Judicial
Exsenador Pulgar busca, con dictamen forense, tumbar prueba reina en su contra
La defensa sostiene que sobre cualquier prueba documental debe haber certeza de que es genuino y no ha sido manipulado. Corte habría accedido a revisar el audio.
Los procesos contra el exsenador Eduardo Pulgar siguen su trámite desde lo disciplinario y desde lo judicial. Mientras tanto, en la Procuraduría fue aplazado en dos ocasiones: la primera porque el Inpec decidió hacer mantenimiento a los equipos y la segunda por una reprogramación, para el 25 de enero, que dejó el caso en manos de la nueva jefe del órgano disciplinario, Margarita Cabello. En la Corte Suprema Justicia está en la etapa de instrucción y valoración de pruebas para decidir si van a juicio.
Es ahí donde la defensa del exsenador Pulgar espera quitarle validez a la prueba reina en este proceso: el audio que reveló el periodista Daniel Coronell, en el que se escucha al excongresista ofrecer “200 palos” (millones) al juez Andrés Rodríguez a cambio de favorecer a su aliado político Luis Fernando Acosta Osío, quien manejaría la Universidad Metropolitana, en un proceso judicial.
El audio, presuntamente grabado por el juez Rodríguez, es la prueba que la defensa de Pulgar –en cabeza del abogado Jaime Granados– cuestiona porque puede haber tenido alteraciones. Para verificar su autenticidad y posibles manipulaciones, contrataron a uno de los ingenieros forenses digitales más importantes del mundo, Duglas Lacey, quien fue parte del FBI durante siete años y ha participado en investigaciones como la del caso de Mónica Lewinsky contra el expresidente de Estados Unidos Bill Clinton.
Según conoció SEMANA, al despacho del magistrado de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema Marco Antonio Rueda llegó la objeción de la prueba acompañada por el dictamen pericial que plantearía irregularidades y manipulaciones del audio, por lo que esperan que la prueba sea declarada inválida.
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Este audio, que había sido enviado por la Procuraduría, no habría sido objeto de revisión forense en el órgano disciplinario porque señala: “No cuenta con un software forense que pueda establecer la edición de un archivo de audio. Sin embargo, en la actividad de transliteración no se detectaron saltos o cortes en el transcurso de la conversación contenida en los archivos”.
Esa imposibilidad de determinar la manipulación del audio es la carta que presentó la defensa, pues al parecer sí hay irregularidades como posibles ediciones y un hallazgo que llama la atención: el audio es de 2008 y la grabadora con la que presuntamente se grabó habría sido fabricada en 2011. El togado Rueda habría accedido a revisar el análisis forense realizado por el experto norteamericano, para verificar la validez de la prueba reina.
Esta no es la única prueba contra el senador Pulgar, pues también está el testimonio del juez Rodríguez Caez, quien bajo juramento ya relató los pormenores de la reunión que grabó y en la que le habrían hecho el millonario ofrecimiento. Así mismo, el testimonio del alcalde de Usiacurí (municipio donde despachaba el juez Rodríguez Caez), Ronald Padilla, quien confirmó que la reunión y la propuesta se llevaron acabo.
SEMANA habló con el abogado de la defensa, Jaime Granados, quien por la imposibilidad de referirse directamente al audio porque puede viciar el proceso, manifestó que “debemos ser muy precisos porque cualquier prueba de carácter documental tiene un requisito básico de autenticidad. Debe ser genuino, así no sea original; si hay certeza de que es una copia del original, es válido”.
Recordó el caso del almirante Gabriel Arango Bacci, quien fue destituido de la Armada y estuvo cerca de año y medio en prisión. En este caso, recuerda Granados, “la duda estaba en la veracidad de la huella del almirante. Por el trabajo de documentología de la Fiscalía se pudo detectar que la huella no había sido puesta por Arango Bacci y finalmente fue absuelto”.
Para Granados, hay que respetar los principios científicos, siguiendo los protocolos internacionales, para comprobar si esta prueba documental tiene los problemas que se han hecho públicos y a los que no se refirió por no violar la reserva de la investigación.
Por ahora, desde lo disciplinario se espera que el exsenador Pulgar atienda la cita el 25 de febrero ante la Procuraduría, ya en cabeza de la exministra de Justicia, Margarita Cabello, de quien se conoce la cercanía con la clase política costeña y han publicado fotos acompañada de Pulgar, pero que en entrevista con SEMANA dijo que: “Conocer a algunas personas no significará complicidad”. Desde lo penal, se espera el análisis de las pruebas para dar inicio al juicio formal, pero desde la defensa esperan que la prueba reina se invalide.