Justicia
La Negra o La Bruja: la enigmática mujer de confianza del Clan del Golfo. Le robaron $5.000 millones en oro y eso desató masacres
En Antioquia se están registrando masacres y torturas que tienen de fondo la pelea por la minería ilegal. Traiciones, lucha por el poder y hasta escuadrones de asesinos foráneos, detrás de estos hechos.
Por los ríos de Antioquia corre la fiebre del oro, extraído de forma ilegal por organizaciones criminales, y esos afluentes también se han bañado de sangre por la pelea para quedarse con el jugoso botín. Es justo una vendetta, en la que hay traiciones, robos, lucha por el poder y, sobre todo, avaricia, la que ha generado las masacres de los últimos días en el municipio de Santa Fe de Antioquia y otros asesinatos en la región.
SEMANA investigó con organismos de inteligencia del Estado, autoridades y pobladores sobre lo que está ocurriendo y todos apuntan al Clan del Golfo, que ha concentrado la explotación ilegal de oro, pues le deja multimillonarias ganancias. Es tan rentable y buena vía para lavar dinero que hasta los carteles mexicanos han tenido incidencia para participar en este negocio.
El detonante de los últimos homicidios fue el robo de un tesoro superior a los 5.000 millones de pesos en oro. En medio de esta historia aparece una enigmática mujer a la que le están siguiendo los pasos. Se trata de alias La Negra o La Bruja, quien es de máxima confianza de los cabecillas del Clan del Golfo y entre sus labores ilegales está recorrer la zona, punto por punto, recogiendo el metal.
Precisamente, a esta mujer le robaron el botín de 5.000 millones y no lo iba a dejar así. La Negra consideró que fue traicionada por alguien de su círculo cercano y supo de un plan para matarla, del cual se salvó.
Eso destapó la guerra entre los mismos miembros del Clan del Golfo; la desconfianza está reinando. Cada uno de los cabecillas estaría manejando la explotación ilegal como negocio propio y los choques se están convirtiendo en muertos, atomizándose e imponiendo la ley del más fuerte.
La Negra identificó a quienes la robaron como hombres del mismo Clan del Golfo y, como no confiaba en nadie, contrató un grupo criminal para que hicieran inteligencia y recuperaran el caudal.
“En forma de venganza por el reciente hurto y las exigencias de pago de extorsiones, contrató los servicios de un grupo de personas procedentes de la costa atlántica que se dedicarían al hurto en diferentes modalidades. Les suministró logística, información sobre medios de transporte y lugares de almacenamiento del oro”, le contaron los investigadores a SEMANA.
Estas personas tenían su punto de operaciones en una finca de la vereda Laureles, en Santa Fe de Antioquia, a donde llevaron el botín, que iba a ser comercializado en el sur de Bolívar. La traición estaba marcando la parada en el Clan del Golfo, y a oídos del poderoso Zarco Tigre llegó la información de que criminales foráneos andaban detrás del oro.
De inmediato, organizó un comando criminal para cazarlos y asesinarlos. Así lo hicieron: tres cuerpos quedaron en la vereda de Laureles, dos con signos de tortura; luego, apareció el cadáver de un hombre con varios impactos de bala en la vereda El Tunal y hallaron otros tres cuerpos en el sector de Moraditas. Que los cuerpos aparecieran regados en diferentes zonas no era casualidad, según conoció SEMANA. Se trataba de un mensaje claro. El que quiera llegar a la región y quedarse con el oro recibirá plomo.
No ha sido el primer robo por esa cuantía. Hubo otro similar por cerca de 3.000 millones de pesos que estaba listo para sacar del país. En el camino, también se lo robaron y hubo desapariciones de hombres del Clan del Golfo. La guerra está desatada. De un lado está el Zarco, cabecilla militar del Clan del Golfo, y del otro, la peligrosa Negra, encargada de recoger el oro obtenido de forma ilegal. También le dicen la Viuda Negra, pues es conocido que ejecutó a su compañero sentimental para controlar las rentas criminales. Ya había sido capturada en 2021.
Las autoridades la tienen identificada, así como a sus negocios, pues no se trataría solo de la explotación de oro, ya que montó una red de prostitución en estas zonas. Las acciones adelantadas por la Policía de Antioquia empiezan a dejar claro lo que hay detrás de las masacres. Además, han sido capturados 227 hombres del Clan del Golfo, entre ellos diez cabecillas, incluidos hombres cercanos a alias Chiquito Malo, heredero de alias Otoniel.