Nación
Amenazan a la directora del diario ‘La Opinión’, de Cúcuta, Estefanía Colmenares Hernández
La periodista recibió un mensaje en su celular que la declaró como “objetivo militar”. Esto es lo que se conoce de las intimidaciones en su contra.
La directora de La Opinión, de Cúcuta, Estefanía Colmenares Hernández, fue amenazada. La periodista que lleva las riendas del periódico de la capital de Norte de Santander recibió un mensaje en su celular con intimidaciones contra su vida.
Los hechos sucedieron a las 5:00 de la tarde del pasado miércoles, 6 de septiembre, cuando Colmenares Hernández recibió un mensaje en su número de WhatsApp en el que la declararon como “objetivo militar”.
Así fue denunciado directamente en las páginas del periódico, medio de comunicación que alertó sobre lo que desconocidos le dijeron a la periodista: “Que su cabeza tiene un precio”.
“Esta es la primera vez que Colmenares recibe una amenaza desde que asumió la dirección del diario nortesantandereano hace 5 años. El mensaje, anunciando que es objetivo militar y que a partir de la fecha su cabeza tiene precio, fue lo que recibió ayer la periodista y directora cucuteña”, detalló La Opinión.
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No es la primera ocasión en que un director del diario es blanco de intimidaciones. Ese medio de comunicación recordó que en 1993 el fundador del periódico, Eustorgio Colmenares Baptista, fue asesinado por el ELN y que en 2001 dejaron un artefacto explosivo en las instalaciones del periódico.
La Opinión llamó la atención sobre que esas amenazas se conocen justo después de que se hizo pública la denuncia sobre las irregularidades que estarían rodeando la hospitalización del exalcalde de Cúcuta, Ramiro Suárez Corzo.
Las publicaciones de La Opinión sobre Suárez Corzo
“En las últimas semanas, La Opinión ha hecho seguimiento a las denuncias que se han conocido sobre las irregularidades que rodean la hospitalización del condenado exalcalde Ramiro Suárez Corzo, quien estaría coordinando dos campañas políticas desde el piso 11 del Hospital Universitario Erasmo Meoz (Huem), en el cual permanece recluido”, detalló ese diario.
Suárez Corzo fue condenado a 27 años de prisión por el asesinato de Alfredo Enrique Flórez. Sin embargo, este presenta quebrantos en su salud, por lo que fue trasladado al hospital.
Aunque se desconocen las razones que motivan esta amenaza, consideramos importante hacerlas públicas como un mecanismo de rechazo y de reiterar nuestro compromiso con el periodismo, con la verdad y con las investigaciones que puedan combatir la corrupción.…
— Estefania Colmenares (@estcol) September 7, 2023
El exalcalde de Cúcuta se encuentra en la habitación 1101 de ese hospital. Lo que ha publicado La Opinión señala que desde ahí está coordinando campañas políticas para la Gobernación de Norte de Santander, la Alcaldía de Cúcuta y de aspirantes a la Asamblea Departamental y el Concejo Municipal, lo que convirtió al Hospital Universitario Erasmo Meoz en todo una acopio de campaña.
El periódico consideró que “el seguimiento de este diario generó reacciones en distintas entidades que han empezado a ejercer una mayor vigilancia sobre el hospital y sobre la situación de Suarez, condenado a 27 años de cárcel por el homicidio de Alfredo Enrique Flórez”.
Por su parte, la directora Estefanía Colmenares Hernández advirtió que “aunque se desconocen las razones que motivan esta amenaza, consideramos importante hacerlas públicas como un mecanismo de rechazo y de reiterar nuestro compromiso con el periodismo, con la verdad y con las investigaciones que puedan combatir la corrupción”, en un mensaje publicado en la red social X, antes Twitter
El caso del exalcalde de Cúcuta
Las publicaciones hechas por La Opinión indican que la única persona que había sido autorizada para estar visitando al exalcalde de Cúcuta en el hospital era su pareja, Isabel Márquez. No obstante, según lo recogido por ese medio de comunicación, se han identificado camionetas con propaganda política que salen y entran del centro médico.
El caso de Ramiro Suárez Corzo ha presentado varios giros. El exalcalde tenía el beneficio de casa por cárcel, pero un juez ordenó devolverlo a prisión después de determinar que este no estaba cumpliendo con los lineamientos del Inpec para la medida de prisión domiciliaria. Sin embargo, justo cuando el juez decidió regresarlo a la cárcel, se hizo público que estaría presentando problemas de salud y terminó siendo trasladado al Huem.