Una Valledupar conmovida despidió este lunes a Martín Elías. Como quedó registrado en las fotos del diario El Pilón, las personas no cabían en las calles por las que pasó la carroza fúnebre con el cuerpo del cantante vallenato, quien murió el viernes pasado, víctima de un accidente de tránsito.La ceremonia de despedida del hijo de Diomedes Díaz comenzó hacia las 9 de la mañana. Un pastor cristiano encabezó la ceremonia, oficiada en el Parque de la Leyenda Vallenata. Allí, Dayana Jaimes, la viuda del cantante, recibió en medio de un dolor manifiesto y de los aplausos de la multitud los decretos con los que la Alcaldía de Valledupar, la Gobernación y la Asamblea del Cesar, le rindieron homenaje al artista, según reportó El Heraldo.Le recomendamos: Martín Elías, a la diestra del CaciqueLa ceremonia se vivió como una triste fiesta. Los martinistas coreaban el nombre de su ídolo y al unísono entonaron algunas de sus canciones. Antes de las 11 de la mañana, el vehículo funerario tomó rumbo hacia el cementerio Ecce Homo. La caravana que se armó detrás recordó las despedidas multitudinarias de otros ídolos del vallenato, como el Cacique o Kaleth Morales.Apostados en las aceras, miles de personas presenciaron la última marcha de Martín Elías. En los parlantes de los vehículos retumbaban las canciones del cantante de 26 años, quien se había convertido en el depositario del legado de Diomedes Díaz.Puede interesarle: Martín Elías, otra voz vallenata que se apaga en la carreteraEl vehículo entró al cementerio hacia el mediodía. Martín Elías fue sepultado junto a las tumbas de su abuelo y su padre. Rafael Santos, su hermano mayor, una de las figuras más importantes en la vida del cantante fallecido fue el encargado de despedirlo. Los reporteros de El Heraldo registraron sus palabras: Hemos venido a despedir a un hombre ejemplar que no le faltó el respeto a nadie, al buen hijo, hermano, papá y cantante, adiós Martín.Dayana Jaimes, la viuda, la madre de uno de los dos hijos del artista, soltó unas palabras que reunían el sentir de el pueblo vallenato: Mi Tito, siempre te llevaré en mi corazón, dijo.