Nación
Problemas de movilidad en Caldas por el invierno: en Manzanares hay graves afectaciones
Salamina es un municipio con serias dificultades de conectividad por los derrumbes en la carreteras hacia su corregimiento de San Félix y la vecina población de Aranzazu.
No da tregua la temporada invernal en el departamento de Caldas, la cual sigue afectando a todos los municipios, especialmente en la red vial, como es el caso del occidente donde se presentan dificultades para el tránsito vehicular entre Supía y la vecina población de Caramanta, en Antioquia.
De acuerdo con el jefe de la Unidad de Gestión del Riesgo de Caldas, Félix Ricardo Giraldo Delgado, otra de las zonas con problemas por el invierno es el municipio de San José, que ve muy mermada su comunicación con la vecina población de Risaralda. Igualmente, en Marmato son constantes las avenidas torrenciales y el arrastre de material, debido a que la actividad predominante en la localidad es la minería para la extracción de oro.
En esta zona uno de los sectores más vulnerables es el que se conoce como Cien Pesos, que constantemente se ve afectado por la ocurrencia de derrumbes.
También se realiza un monitoreo en las quebradas Cascabel y Jiménez Bajo, donde se presentan crecientes súbitas; así como a la entrada del municipio de Marmato donde son frecuentes los deslizamientos que afectan con cierres prolongados la vía entre las ciudades de Manizales y Medellín.
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La ruta hacia el norte de Caldas es otra de las grandes perjudicadas por la ola invernal, ya que se tiene el registro de múltiples deslizamientos en el corredor Manizales - Neira - Aranzazu - Salamina - Pácora - Aguadas - La Pintada, Antioquia.
Salamina también es un municipio con serias dificultades de conectividad por los derrumbes en la carreteras hacia su corregimiento de San Félix y la vecina población de Aranzazu, donde hay cierre total de la vía en el sector La Unión a esta hora del lunes 12 de diciembre.
Por su parte, en Neira se brinda atención con ayudas humanitarias a las familias damnificadas que habitaban en las tres viviendas que resultaron averiadas por un deslizamiento en el sector conocido como Cantadelicia.
Pero sin duda la situación más compleja la afronta el municipio de Manzanares, localizado al oriente de Caldas, ya que sus cerca de 20.000 habitantes deben hacer desplazamientos muy largos y arriesgados para poder salir a otras poblaciones vecinas. El sector más afectado por el invierno es Buenavista en la salida hacia un lugar conocido como Petaqueros que le permite comunicarse con el Alto de Letras en Manizales o las localidades de Fresno, Padua, Mariquita y Honda en el Tolima.
Igualmente es complicada la conexión con los municipios vecinos de Pensilvania, Marquetalia y Manzanares en el Alto Oriente de Caldas; así como con Victoria y La Dorada en la región del Magdalena Centro.
La Gobernación de Caldas lleva a cabo una importante labor de recuperación en las vías del departamento con la utilización de maquinaria amarilla propia y alquilada, donde se ha logrado la intervención de 1.783 kilómetros hasta ahora para mejorar la conectividad de las comunidades y el transporte se sus productos. Una de esas zonas es en el sector El Tigre del municipio de Neira, específicamente en el tramo El Peligro - El Águila - La Chuscala, donde se ha ido removiendo la tierra y el material vegetal que cayó sobre la calzada. Igualmente, se reestableció el paso por la vía Cantadelicia - La Arabia y el área de Las Palomas en Manzanares.
Este domingo 11 de diciembre el Cuerpo Oficial de Bomberos de Manizales atendió el colapso de una vivienda en el barrio San Ignacio, donde la estructura que está principalmente construida en madera se desplomó ante los intensos aguaceros y fuertes vientos. Por fortuna este hecho no dejó víctimas ni personas lesionadas, aunque desde la administración municipal se brinda asistencia humanitaria a las personas que resultaron damnificadas.
Por ahora las previsiones que maneja el IDEAM es que se mantendrán las lluvias intensas durante el primer trimestre del próximo año y probablemente se extiendan hasta la mitad de 2023. Son varios los municipios de Caldas que mantienen la declaratoria de calamidad por las afectaciones que deja la temporada invernal, como lo son La Dorada, Supía, Riosucio, Samaná, Norcasia, Neira, Palestina, Marmato, Salamina, Victoria, Aguadas y Viterbo.