La mentira que usó el mayor (r) del Ejército, Juan Carlos Rodríguez, para fugarse de estación de Policía en Cúcuta

Hay alerta máxima en el departamento de Norte de Santander: 11 delincuentes se fugaron de un calabozo de la Policía Nacional y ahora caminan sin rienda suelta por la región; entre los prófugos se encuentra el mayor en retiro del Ejército Nacional, Juan Carlos Rodríguez, conocido en el ‘bajo mundo’ con el alias de Zeus.

Este hombre fue capturado el pasado 10 de abril cuando transportaba material de guerra en camionetas de alta gama, al parecer, para favorecer las actividades de grupos ilegales. Aunque tiene otros cargos en su hoja de vida: fue vinculado con los falsos positivos y reconoció públicamente su relación con la mafia.

El coronel William Quintero, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, reveló en SEMANA que este sujeto se encontraba privado de la libertad en un calabozo, mientras el Inpec le asignaba un cupo en una cárcel. Él aprovechó esa condición para fraguar su escape, como si se tratara de una película.

El mayor retirado y el resto de los detenidos emitieron gritos en la noche de este domingo para que los uniformados atendieran a un preso que, supuestamente, estaba gravemente herido en la mitad de la celda. Los cuatro patrulleros que los estaban vigilando atendieron el llamado y procedieron a auxiliar al afectado.

Una vez un policía abrió la reja, fue empujado violentamente por la turba de delincuentes: “No había ningún enfermo. Lo que se pudo determinar es que era algo que ellos ya habían planeado para poderse escapar del sitio. Ellos se fueron por la parte trasera de la estación”, afirmó el alto mando de la institución.

Se confirmó la fuga de 17 sujetos que están siendo procesados por homicidios, hurtos, extorsiones y porte de armas de fuego. En una rápida reacción, se ubicaron a seis prófugos y se mantiene el rastreo de los demás. Sin embargo, sobre la mesa hay una hipótesis que está complicando la localización.

El coronel Quintero indicó que la más reciente recaptura se hizo en la ruta que lleva de Cúcuta a Venezuela, por lo que los investigadores sospechan que las demás personas se habrían escapado hacia el vecino país. Esta posibilidad cobra relevancia porque la mayoría de los implicados son ciudadanos extranjeros.

Otro de los datos llamativos es que el mayor (r) Rodríguez se fugó con toda su banda. Él fue detenido el pasado 10 de abril con cuatro personas más, quienes fueron sorprendidas con dos pistolas, 47 granadas, 2 barras de explosivos, 4 radios de comunicación, 8 celulares, 1 chaleco de balístico, 1 computados y 2 USB.

Según el expediente, desde un principio trataron de esquivar a las autoridades. Ese día, al ser requeridos por los oficiales, respondieron que eran funcionarios de la Unidad Nacional de Protección (UNP), por eso cargaban el material de guerra. La pericia de los uniformados fue crucial para el éxito del operativo.

Al interior de uno de los automotores incautados se encontraron comprobantes de pago de peajes en una ruta que emprendieron el 9 de abril desde Medellín, pasaron por el municipio de Puerto Triunfo, luego saltaron a Puerto Boyacá, más tarde a Puerto Araújo, cruzaron por Lebrija, pasaron por Bucaramanga y cerraron en Cúcuta.

Hoy la lupa está en Norte de Santander y Venezuela. SEMANA conoció que las autoridades del vecino país ya fueron alertadas de la fuga y, con el rostro de cada uno en mano, tratan de localizarlos por la alta peligrosidad que representan para la ciudadanía: ocho de ellos, más el mayor (r), son de especial cuidado.