Norte de Santander
Atención | Nuevo atentado en Cúcuta deja al menos 16 heridos. Criminales activaron explosivo en la entrada a una mina en zona rural
La detonación se habría registrado al paso de varios empleados. La Policía registró el ingreso de dos personas lesionadas al Hospital Erasmo Meoz, de la capital de Norte de Santander.
En la planta de Incolmine, ubicada en la vía al corregimiento de San Faustino, en zona rural de la ciudad Cúcuta, se registró un presunto ataque con explosivos en horas de la noche de este martes, 4 de julio.
De manera preliminar se conoció que sobre las 8:00 p. m., se presentó una detonación en la entrada de esta mina, por lo que al momento del paso de varios trabajadores de Minex, fue activada.
Ante esto, pasadas las 10:00 de la noche de este mismo martes, una fuente judicial le confirmó a SEMANA detalles de este hecho que pone en zozobra a la capital del departamento de Norte de Santander.
“Se reporta hasta el momento dos personas lesionadas que entraron al Hospital Erasmo Meoz. La zona de la explosión es de difícil acceso por lo que las unidades no han podido entrar hasta allá. (...) se reporta al parecer un tipo de explosión, pero no se sabe si fue un artefacto que posiblemente podría ser o qué situación fue lo que ocurrió”, señaló la fuente a este medio de comunicación. Sin embargo, la comunidad manifiesta que serían al menos 16 heridos.
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Hasta el momento, las autoridades se encuentran en coordinación desde el casco urbano de Cúcuta para dirigirse al lugar de los hechos junto con varias ambulancias para atender la emergencia.
“Estamos prestos para brindar las garantías necesarias que nos permitan salvaguardar las vidas de las personas heridas. Rechazamos de manera contundente las acciones terroristas en nuestro territorio, estaremos brindando más información según corresponda”, detalló el alcalde de los cucuteños, Jairo Yáñez.
Así mismo, hizo un llamado al presidente Gustavo Petro para brindar las garantías necesarias frente a la situación de orden público. Adicional, se realizará un Puesto de Mando Unificado (PMU) para verificar detalles sobre este nuevo atentado.
Por otro lado, la Gobernación de Norte de Santander se pronunció frente a esta situación, donde lo catalogó como hechos violentos: “Exigimos nuevamente que los violentos cesen inmediatamente su accionar delictivo en la región y que permitan que los nortesantandereanos podamos trabajar, movilizarnos y vivir en paz”.
Este hecho se suma al temor que sembró el Ejército de Liberación Nacional (ELN), en el departamento de Norte de Santander, donde este martes, 4 de julio, están en la conmemoración de sus 59 años de lucha insurgente.
Las autoridades señalaron desde las primeras horas de este martes, la aparición de banderas y cilindros en Cúcuta, los cuales estarían relacionadas con la celebración del aniversario de esta estructura criminal.
Estas situaciones han generado preocupación en la población nortesantandereana, donde además han asesinado a tres policías en dos hechos aislados registraron durante este día, por lo que se presume que los responsables son presuntos integrante del ELN.
Acciones violentas
Desde las 5:30 a. m., de este martes, la ciudad de Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, amaneció sumida en el miedo y la zozobra tras la aparición de varios artefactos que, se sospecha, podrían contener explosivos dejados por el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Estas acciones violentas se registraron en diferentes puntos del área metropolitana de Cúcuta, donde entre los objetos hallados se encontró un cilindro cerca de un centro comercial, así como banderas de la guerrilla. Tres de los artefactos fueron dejados en el área urbana, mientras que los dos restantes se ubicaron en zonas rurales.
Uno de los cilindros fue abandonado en el Anillo Vial Oriental, con los colores de la bandera y las siglas del ELN. Según las autoridades, se encontraron otros dos posibles artefactos explosivos a la entrada del corregimiento de Aguaclara en Cúcuta y en el sector conocido como El 57, cerca de la entrada de Puerto Santander.
Desde las primeras horas de la mañana, la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) y sus expertos en desactivación de explosivos se han hecho cargo de la situación, trabajando arduamente para evaluar cada una de las amenazas y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
“Se han presentado 12 eventos de acción violenta de esta estructura. Nuestros técnicos y guías caninos hicieron las revisiones y no se hallaron artefactos explosivos. En zona rural se están verificando para la desactivación de estos elementos”, señaló el coronel Carlos García, comandante (e) de la Mecuc.
Ante estas acciones violentas, las autoridades de la ciudad realizaron un consejo extraordinario de seguridad para determinar las acciones urgentes a implementar con el fin de contrarrestar esta situación que empaña el inicio de julio.
“Vamos a fortalecer la presencia militar en todos los lugares del Anillo Vial y del área metropolitana que de forma consensuada estaremos evaluando con los alcaldes para reforzar esa presencia estrategia de Ejército y Policía Nacional. No hay otro objetivo, sino llamar de forma concordante al Gobierno para que estas apuestas por reforzar nuestra seguridad como zona de frontera tenga ese reflejo y compromiso del Estado”, señaló el alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez.
Por otro lado, en la mañana de este mismo 4 de julio, fueron asesinados tres policías en dos hechos aislados registrados en Norte de Santander. Las autoridades ofrecen una recompensa de hasta $100 millones para quien contribuya con información que permita esclarecer esta acción violenta.
El primer caso se reportó en el municipio de Tibú, ubicado en la subregión del Catatumbo, donde aproximadamente a las 6:00 a. m., un francotirador habría disparado contra un uniformado adscrito a la inspección de Policía del corregimiento de Petrolea.
De acuerdo con información preliminar entregada por las autoridades, la víctima mortal fue identificada como Samir José Vega Velázquez, quien se desempeñaba como patrullero y recibió un impacto por arma de fuego a la altura del tórax.
Según las primeras versiones, Vega Velásquez había salido de las instalaciones policiales acompañado de un centinela para interrogar a los conductores de los vehículos que transitan por el sector si en esa Jurisdicción había pasacalles o panfletos alusivos al ELN.
Aunque las autoridades competentes iniciaron las indagaciones correspondientes, se presume que los responsables son presuntos integrante del ELN, pese a que en esa zona también delinque el frente 33 de las disidencias de las Farc.
Posteriormente, sobre las 9:30 a. m. de este martes, otros dos uniformados fueron asesinados en el municipio de El Zulia, ubicado en el área metropolitana de Cúcuta, capital de Norte de Santander.
Las víctimas fueron los patrulleros Renson García y Jerson Cuevas Pineda, quienes al parecer, se disponían a desayunar en un establecimiento ubicado en el barrio La Alejandra, cuando fueron atacados.
De acuerdo con la información preliminar, los uniformados se quitaron el chaleco antibalas, donde cuatro sujetos desconocidos se acercaron en motocicletas, ingresaron al restaurante y dispararon contra ellos. Los asesinos se dieron a la huida hacia el sector de la Ye de Astilleros.
Las primeras hipótesis también dan cuenta que los responsables serían miembros del ELN, quienes están de conmemoración de sus 59 años de lucha insurgente.
Es importante destacar que estos eventos se producen unas semanas después de que las delegaciones del Gobierno nacional y la guerrilla del ELN firmaran un cese al fuego bilateral, como parte de las conversaciones de paz que se llevan a cabo en La Habana, Cuba.
Ambas partes lograron establecer el cese al fuego bilateral más prolongado hasta la fecha, el cual tiene una duración inicial de seis meses. Durante la clausura del tercer ciclo de conversaciones de paz, se acordó una fase de alistamiento que culminará el 6 de julio, momento en el cual se dará la orden de detener las ofensivas. A partir del 3 de agosto, se oficializará el cese al fuego, el cual se mantendrá vigente hasta el final del año, siempre y cuando no surjan contratiempos.