Este lunes la ministra de Educación, Gina Parody, llegó al colegio Sagrado Corazón de Jesús de Aguachica (Cesar), la institución donde los niños reciben sus alimentos sobre las manos y los consumen en lugares donde sólo comen los animales: en el suelo.Y aunque las expectativas por su visita eran muchas, pues, supuestamente, les pondría el ‘tatequieto’ a las irregularidades en el suministro de alimentos del Programa de Alimentación Escolar (PAE), parece que las cosas no salieron como muchos esperaban.“La ministra no se encontró con la situación real que vive ese colegio”, manifestó el director de la regional Caribe de la Red Nacional de Veedurías, Luis Eduardo de La Hoz, quien visitó la institución horas antes de que Parody llegara a Aguachica.“Allá (en el colegio) organizaron toda la parafernalia. Compraron comedores para que los niños tuvieran donde sentarse. (…) Normalmente los alimentos los preparan a diario en cocinas industriales y cuando van a servirlos no cumplen las mínimas normas de higiene, pues no existe una cocina o una infraestructura donde se pueda prestar un buen servicio”, denunció.Pero eso no es todo. De la Hoz aseguró que aunque este lunes la institución tenía agua, la realidad es que los pequeños no cuentan con ese recurso hídrico a diario, pues el ‘carrotanque’ va cada 33 días. “Los baños tampoco son dignos. Se mantienen sucios, pues no hay empleadas para hacer aseo”, dijo (Ver fotos).Aun así, el video que se divulgó en las redes sociales y las fotos reveladas por Semana.com hablan por sí solas sobre la crisis que vive esa institución. Razón por la que muchos esperaban que se tomaran decisiones de fondo. Algo que, al parecer, no pasó.¿Fundación cuestionada resultó premiada?Después de la reunión con la ministra, el gobernador Franco Ovalle y el alcalde de Aguachica, Henry Alí Montes, decidieron acatar el Decreto 1852 de 2015, donde se especifica que en los departamentos debe existir una bolsa única de recursos para los PAE.Así, de ahora en adelante no podrán contratar cada uno por su lado y con operadores distintos, como ocurría. Una decisión clave, pues facilita las supervisiones por parte de los organismos de control.Ante eso, el alcalde de Aguachica tuvo que cancelar el contrato que tenía con la Fundación Provenir y todo el Programa de Alimentación Escolar de ese municipio quedó en manos de la Gobernación.Entonces vienen los contrasentidos. Fundación Acción Social Integral, que obtuvo por parte de la Gobernación el contrato 020004 del 15 de enero del 2016 por $17.267 millones para el suministro de alimentos en colegios públicos, entre ellos el Sagrado Corazón, quedará también con el contrato que tenía la Fundación Provenir. Esta decisión es preocupante pues aunque la Fundación Provenir resultó cuestionada por lo revelado en el video, Acción Social Integral no se queda atrás. Esta empresa, hasta la semana pasada, era la que entregaba a los niños, como porción de alimento, mango, huevo y leche. Y la repartía en condiciones antihigiénicas. Además, los menores comían en el piso.La empresa tiene un pecado adicional: es la misma que funcionó el año pasado en Bolívar con el nombre de Kábala y, ante presuntas irregularidades, no le fue prorrogado el contrato de prestación de servicios de alimentación escolar por parte del Ministerio de Educación. Tal como lo denunció Semana.com en su artículo “Polémica fundación de Aguachica estaba vetada por Mineducación”.“Normalmente se recomienda a las administraciones no contratar con organizaciones que han sido sancionadas o han presentado irregularidades”, manifestó la semana pasada el viceministro de Educación, Víctor Saavedra, a Semana.com.Pero pese a las advertencias y denuncias, esta empresa quedó con el premio mayor. “El operador del departamento suplirá esta necesidad mientras surge el próximo proceso licitatorio (que sería a finales de abril)”, dijo en rueda de prensa el gobernador Ovalle. Lo que muchos allí no entienden es cómo, si esta empresa cometió errores y el propio gobernador le reconoció a Semana.com denuncias de padres de familia y profesores contra esta firma, de alguna manera haya salido premiada. Ver para creer.