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Domiciliario de Ibagué agredió a un ciclista, esto fue lo que ocurrió
Hasta el momento no se conoce ningún pronunciamiento por parte de la persona que al parecer fue agredida.
Un hecho de intolerancia quedó registrado en un vídeo que se ha hecho viral a través de las diferentes redes sociales, cuando un motociclista que labora para una empresa de encomiendas agrede verbalmente a un ciclista e incluso lo empuja con su automotor hasta hacerlo caer.
Al parecer todo se originó por una imprudencia del motociclista, por lo que se dio un reclamo por parte del usuario que viajaba en la bicicleta. Después de un cruce de palabras el joven domiciliario quien va vestido completamente de negro, le lanza la moto encima a la otra persona.
Hasta el momento no se conoce ningún pronunciamiento por parte de la persona que al parecer fue agredida en Ibagué, ni tampoco del motociclista o la empresa para la cual trabaja; ya que en las imágenes se pueden ver perfectamente los logotipos de la misma.
#Ibagué | Domiciliario agredió a un ciclista en un acto de intolerancia en Ibagué#violencia #intolerancia #moto #ciclista pic.twitter.com/nWx3nPHVrH
— Ecos del Combeima (@EcosdelCombeima) December 27, 2022
Entre las consideraciones básicas que se recomiendan tener por la presencia de ciclistas como actor vial frecuente en las ciudades y carreteras, está la distancia lateral de 1,50 metros para realizar un adelantamiento, de tal manera que pueda hacerse con total seguridad.
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De hecho se puede atravesar la línea continua del centro de la calzada, siempre y cuando no venga otro vehículo en sentido contrario, para que al adelantar al ciclista no le afecte el rebufo, que es una zona de turbulencia que podría hacerlo caer fácilmente.
También es importante tener presente que los vehículos de motor deben disminuir la velocidad para adelantar sin afectaciones a los ciclistas, quienes siempre tendrán la prioridad a la hora de hacer un giro en los cruces.
Cada día en más ciudades del mundo cobran fuerza los colectivos de usuarios que se movilizan de manera habitual en bicicleta para sus quehaceres cotidianos, aunque también se emplean medios alternativos de transporte como las patinetas eléctricas.
Estos elementos se convierten en un aporte a la solución de las problemáticas existentes en materia de movilidad, por lo que es indispensable la adecuación de espacios como las ciclovías diurnas y nocturnas o los ciclopaseos; así como la inclusión de carriles preferentes para la bicicleta en las principales avenidas y las nuevas obras de infraestructura.
Una de las mayores ventajas de la utilización de la bicicleta es la reducción en los niveles de monóxido y dióxido de carbono en las ciudades; así como las partículas de hidrocarburos que contaminan el aire.
Además de permitir el ahorro de dinero, es beneficioso el ejercicio para la salud porque mejora la capacidad pulmonar y el funcionamiento del sistema cardiovascular, reduce los niveles de colesterol y el estrés.
De igual forma al ser un excelente ejercicio aeróbico disminuye los riesgos que generan el sobrepeso y la obesidad, a la vez que ayuda a potenciar la coordinación motriz.
Pero no solo tienen derechos los ciclistas, sino también deberes para que su circulación por las calles y carreteras se haga de una manera segura. Entre estos se considera como fundamental el respeto por las señales de tránsito para prevenir accidentes, así como atender las indicaciones del personal que se encarga de la regulación.
Igualmente se debe transitar por un solo carril y con una persona a bordo, o las que permita la bicicleta en algunos casos. Tampoco deben circular en sentido contrario al de la vía ni adelantar por la derecha porque se exponen a ser atropellados.
Para los giros es vital hacer la señal con luces si se tienen o con la mano, y utilizar ropa con bandas reflectivas para ser visibles en el horario nocturno. No se aconseja llevar pasajeros ni paquetes sobre el manubrio porque se pierde capacidad para direccionar adecuadamente la bicicleta.
En lo referente a la circulación es importante no estar cambiando de carriles constantemente ni utilizar los que están en el centro de la calzada. Tampoco invadir las aceras, zonas peatonales o carriles exclusivos del transporte público, y respetar los pasos de cebra.