar los derechos humanos a las personas recluidas.
El director general del Inpec, teniente coronel Daniel Fernando Gutiérrez, en compañía del viceministro de Política Criminal y Justicia Restaurativa, Camilo Eduardo Umaña Hernández, y el director general de la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (Uspec), Ludwing Valero Sáenz, realizaron un recorrido por las obras de infraestructura en la Cárcel y Penitenciaría de Media Seguridad de Cartagena, que permitirán ampliar los cupos carcelarios en la Regional Norte del Instituto.
Con la puesta en marcha de este ambicioso proyecto, que genera 510 nuevos cupos, el Inpec (Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario) tiene como objetivo contribuir con la resocialización, dignificación y una eficaz garantía de los derechos humanos de las personas privadas de la libertad.
La nueva infraestructura fue intervenida, adecuada y diseñada con los últimos estándares en arquitectura bioclimática en concreto vaciado a la vista, repartidos en celdas y áreas de servicios complementarios, como cocina, panadería, lavandería, salas virtuales para educación, sanidad, talleres de formación, zonas deportivas y áreas libres y de aislamiento.
Actualmente, la Cárcel y Penitenciaria de Media Seguridad de Cartagena tiene capacidad para 1.980 privados y cuenta con una población de 1.899 personas, lo que permite no registrar hacinamiento a la fecha.
Protestas y huelga de hambre en la cárcel Palogordo
Diferentes establecimientos de reclusión en Colombia aún tienen en condiciones precarias a los reclusos que cumplen sus condenas. Por ejemplo, recientemente, se conoció que un grupo de internos de la cárcel Palogordo, ubicada en el municipio de Girón (Santander), inició una protesta de desobediencia pacífica y escalonada por las condiciones sanitarias y el tipo de alimentación que reciben.
El acto de revelación inició en el patio tres, donde se encuentran recluidos los presos políticos y sociales. Allí realizaron una huelga de hambre indefinida y cese de actividades. Dado que inicialmente los internos no fueron escuchados por los directivos del penal y autoridades, a la manifestación se unió el patio dos.
“Hacemos esto para ser escuchado por los entes de control. Una de nuestras peticiones es pedir el desmonte de la Uspec (Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios). Esta entidad nos está violando los derechos y se ha convertido en un obstáculo para la resocialización que tenemos”, expresó un interno a través de un video compartido en redes sociales.
El denunciante también pidió “participación en el comité nacional y poder exponer nuestro pliego de peticiones. Rechazamos tajantemente las acciones de la dirección general del Inpec, al no permitirnos la participación en los comités de diálogo”.
En el pliego de peticiones, según lo divulgado por el Movimiento Nacional Carcelario (MNC) a través de un comunicado, sostienen que la IPS Sersalud “no cumple y somete a la población privada de la libertad a morir lentamente por falta de atención oportuna”.
A raíz de esta situación y con el fin de buscar soluciones, los internos de Palogordo solicitaron que se instalen mesas de diálogo en las cuales participen la dirección general del Inpec, dirección de la Regional Oriente, Defensoría del Pueblo, Procuraduría General de la Nación, Oficina del Alto Comisionado de Paz, Personería, Secretaría de Salud, delegado de la Uspec, delegado de Ser Salud, delegado de DD. HH. del alto Gobierno, Ministerio de Justicia y del Derecho, un delegado del consorcio de alimentos Mar - Sol y un delegado del Movimiento Nacional Carcelario de la parte exterior.
Según lo manifestó Hernando Mantilla, defensor de los derechos carcelarios en Santander, las peticiones de los internos se han hecho en reiteradas ocasiones y aunque tras algunas reuniones se ha llegado a acuerdos, estos no se cumplen.
“Vuelve a darse la misma situación que se presentó en la Cárcel Modelo, los motivos son los mismos: salud y alimentación. La Uspec es la responsable de la alimentación y toda esa época ha sido llena de investigaciones y quejas, debería ser liquidada porque le está haciendo daño al sistema penitenciario”, sostuvo Mantilla.