Presunto asesino de la pequeña Danna Sofía en Chinchiná, Caldas, tiene múltiples antecedentes penales

Un amplio prontuario criminal tiene el presunto asesino de la niña Danna Sofía Alzate Galvis, cuyo cuerpo fue encontrado a la orilla del río Chinchiná, en una zona conocida como El Pescador, bajo el puente en la recta de Cenicafé que está localizado a la entrada del municipio.

De acuerdo con el comandante de la Policía en Caldas, coronel José Arturo Sánchez Valderrama, este individuo de aproximadamente 60 años se había escapado hace poco de las autoridades en el municipio de La Virginia, Risaralda, que está muy cerca de Chinchiná.

Al parecer aportó un nombre falso para conseguir empleo como recolector de café en una finca de la zona rural, aprovechando que en este momento hay cosecha del grano en esta parte del departamento.

También se pudo establecer que este sujeto había estado caminando por las calles del barrio Nuevo Horizonte de Chinchiná en las horas previas al rapto y que al parecer aprovechó que en la casa de la niña estaban departiendo y con la puerta abierta para llamarla por su nombre.

En un descuido de las personas que estaban en la vivienda, este sujeto aprovechó para llevarse a la niña hasta la zona cercana al río, donde fue encontrada sin vida este lunes 21 de noviembre.

Acerca del presunto responsable de este terrible crimen se sabe que presenta varias anotaciones judiciales por los delitos de homicidio, feminicidio, abuso sexual a menor de 14 años y fuga de presos.

También se supo que su captura se produjo en medio de la espesa vegetación que hay en la zona donde fue hallado el cadáver de la niña, gracias a que fueron encontradas unas sandalias que pertenecían a la menor y una chaqueta. Sin embargo, su cuerpo fue ubicado varias horas después porque estaba tapado con unas ramas.

Esta mañana se llevó a cabo una marcha que recorrió algunas calles de Chinchiná y llegó hasta el colegio Juan XXIII, donde la pequeña Danna Sofía cursaba primer grado, para exigir que se haga justicia y que no se repitan esta clase de atrocidades.

Jorge William Ruíz Ospina, quien es el secretario de Gobierno de Caldas, afirmó que fue necesaria la presencia de los integrantes de los Escuadrones Móviles Antidisturbios (Esmad), debido a que muchas personas se acercaron a las instalaciones del Comando de Policía Chinchiná para intentar agredir al presunto responsable de esta tragedia que involucra a una menor de 6 años, por lo cual se decidió su traslado a Manizales.

El Concejo Municipal de Chinchiná y su alcalde, Eduardo Andrés Grisales López, han emitido comunicados a través de sus redes sociales en los que se solidarizan con la familia de Danna Sofía Alzate Galvis, a la vez que rechazan este suceso que cinco años después implica de nuevo la trágica muerte de una pequeña niña en la localidad.

Y es que precisamente un hecho similar ocurrió también en el municipio de Chinchiná el 22 de diciembre de 2017, cuando una mujer identificada como Luz Mery Soto Castrillón raptó a una niña de solo 20 días de nacida.

En ese entonces, la mujer citó a la madre de la bebé para supuestamente entregarle una ropa y unos juguetes; sin embargo, aprovechó un descuido para tomar a la recién nacida y empujar a su progenitora junto con su otra hija al lago Balsora.

A pesar de que la madre de la niña logró salir sana y salva del agua, y que en la tarde de ese mismo 22 de diciembre fue rescatada la bebé secuestrada, el cuerpo de su pequeña hermana llamada Juanita Valencia, de apenas 4 años, solo pudo ser encontrado el 2 de enero de 2018 cuando unos trabajadores limpiaban una reja que hace las funciones de filtro en el embalse Cameguadua, que también está ubicado en Chinchiná.

Durante el juicio se pudo conocer que la mujer responsable de este crimen les hizo creer a sus familiares y a su propio esposo que estaba embarazada, aunque esa condición era falsa.

Posteriormente, planeó el rapto de la menor recién nacida y quiso deshacerse de su madre y la hermana arrojándolas al agua, por lo que el Tribunal Superior de Manizales confirmó en su contra una condena de 53 años y 8 meses de prisión por los delitos de secuestro simple agravado, homicidio agravado y tentativa de homicidio.