Nación
Juzgado ordena suspender labores de tala y rocería en reserva ambiental Camino de la Palma, de Manizales
La demanda de acción popular fue interpuesta por los ciudadanos Enrique Arbeláez Mutis y Álvaro Gómez.
Hay esperanza para la salvación del bosque Camino de la Palma Real, un predio de casi 4.100 metros cuadrados que está ubicado entre los barrios Laureles y La Rambla, en la comuna Palogrande de Manizales, zona que es considerada como uno de los pulmones naturales de la ciudad.
María Isabel Grisales, quien es la titular del Juzgado Cuarto Administrativo de Manizales, le ordenó a un particular que posee parte del predio que no siga realizando actividades de tala o rocería, mientras se desarrolla una acción popular que busca evitar que sea alterado este ecosistema que tiene 35 especies de flora y 57 de aves.
De igual manera, el fallo le ordena a la Corporación Autónoma Regional de Caldas, Corpocaldas, y a la Alcaldía de Manizales, que es propietaria de parte de este lote; que desarrollen labores de control y vigilancia sobre la firma constructora que está trabajando en ese lugar.
Entre otros aspectos, señala que es necesario proteger el derecho de la ciudadanía al medio ambiente sano, el equilibrio ecológico y el cuidado de los recursos naturales renovables mediante un adecuado aprovechamiento.
La demanda de acción popular interpuesta por los ciudadanos Enrique Arbeláez Mutis y Álvaro Gómez, enfatiza que el lote permite que exista conectividad biológica entre la red de ecoparques de la ciudad y la Reserva Ambiental Río Blanco, por lo que no es lógico que la Alcaldía pretenda venderlo aunque hubiera recibido la autorización del Concejo de Manizales, con el Proyecto de Acuerdo número 073 del 22 de abril de este año en el que se daba vía libre para la enajenación y compra de varios predios.
Ante la Personería de Manizales se registró el 21 de junio de este año una veeduría ciudadana que busca vigilar y también sugerir a la administración municipal la utilización del predio, como una definición de área protegida, con la modificación del Plan de Ordenamiento Territorial, (POT).
Dicha disposición obligaría al Municipio a destinar recursos para su conservación y mantenimiento, pero hasta ahora no hay ningún pronunciamiento desde la administración, por lo que se han realizado ya varios plantones a manera de protesta.
Sin embargo, el día 2 de noviembre se conocieron varios vídeos y fotografías en los que la ciudadanía manizaleña denunciaba las actividades de rocería y tala de árboles en una ladera del lugar, con la consiguiente afectación al bosque, la capa vegetal y las especies animales que habitan o frecuentan la zona.
En ese momento, el concejal de Manizales, Julián García Cortés, quien es uno de los principales detractores del alcalde Carlos Mario Marín Correa, manifestó a través de sus redes sociales: “Esta administración no da pie con bola, no sale de un escándalo y ya está en otro. No escucha a la ciudadanía ni protege el medio ambiente. Por más que la excusa de @CiudadManizales es que es un predio privado, @Alcalde_Verde no se le olvide que Río Blanco también lo era”.
Esta Administración no da pie con bola, no sale de un escándalo y ya está en otro. No escucha a la ciudadanía ni protege el medio ambiente.
— Julián El Politólogo Concejal (@Julianelpolit) November 3, 2022
Por más que la excusa de @CiudadManizales es que es un predio privado, @Alcalde_Verde no se le olvide que Río Blanco también lo era. pic.twitter.com/uBzGxnnVlX
Desde la Alcaldía de Manizales se comunicó que ese predio de la reserva que se veía intervenido no es propiedad del Municipio, sino de carácter privado. Además, aclaró que se estaban adelantando labores de rocería, pero no de tala de árboles.
También se manifestó desde la administración que se haría una delimitación, para que se pudiera apreciar con total claridad la separación del predio privado y el del municipio, con el objetivo de evitar nuevos malentendidos.
Por ahora se espera la audiencia de pacto de cumplimiento de esta acción popular, que busca un acuerdo entre todas las partes que están implicadas; aunque no se tienen grandes expectativas desde la veeduría y las personas que instauraron la demanda porque no ven desde la Alcaldía de Manizales una buena voluntad política.