Avalancha en La Tarrita, Norte de Santander, causa afectaciones a comerciantes de Ocaña

En aprietos se encuentran los comerciantes del municipio de Ocaña (Norte de Santander), tras las millonarias pérdidas que han tenido, a raíz del desbordamiento del río Tarra que, a su vez, generó una avalancha de lodo y tierra. La emergencia se presentó el pasado miércoles 31 de mayo.

Este fenómeno natural obligó el cierre de la vía que comunica a Cúcuta con el municipio de Ocaña, puntualmente entre el km 47 y el km 52, en el sector conocido como El Tarrita. Situación que ha generado preocupación entre los comerciantes de la provincia, toda vez que sus ventas han caído considerablemente. Aunque se adelantan trabajos para rehabilitar la vía, aún no hay fecha exacta de cuándo entre nuevamente en funcionamiento.

“Las empresas de transporte están reportando una disminución en sus servicios superior al 80 % diariamente; sumado a los transportadores de carga, quienes tienen que hacer un recorrido mucho más largo ahora y que por ende se hace más costoso”, dijo en entrevista radial Fabio Rincón, presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Ocaña.

Además de los comerciantes, la avalancha también afectó vías rurales, viviendas, cultivos, semovientes y animales de corral. El panorama es bastante preocupante, principalmente, para transportadores, distribuidores y transporte público.

Actualmente, hay movilidad desde el municipio de Ocaña hasta El Tarrita con paso restringido al tráfico pesado en el km 47+300 por caída del puente El Turco. El cierre total continúa en el km 51+800.

Sin embargo, dada la importancia de esta vía que comunica a la ciudad de Cúcuta con la costa atlántica, los comerciantes y el gremio transportador piden a la Gobernación de Norte de Santander y al Instituto Nacional de Vías (Invías) que se agilicen los trabajos y se restablezca el paso en el menor tiempo posible.

“Esperamos que los trabajos que está liderando la gobernación y las autoridades locales avancen sin contratiempos, restablecer la conectividad con Cúcuta y recuperar el tema comercial que es fundamental”, agregó Rincón.

Los trabajos que se realizan en la vía, con el apoyo de la Gobernación de Norte de Santander y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, han permitido la remoción de cerca de 20.000 m³ de material caído en los tres tramos donde se presentan las principales afectaciones, logrando despejar 1,2 km de vía.

Igualmente, cuadrillas de microempresarios de la zona han realizado labores de apoyo para la evacuación de las pertenencias de los damnificados que resultaron afectados en los distintos puntos de la vía y que se encontraban enterradas por el lodo. También se han llevado a cabo actividades de limpieza de cunetas y de alcantarillas.

“Es una situación sin antecedentes, nunca había ocurrido en Norte de Santander con volúmenes grandes de sedimentación, producto de algunos derrumbes”, señaló el director de la territorial de Invías-Ocaña, ingeniero Elías Jaime Fernández, quien no se atreve a dar fechas, pero sí aseguró que el tiempo de la recuperación de la arteria vial demoraría un par de meses.

Gracias a las acciones de monitoreo y prevención que se han estado articulando desde el Sistema Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres, las alcaldías municipales y la comunidad, se está avanzando en las labores urgentes para superar la emergencia.

“Nuestras familias son lo más importante, seguimos trabajando para habilitar los corredores humanitarios para el traslado de personas, ayudas humanitarias de emergencia alimentarias y no alimentarias y para recuperar la transitabilidad en el corredor vial Cúcuta-Ocaña”, indicó la consejera departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres, Adriana Arias Carrillo.