Medellín

Alcaldía de Medellín se defiende de acusaciones sobre presunta negligencia en San Antonio de Prado

La Personería de la ciudad definirá si hubo o no inconsistencias en la mitigación del riesgo en el corregimiento del sur del Valle de Aburrá.

15 de julio de 2022
Deslizamiento de tierra en el corregimiento San Antonio de Prado, Medellín.
Deslizamiento de tierra en el corregimiento San Antonio de Prado, Medellín. | Foto: Cortesía Alcaldía de Medellín.

Un deslizamiento de grandes proporciones puso a temblar a la comunidad del corregimiento de San Antonio de Prado de Medellín. En medio de la emergencia, se conoció un video donde un líder social le advirtió a la Alcaldía hace tres semanas sobre el riesgo que había en la montaña que se desprendió. La administración contrarió la información.

A través de un comunicado de prensa, el distrito reconoció que el mensaje de alerta que se emitió desde el sector sí fue recibido. Sin embargo, aseguró que el sitio que generó la emergencia es diferente al que referenció la ciudadanía. Por lo que no había indicios para prevenir el impacto que dejó el evento natural: dos muertos, una mujer de 40 años y su hijo de dos.

“El movimiento en masa registrado el 13 de julio, no está asociado a los puntos detectados previamente y reportados por la comunidad desde el pasado 21 de junio. No hay relación causal entre los dos puntos, pues el evento presentado está condicionado por las características geológicas de la zona establecidas en el Plan de Ordenamiento Territorial”, afirmó la Alcaldía.

De acuerdo con el equipo técnico, el deslizamiento de tierra se originó en la parte alta de la ladera teniendo un trayecto del desprendimiento hacia la quebrada Doña María, generando el taponamiento del afluente. En consecuencia, más de 50 hogares en Medellín fueron evacuadas mientras que Itagüí activó la alerta naranja por la posible avenida torrencial.

Es decir, la información establecida por los organismos de socorro y los vecinos de la vereda La Verde en los días previos al incidente fue de la parte baja de la montaña, en inmediaciones a la quebrada. El evento registrado y visitado por el Cuerpo Oficial de Bomberos sigue en las mismas condiciones que se encontraron en su momento, según la administración.

En conclusión, el movimiento en masa fue resultado de la saturación de aguas a razón de las fuertes precipitaciones que se han registrado en el Valle de Aburrá. En el caso particular del corregimiento de San Antonio de Prado, durante el primer semestre se presentó un incremento de lluvias del 20 al 25 %, en comparación con años anteriores, debido al fenómeno de la Niña.

No obstante, la Personería de la capital de Antioquia ordenó abrir una indagación preliminar para determinar si hubo omisiones en la atención de la Alcaldía de Medellín frente a la emergencia que se presentó en el corregimiento San Antonio de Prado.

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El anuncio lo hizo el líder del Ministerio Público de la ciudad, William Yeffer Vivas Lloreda, en su cuenta de Twitter a razón de que la comunidad anticipó hace tres semanas sobre el inminente desprendimiento de tierra que tuvo lugar el pasado miércoles en la ladera.

Este escenario fue alertado en una sesión del Concejo el pasado 29 de junio por un grupo de líderes del corregimiento que, en conjunto con los organismos de socorro del sector, empezaron a notar grietas en medio de los árboles.

El mensaje fue transmitido frente al Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Medellín, entidad encargada de atender las emergencias en la ciudad. Al parecer, la reacción no habría sido oportuna dado que no ordenaron la evacuación de la zona.

“Nuestra solidaridad con los habitantes del corregimiento de San Antonio de Prado. Esta emergencia estaba advertida, por lo que desde la Personería iniciaremos indagación preliminar para determinar si se presentaron omisiones”, afirmó William Yeffer Vivas Lloreda.

Es decir, cuestionarán en las oficinas si tomaron las medidas pertinentes para preparar a los habitantes ante el movimiento en masa que le cobró la vida a una mujer de 40 años y a su hijo de dos, ambos fueron arrastrados por la tierra.