Remiten a Comisión de Acusación proceso contra magistrado Juan Carlos Granados

El caso por presunta corrupción de Juan Carlos Granados Becerra, magistrado de la Comisión Nacional de Disciplina Judicial, fue trasladado por la Procuraduría y la Fiscalía a la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes. El mismo proceso continúa en firme con la Corte Suprema de Justicia, cuya Sala de Juzgamiento autorizó un nuevo aplazamiento de la audiencia de acusación.

Dado que el excontralor de Bogotá y exgobernador de Boyacá ahora es magistrado de una alta corte, conforme al artículo 178 de la Constitución su caso no puede seguir en manos de la Fiscalía General y de la Procuraduría, pues es la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes la encargada de investigar a los magistrados, competencia que adquirió en este caso tras la elección y nombramiento de Granados.

En la instancia de la Cámara de Representantes ya se hizo el reparto y el encargado de investigar a Granados es el representante Juan Carlos Wills del Partido Conservador.

Precisamente, en diciembre de 2020 causó polémica que el presidente Iván Duque ternara y el Congreso eligiera a Granados para ser parte de la Comisión Nacional de Disciplina Judicial, dedicada a juzgar disciplinariamente a jueces, abogados y fiscales, cuando está presuntamente involucrado en un escándalo de corrupción como el de la brasileña Odebrecht.

A finales de 2018 la Fiscalía le imputó cargos a Granados por supuestas irregularidades en beneficio a Odebrecht como candidato a la Gobernación de Boyacá y como gobernador de Boyacá. Posteriormente, fue contralor de Bogotá y en ese cargo fue quien le impuso la multa al exalcalde Gustavo Petro por un supuesto detrimento patrimonial que dejó la reducción del pasaje de TransMilenio.

Según la imputación que desarrolló en su momento el ente acusador, Granados recibió dinero de Odebrecht para intentar adjudicarle la obra vial Duitama-Charalá-San Gil, según investigaciones de la Fiscalía. Concretamente, de acuerdo con el organismo, al funcionario lo señalan de supuestamente haber recibido 200 millones de pesos de la firma brasileña para financiar su campaña a la Gobernación de Boyacá, además del presunto uso de su influencia para que una de las filiales de Odebrecht fuera precalificada para competir por el contrato para la ampliación de la planta de tratamientos residuales El Salitre en la capital del país.

Por eso, en ese momento el ente acusador le imputó tres delitos: concierto para delinquir, interés indebido en la celebración de contratos y tráfico de influencias como servidor público. En reiteradas ocasiones Granados se declaró inocente y negó su participación en la adjudicación de la obra señalada.

En entrevista con SEMANA, el senador de la lista de los Decentes, Gustavo Bolívar, dijo que el Congreso está cerrando filas en torno a una persona tan cuestionada, con tantas investigaciones en la Procuraduría, haciendo referencia a Granados. “El mismo presidente de la República, sin necesidad. ¿Qué necesidad tiene él de ternar a una persona que está llamada a juicio por casos de corrupción y nada menos que por el caso de Odebrecht?”, agregó el congresista.

Por lo tanto, Bolívar opinó que la justicia se está “aniquilando”, ya que se están llenando las Cortes, y en este caso la Comisión Nacional de Disciplina Judicial, de personas a las que llamó indeseables. A pesar de la presunción de inocencia, para el congresista“ la justicia debe ser inmaculada y no merece tener personas cuestionadas”.

Bolívar añadió que Granados fue elegido en ese cargo, puede disciplinar y abrirle procesos a los jueces que están actuando en su contra en medio de las investigaciones que tiene en curso, por lo que consideró que es un tema muy delicado.