POLÍTICA

María Clemencia Rodríguez entra en escena

La primera dama se estrena en plaza pública. ¿Cómo le irá? Análisis de Semana.com

Armando Neira
3 de abril de 2014
'Tutina' como a ella le gusta que la llamen, se enfrenta al fervor de la plaza pública para defender el ideario político de su esposo. | Foto: Archivo SEMANA

Una íntima celebración sirvió de ensayo para los actos de masas que vendrán. En la noche de este miércoles, durante un sencillo acto de festejo por el cumpleaños de Roberto Prieto, el gerente general de la campaña, María Clemencia Rodríguez de Santos tomó el micrófono y empezó a hablarles a los asistentes. Hubo risas, aplausos y uno que otro apunte destacando el valor de ella para superar el pánico escénico.

La fraternal e improvisada prueba quedó atrás. Desde este jueves la respuesta de quienes la escuchen tendrán un valor de enorme trascendencia. La primera dama se estrenará en la plaza pública en el marco de una estrategia de la campaña para ampliar el mensaje del candidato-presidente.

La idea es estar en 26 departamentos en 15 días. Toda una maratón sin pausa alguna. A un lugar irá el presidente Juan Manuel Santos; a otro, el aspirante a la Vicepresidencia Germán Vargas Lleras, y a otros, los directores de los partidos de la Unidad Nacional. María Clemencia alternará con su esposo y con Vargas tal como lo ha venido haciendo su hijo Martín. Toda la familia en busca de la reelección del mandatario.

Se trata de un hecho inédito en los tiempos recientes. Hay un antecedente con características diferentes. Durante el secuestro de Andrés Pastrana Arango por parte del capo Pablo Escobar, su esposa, Nohra Puyana, asumió la campaña a la Alcaldía de Bogotá. En términos generales su balance fue bueno, aunque reinaba un ambiente de solidaridad hacia la pareja.

Hoy es distinto, pues hay encuestas que muestran el 65 % de rechazo hacia la reelección de Santos. Es decir que puede hallar un territorio hostil en muchas regiones.

'Tutina', como a ella le gusta que la llamen, se enfrenta al fervor de la plaza pública para defender el ideario político de su esposo. Se trata de un punto de quiebre en la campaña que hasta ahora la había mantenido un tanto al margen en línea con su estilo reservado y discreto.

De hecho, desde que ella está en la Casa de Nariño son contadas las entrevistas que ha dado. La que más eco tuvo fue hecha el pasado mes de diciembre en el diario El País de Madrid. La autora del reportaje destacó que la mujer de Santos ha optado intencionadamente por no adoptar un papel protagonista en la vida del país, a diferencia de otras esposas de presidentes latinoamericanos, que, en ocasiones, eclipsan la labor de sus maridos.

El rotativo destacó también que ella insiste en presentarse a sí misma casi exclusivamente como la madre de los hijos de Santos, pero, aunque rechaza de plano albergar cualquier ambición política, ha aprovechado la carrera de su marido, primero en los ministerios de Comercio y Defensa y luego en la Casa de Nariño, para promover su interés por las obras sociales con los soldados y policías a través del programa Línea Lanza y, ahora, a través de De cero a siempre, una estrategia para la atención integral a la primera infancia en la que está profundamente involucrada.

En la entrevista, ella dijo que acompañaba ciento por ciento al presidente en el proceso de reconciliación que se busca en La Habana porque este traería el mejor premio de todos “para Juan Manuel”, que es “el de conseguir la paz” y, en segundo lugar, porque esta no era la “paz de Juan Manuel Santos, es la paz de Colombia”.

En el mismo reportaje rompió su tradicional reserva para referirse al expresidente Álvaro Uribe. “¿Cómo se viven en su familia los ataques del expresidente Uribe? ¿Quién guarda más rencor, quién los sobrelleva mejor?”, le indagó la periodista. “Los vivimos más y peor mis hijos y yo. Obviamente, nos duele profundamente que el expresidente Uribe tenga actitudes a veces complejas, pero preferimos pasar la página y tratamos de dejar atrás ese tema”.

Son palabras cuidadosas, medidas en el apacible terreno de las entrevistas. Ahora, sin embargo, saldrá a las impredecibles plazas públicas.

Su debut es este este jueves en la compleja Tumaco. La idea de la campaña es arroparla de una figura que se mueve como pez en el agua en los espacios públicos. Además el aspirante a Vicepresidente hasta ahora ha llenado los escenarios en donde ha estado lo que marca un buen punto de arrancada.

En la agenda está previsto un despliegue enorme de la campaña del candidato-presidente por el sur del país. Mientras ella y Vargas están en Nariño, él estará por los sectores populares en el Distrito de Aguablanca, en Cali. Para este viernes, Santos tiene previsto continuar en el Valle, donde se encontrará con los sectores representativos de las víctimas de la violencia. Es factible que allí se encuentre con su esposa.

“Estamos optimistas porque el aporte de ella será inmenso. Es una mujer bonita, muy atractiva, imponente que conecta muy bien”, dice una fuente de la campaña. Eso es evidente en los actos sociales, sin embargo, frente a una multitud es una prueba de fuego. Una cosa es la elegancia y otra el carisma y la energía para entusiasmar a las barras. ¿Tendrá estas cualidades? Todos están a la espera.

En la campaña también destacan que con el ingreso de ella se ratifica el alto número de mujeres que participan en esta contienda, lo que muestra el avance de nuestra sociedad. De hecho, están Clara López y su fórmula vicepresidencial, Aída Avella, por la izquierda; Marta Lucía Ramírez, candidata conservadora, e Isabel Segovia, llave del candidato verde, Enrique Peñalosa.

Eso es sano porque la mirada de la mujer es absolutamente necesaria para la construcción de esta sociedad que ha sido agresiva y permanentemente agredida.