Nicolás Petro: aún no concreta su colaboración con la justicia como lo prometió. Todo cambio con la visita de su padre Gustavo Petro

De la frase de Nicolás Petro “lo hago por mi familia y por mi bebé que viene en camino”, que lo convirtió en testigo por el ingreso no reportado de dinero a la campaña presidencial de su propio padre, solo queda el video. El hijo del presidente Gustavo Petro le metió reversa a su colaboración con la Fiscalía y el ente acusador ya activó el contador con los días que quedan para presentar el escrito de acusación y pedir una condena en su contra.

Un día después de la imputación de cargos y entre risas, Nicolás Petro, en audiencia pública, admitió que tenía información de la entrada de dinero, buena parte de personas cuestionadas y contratistas, a la campaña Petro Presidente y que todo se lo contaría a la justicia.

Su interrogatorio lo dedicó a mencionar a las personas que tuvieron algún conocimiento o relación con los hechos de corrupción, más de 27. Además, aunque había dicho que se había embolsillado lo que había recogido, una parte sí se habría invertido en “logística”.

El hijo del presidente estaba decidido, quería ser testigo y a cambio recibir los beneficios de la justicia. Lo logró, incluso recibió más. Un juez lo dejó en ‘Barranquilla por cárcel’ y con la posibilidad de enfrentar su proceso en libertad, ver nacer a su hijo y hasta reunirse con su papá, el presidente Gustavo Petro.

Justamente esa visita del presidente Petro a su hijo en Barranquilla al parecer desencadenó una serie de sucesos que llamaron la atención de la Fiscalía. Días después, quien fue su abogado, el destacado penalista David Teleki, presentó su renuncia anticipando motivos personales y profesionales.

“El doctor Nicolás Petro y su abogado hemos decidido dar por terminado el mandato conferido para ejercer su defensa técnica en proceso penal. Los motivos son de índole personal por parte del abogado, y dichas razones han sido aceptadas por el doctor Petro Burgos”, señaló el abogado.

Más tarde, la Fiscalía continuó con las diligencias, con los actos de verificación en la nueva línea de investigación por los hechos de corrupción revelados por el mismo Nicolás Petro, pero empezaron los aplazamientos y dilaciones. Primero, que no tenía definida su defensa, luego, que situaciones personales con su bebé. El fiscal del caso, Mario Burgos, viajó a Barranquilla y se quedó esperando las prometidas denuncias.

Al hijo del presidente, que tiene la calidad de imputado y con medida de aseguramiento, le quedan dos caminos. Puede retomar la promesa inicial de colaboración con la justicia o la justicia irá por él. La Fiscalía tiene menos de 120 días para radicar el escrito de acusación, que en otras palabras es la puerta de entrada a un juicio para conseguir una condena en su contra. El propio fiscal Francisco Barbosa aseguró que todas las posibilidades están sobre la mesa. Si Nicolás Petro quiere continuar con la negociación, el fiscal Burgos está listo para escucharlo. De lo contrario, dijo el jefe del ente acusador, están las pruebas para demostrar su responsabilidad en juicio y lograr una condena por parte de un juez.

“Todo el país vio la audiencia, vio la contundencia del trabajo de la Fiscalía, todos vimos esa audiencia pública, entonces la contundencia lleva a la Fiscalía a que cualquier camino que tome es adecuado para, seguramente, tener un éxito con una sentencia judicial”, detalló Barbosa cuando se le preguntó por la situación de este proceso.

Mientras Nicolás Petro aplaza las diligencias para su declaración, en sus redes sociales expresa sus opiniones, sin filtro, incluso para arremeter contra el fiscal general, señalando que el jefe del ente acusador “politiza” su proceso en la Fiscalía, en medio de una supuesta “confrontación” con el presidente de la República.

“Cada vez que el Fiscal Barbosa tiene una confrontación pública con mi padre Gustavo Petro, siempre habla de mi proceso y en tono amenazante. Señor Fiscal, despolitice mi proceso judicial”, dice el hijo del presidente sin conocer en detalle el contexto, las preguntas y respuestas del fiscal.

En la misma red social, muy activo, Nicolás Petro hace algunas referencias con tinte político, lo que de alguna forma podría considerarse una falta a los compromisos de su medida de aseguramiento. El juez fue muy claro en que debía mantenerse al margen de cualquier escenario de la política nacional.

“El @elheraldoco no hace más que hablar de mí, eso sí, muy calladitos con el caso de Arturo Char. Cero equilibrio en la información”, dice Nicolás Petro en sus redes sociales y en medio de una campaña electoral.

Contrario a Nicolás Petro, su exesposa, Day Vásquez, con quien compartió algunos días en el búnker de la Fiscalía, marchó decidida y convencida de su compromiso de colaboración con la justicia. Vásquez se convirtió en testigo del proceso y firmó la solicitud para un principio de oportunidad con el ente acusador y con inmunidad total.

Day Vásquez solo espera la resolución que contiene el principio de oportunidad y sus declaraciones se convertirán en la prueba contra el mismo Nicolás Petro, en caso de que el hijo del presidente opte por enfrentarse a la Fiscalía en un juicio. Fueron justamente las conversaciones entre la entonces pareja de esposos, reveladas en exclusiva por SEMANA, las que llevaron al escándalo nacional.

“Deja en claro los siguientes compromisos: primero, que corrobora y ratifica la teoría del caso de la Fiscalía General de la Nación, ya que él mismo indicó que fueron respaldados con suficientes elementos materiales probatorios, evidencia física, información legalmente obtenida, con los cuales el ente persecutor procedió a formularle cargos”, señaló el fiscal Mario Burgos, luego de la imputación de cargos a Nicolás Petro.

En la Procuraduría, la participación del hijo de Petro también está enredada. El Ministerio Público le hizo una advertencia tras los reiterados aplazamientos en la investigación que adelantan en su contra y en razón a su condición de exdiputado del Atlántico. Tenía que presentar a su abogado antes del viernes o, de lo contrario, tomarían medidas.

La Fiscalía podría radicar el escrito de acusación contra Nicolás Petro y hasta solicitar una revocatoria de la medida de aseguramiento, que le cambien la ‘Barranquilla por cárcel’ y lo lleven a un centro de reclusión. Todo depende de las decisiones del ente acusador ante un nuevo y eventual escenario donde Nicolás incumpla lo que prometió, incluso, en nombre de su propio hijo.

“Quiero anunciar a Colombia que hemos decidido iniciar un proceso de colaboración donde me referiré a nuevos hechos y situaciones que ayudarán a la justicia. Lo hago por mi familia y por mi bebé que viene en camino”, dijo el hijo del presidente Petro para sellar el compromiso que, por ahora, al parecer, se quedó en una mera anécdota judicial.