Judicial
Carrotanques: Sneyder Pinilla está listo para delatar a congresistas y funcionarios del Gobierno Petro: “Hubo plata en efectivo”
Sneyder Pinilla, exsubdirector de Manejo de Desastres, tocó las puertas de la Fiscalía para destapar la olla podrida en la UNGRD. Congresistas y altos funcionarios del Gobierno serían salpicados en su confesión.
Desde la clandestinidad, dispuesto a contar todo lo que ocurrió y quiénes son los principales responsables de la olla podrida que se destapó en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Sneyder Pinilla, exsubdirector de Manejo de Desastres de la entidad, avanza en un preacuerdo con la Fiscalía que tiene temblando a congresistas, miembros del Gobierno y funcionarios de la institución.
Al parecer, la compra de los 40 carrotanques para llevar agua a las poblaciones en La Guajira, adquiridos por 46.800 millones de pesos, con sobrecostos millonarios direccionados a contratistas, que no sirven para lo que fueron adquiridos y están parqueados guardando polvo, sería apenas la punta del iceberg.
Aunque desde la Fiscalía aseguran que no hay acercamientos, SEMANA confirmó que Pinilla sí ha tocado las puertas de la entidad buscando un preacuerdo para contar en detalle, con nombres, contratos y favorecidos con la corrupción que se tomó la entidad, lo que le costó la cabeza al exdirector, Olmedo López, de quien se desconoce su paradero y sería también salpicado por Sneyder Pinilla, en ese entonces su mano derecha.
Este medio logró comunicarse con Pinilla, quien ratificó su intención de contar todo a la Fiscalía y entregar las pruebas con una condición principal: que les garanticen la seguridad a él y a su familia. Afirma que revelará nombres de personas poderosas y que pisar esos callos lo pone en riesgo extremo.
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“Quiero contar la verdad, pero siento que no tengo garantías y temo por mi vida y futuro jurídico. Tengo el temor fundado de que solo quieren escuchar la información para proteger a los poderosos implicados, para después dejar mis afirmaciones en los pasillos del olvido, donde se archivan muchos procesos. Como pasó con el señor Jorge Enrique Pizano en el caso Odebrecht. Yo ya abrí la boca y estoy en peligro”, afirmó Pinilla a SEMANA.
El exsubdirector de Atención de Desastres, quien además está buscando que el principio de oportunidad le garantice inmunidad plena, insiste en la seguridad que requiere. “Créame, para mí no es nada fácil delatar y contar la verdad, ser el sapo me pone en la mira. No hay marcha atrás y claro que estoy solicitando un principio de oportunidad e inmunidad total. Esos señores serán mis enemigos toda mi vida hasta el día de mi muerte. Debo ser muy claro, no quiero suicidarme, no tengo agua con cianuro en mi casa. Si algo me pasa, es responsabilidad de gente que hoy está en los poderes públicos. Ellos me quieren callar”.
SEMANA tiene claro que este escándalo va mucho más allá de los 40 carrotanques comprados para La Guajira, que hoy se están convirtiendo en chatarra. También está retumbando un contrato de 23.000 millones de pesos para proveer ollas comunitarias que beneficiaban a un funcionario de la UNGRD con intereses políticos; obras que no se ejecutaron, y decenas de contratos entregados a dedo en favor de congresistas, para sacar adelante las reformas del gobierno del cambio.
Al respecto, Pinilla asegura: “Soy un testigo valioso para la verdad que el país reclama. Testimonios como el mío, evidentemente, les interesarán a las verdaderas cabezas, que al final del día nos utilizan y hoy buscan cómo opacarnos. Y sí, tengo miedo, y sí, me tiemblan las piernas, pero para resolver su pregunta, estoy convencido de que mi camino es colaborar con la Justicia y decir toda la verdad. Espero que la Fiscalía no se venga en mi contra, me mamen gallo con el principio de oportunidad o les dé por perseguirme de forma salvaje y vengativa. Contaré los nombres de sus protagonistas, examigos que hoy seguro me odian porque decidí romper mi silencio”.
¿Quién es Pinilla?
En medio de este creciente escándalo de corrupción, ha surgido como principal protagonista Olmedo López, exdirector de la UNGRD. Sin embargo, Pinilla sería una ficha clave del engranaje corrupto que ahora busca confesar.
Desde su cargo, según indica la evidencia, tuvo todo el control de la estructuración, evaluación y revisión de las ofertas para darle el visto bueno a la compra de los 40 carrotanques, pues encabezaba los comités en los que se tenían que revisar que las ofertas cumplieran los requisitos.
La denuncia, presentada por la misma Secretaría de Transparencia de la Presidencia, indicó que Pinilla tenía que revisar las cotizaciones y el cumplimiento de los pliegos de condiciones para tan importante contrato (el de los carrotanques), revisión que, al parecer, nunca se realizó.
Además, se le señala de ser una ficha del clan Aguilar, de Santander, cuya cabeza es el exgobernador Hugo Aguilar. Con su apoyo, incluso en tarima pública, logró llegar a la Alcaldía de Sabana de Torres, en 2016. Hay un dato adicional que seguramente formará parte de su confesión: otro contrato, esta vez para el alquiler de carrotanques en el departamento de Córdoba, que fue firmado con una empresa cuyo domicilio está en el municipio que gobernó.
Moreno, su abogado
En este proceso, como se conoció con el anuncio de colaborar con la justicia que dio el miércoles, el abogado de Pinilla es el exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno, quien, afirma el exsubdirector de Atención de Desastres, ya conoce y recorrió los caminos de la colaboración con la Justicia cuando explotó el escándalo del cartel de la toga, del cual fue uno de sus protagonistas y que lo llevó a ser extraditado a Estados Unidos.
Moreno, en referencia al camino de colaboración con la Justicia y el principio de oportunidad al cual le están apostando, afirmó en SEMANA: “Hay altos funcionarios de todos los poderes involucrados en estos actos de corrupción que se están investigando. Es un tema que forma parte de la negociación. Esperamos que la Fiscalía abra los escenarios y que el país sepa quiénes están involucrados. Quiero decirle que Sneyder no es la cabeza, hay personas mucho más arriba que se han beneficiado y han pelechado de esa institución de la que formó parte, y su verdad hoy tiene temblando a muchos”.
Sin embargo, no da nombres. Se los reserva para la eventual negociación. “Por lealtad procesal, es un tema que no puedo ventilar, pero sí le digo que hay altos funcionarios y aforados involucrados. El balón está en el campo de la Fiscalía. La verdad es mi compromiso. Esperamos las garantías de seguridad porque hay poderosos que están muy preocupados de que se le dé marcha”, afirmó Moreno.
Los ecos de la inminente confesión retumban en el Congreso, donde mesas directivas y parlamentarios, especialmente de la Cámara, se habrían dejado aceitar por la UNGRD. También hay altos funcionarios del Gobierno en la lista y toda la red de corrupción que se instaló en la entidad, en cabeza de Olmedo López.
La apuesta, señala Moreno, no es el “tapen, tapen”. Pide que se acelere el acuerdo con su cliente, pero también reclama garantías. Los nombres, pruebas y hechos solo los contarán con un compromiso serio. En sus palabras, no van a empezar a colaborar sin tener la certeza. “Este no es un juego de raspe y gane”, afirmó.