Casa de Nariño
El presidente Gustavo Petro le puso la cara al peor escándalo de su Gobierno: negó las chuzadas, defendió a Laura Sarabia y atacó al fiscal
El presidente de la república se refirió a lo sucedido con su jefa de gabinete, negó las chuzadas y justificó el uso del polígrafo contra Marelbys Meza.
Tras un prolongado periodo de silencio en medio del escándalo de las chuzadas contra Marelbys Meza, exniñera del hijo de Laura Sarabia, exjefa del despacho presidencial, un episodio confirmado por el fiscal general de la nación, Francisco Barbosa, y que ha desatado un terremoto político en Colombia, el presidente Gustavo Petro decidió finalmente hacer una declaración pública al respecto.
Durante su discurso este viernes, en medio de una ceremonia de ascenso de militares, lejos de hacer algún tipo de acto de contrición, Petro fue vehemente en negar cualquier tipo de vinculación de su Gobierno con interceptaciones telefónicas ilegales, salió en defensa de Sarabia y se fue nuevamente contra el fiscal general de la nación.
“Aquí a nadie de ustedes se le ha ordenado una sola intercepción telefónica ilegal, ni a ilustres, ni a poderosos exfuncionarios, ni a personas humildes. Eso no es cierto (...) Aquí no puede quedar ni mancha, ni duda siquiera de que este Gobierno va a repetir las suciedades que otros gobiernos hicieron”, aseguró el jefe de Estado. El mandatario fue claro en decirles a los militares que ni el presidente ni ningún alto funcionario de este Gobierno les ha dado alguna orden que tenga que ver con romper la Constitución.
Incluso, invitó a los uniformados a que si llegan a recibir alguna orden que los lleve a romper con el hilo constitucional, pongan la denuncia ante las autoridades competentes. “Aquí no venimos a eso. Aquí venimos a que las armas se pongan en función del pueblo y de la Constitución, y que eso haga una fuerza pública muchísimo más poderosa de la que hasta ahora se ha tenido”, indicó Petro. Luego de reafirmar que, en su consideración, su Gobierno no tiene nada que ver con interceptaciones ilegales, el jefe de Estado aseguró que supuestamente estarían llamando a la fuerza pública a desobedecer al presidente.
Lo más leído
“Nadie puede tener ni la altura ni llegar a la absoluta irresponsabilidad, en un país con tanta violencia, con tanto sectarismo que nos ha acompañado en toda la historia nacional, que nos hemos es matado por ello, de decirle a la fuerza pública que no le cumpla las órdenes al comandante en jefe de las Fuerzas Militares, eso debe ser investigado, es una sedición, es una ruptura sediciosa de la Constitución Nacional y no puede ser ni aplaudido, ni seguido, ni silenciado”, expresó.
Petro aprovechó el espacio para irse de nuevo contra el fiscal Francisco Barbosa por hablar de chuzadas en su Gobierno y le pidió “que investigue bien”, al tiempo que le reprochó por no tener la misma “premura” para investigar los crímenes del Clan del Golfo.
“El funcionario que nos está sindicando de eso, que investigue bien. Con la misma premura que tiene para investigar al otro día los polígrafos del Gobierno. Con la misma premura que tiene para ver cómo captura a un paparazzi que le sacó a una periodista y que nada tiene que ver con nosotros”, apuntó Petro.
El mandatario insistió en que así como la Fiscalía hizo una inspección judicial en la Casa de Nariño esta semana, también “debería haber allanado las casas de los asesinos del Clan del Golfo, cuyas direcciones y nombres propios tenía en su poder. Aun hoy, no llega el informe de las investigaciones que se han hecho sobre los asesinatos sistemáticos de líderes sociales y de ciudadanos del común”.
El polígrafo
Frente al hecho de fondo que originó todo el escándalo, el posible abuso de poder de Laura Sarabia contra una mujer humilde en medio de la investigación por la pérdida de un dinero en su residencia, Petro justificó el actuar de su ahora exfuncionaria en “la zozobra” que sintió luego del incidente en su casa. El mandatario reconoció que sí se usó el polígrafo contra Marelbys, pero argumentó que se hizo de manera legal.
“No han parado ni siquiera a pensar qué podría pasar en la cabeza de una joven mujer recién parida, dicen en mi tierra, con su primer niño en su primera experiencia maternal. Cuando le sucede un hecho en su vida doméstica que la hace sentir zozobra y que reacciona dentro de la ley; que se usó el polígrafo, que yo no he podido ni saber dónde queda en el Palacio de Nariño, que no compramos nosotros, se usa desde el primer Gobierno de Santos, hasta donde tengo entendido, bajo unas normas y protocolos”, explicó el jefe de Estado.
Además, Petro argumentó que Marelbys Meza se sometió al polígrafo bajo su propia voluntad. “Nadie llega a pasar por ese tipo de pruebas sin su libertad plena, sin su decisión compartida, autorizada por la persona y eso es lo único que pasó ante una sospecha”, comentó el mandatario. Petro también esgrimió el argumento de la seguridad nacional, el mismo que ya había usado Sarabia, para justificar el uso del polígrafo con una ciudadana particular.
“Si en mi casa se perdiera un papel reservado de inteligencia, o alguno por el estilo, yo también tendría que hacer lo mismo con todas las personas que me rodean, porque necesitaría la máxima confianza, no sobre lo que me pase a mí, sino lo que le pase a la nación si un documento de esos llegase, por ejemplo, a manos de las organizaciones criminales”, expresó el jefe de Estado.
Ministro de Defensa
Un hecho que ha llamado la atención en medio de este escándalo es que mientras Petro ha negado de manera tajante que su Gobierno haya chuzado, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, le solicitó al director de la Policía, general William Salamanca, agilizar las investigaciones administrativas internas que permitan esclarecer las interceptaciones ilegales de las que fue víctima Marelbys Meza.
Igualmente, afirmó que lo más beneficioso para el Gobierno Petro es que se conozca toda la verdad de las chuzadas contra la exniñera de Sarabia.“Quienes ordenaron las recientes interceptaciones ilegales no pueden quedar en la impunidad. Por el bien del Gobierno al que pertenezco, toda la verdad debe ser conocida por el país”, dijo el ministro.
No obstante, en lo que sí coincidió con Petro es en justificar el uso del polígrafo en contra de Marelbys Meza. El funcionario defendió esta acción argumentando que al tratarse de la seguridad del presidente Petro, todo se hizo de acuerdo con lo que estipula la ley. En ese sentido, Velásquez explicó que el polígrafo es utilizado para obtener información que puede ser aportada a una investigación.
“El hecho de que sea una particular, la exempleada de la señora Sarabia, y esté afirmando ahora que se sintió presionada para someterse a esa prueba, la información de la que yo dispongo es que fue una aceptación voluntaria, inclusive firmó el consentimiento, esto, como lo afirmaba, teniendo que ver de manera muy cercana a la seguridad del presidente, es lo que justifica la utilización de ese mecanismo con el consentimiento como efectivamente se hizo”, aseveró.
El escándalo que le estalló al Gobierno ha sido de tal magnitud que incluso generó la reacción de la vicepresidenta Francia Márquez, quien suele guardar silencio cada vez que surge una controversia que involucra a la administración Petro. La vicepresidenta, si bien no se refirió de fondo al asunto del polígrafo, sí rechazó las chuzadas, aunque también salió en respaldo del presidente Petro. “Rechazo las interceptaciones ilegales, hemos luchado toda la vida por la garantía de los derechos humanos, esa lucha les costó la vida a muchos de los nuestros. Que se investiguen estos hechos y se esclarezca lo ocurrido”, indicó Márquez.
Está claro que este golpe generó un duro remezón en la Casa de Nariño. La demora de Petro en salir a referirse al tema, las contradicciones entre el presidente y su ministro de Defensa, y la salida de Laura Sarabia y Armando Benedetti de su cargo dejan claro que la argumentación entregada por el Gobierno aún no logra despejar del todo lo sucedido. ¿Qué es lo que falta por contar?