Norte de Santander

Millonarias pérdidas dejan las lluvias en más de 60 barrios de Cúcuta

Los principales afectados han sido los productores de la zona rural de Cúcuta.

16 de noviembre de 2022
La Secretaría para la Gestión del Riesgo de Cúcuta analiza la situación.
La Secretaría para la Gestión del Riesgo de Cúcuta analiza la situación. | Foto: Alcaldía de Cúcuta

Los estragos que está dejando la segunda temporada de lluvias en la capital nortesantandereana son bastantes críticos, pues los más afectados registran millonarias pérdidas que sigue en aumento ante las fuertes precipitaciones.

En ese sentido, los pobladores de la zona rural de la ciudad de Cúcuta han perdido miles de cultivos a causa de esta ola invernal que azota principalmente a la región Andina. De acuerdo con el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), las lluvias irían hasta finales de diciembre.

Así las cosas, los productores de este sector, hasta el momento, reportaron pérdidas económicas cercanas a los 2 millones de pesos, y los cultivos afectados han sido: arroz, plátano, yuca, cebolla, entre otros alimentos de la canasta familiar.

Ante esta situación, SEMANA se comunicó con el secretario de Gestión de Riesgo y Desastres de Cúcuta, Huber Plaza, quien también aseguró que fueron más de 50 barrios los que presentaron afectaciones, entre esos algunos colegios.

“Tenemos zonas inundadas, hay más de 900 familias damnificadas representadas en cerca de 3.000 personas, 60 barrios afectados, diez comunas, nueve corregimientos, instituciones educativas afectadas y más de 27 vías terciarias afectadas”, aseveró el funcionario.

Los damnificados de esta zona de la ciudad claman al Gobierno nacional y Municipal por ayudas que permitan solventar esta calamidad por la que están pasando. Por el momento, los afectados fueron incluidos en el Registro Único a Damnificados (RUD), mientras Gestión del Riesgo evalúa los daños.

Las situaciones de riesgo que más se han presentado en Cúcuta son caídas de árboles ―los cuales están en condición de riesgo―, colapso de tramos de vías vehiculares, procesos de remoción en masa, caída de rocas, represamiento de caudal, desbordamiento de drenajes en canales de aguas lluvias, desbordamiento de los ríos Zulia y Pamplonita, inundaciones en viviendas, entre otros.

Ante esto, Huber Plaza, informó en SEMANA que actualmente se encuentra activada las 24 horas del día la sala de crisis, con el fin de atender los reportes y emergencias que se presentan en la ciudad.

“Estamos con todos los organismos de socorro preparados en alistamiento, la sala de crisis 24/7 y los planes de contingencia de cada uno de las unidades activas, para trabajar y afrontar esta segunda temporada de lluvias y estar muy pendientes de poder atender a las comunidades”, puntualizó el funcionario.

Así mismo, el secretario mencionó que en los sectores de Belisario, Palmeras parte alta, barrio 7 de agosto y otras zonas registran algunas eventualidades; sin embargo, no se han presentado víctimas mortales ni lesionados.

Huber Plaza señaló que se están atendiendo dos situaciones para mitigar las emergencias generadas por las lluvias: “Se están haciendo obras con unos geocontenedores para contener el retroceso acelerado que tienen los ríos Zulia y Pamplonita, en los sectores de La Vaca y La Jabilla”.

Debido a la segunda temporada de lluvias y con la probabilidad de que se presenten nuevamente emergencias como deslizamientos, inundaciones y crecientes súbitas, las autoridades de Cúcuta hacen las siguientes recomendaciones:

  • En casa recordar cuáles son las rutas de evacuación y establecer puntos de encuentro en caso de alguna emergencia ocasionada por las lluvias.
  • Asegurar muy bien el techo, las tejas y, en general, los objetos que pudieran ser arrastrados por la fuerza de los vientos.
  • Revisar el estado de los tejados y de estructuras elevadas que puedan colapsar por causa de los vientos fuertes.
  • Realizar una adecuada disposición de los residuos para evitar taponamientos en los alcantarillados.
  • Evitar practicar actividades deportivas en áreas abiertas en el momento de tempestades.
  • Estar atentos a las recomendaciones emitidas por las autoridades.