Medellín
Asesinan a dos jóvenes que habrían intentado desertar de una banda criminal de Medellín
Detrás del doble homicidio estaría la estructura delincuencial de Los Joaquinillos.
Hay conmoción en el suroccidente de la capital de Antioquia por el ataque de sicariato del que fueron víctimas tres hombres. De acuerdo con el reporte de las autoridades, dos de ellos perdieron la vida y el otro está luchando para sobrevivir en medio de la gravedad.
La emergencia ocurrió en el barrio Belén la Capilla, cuando los sujetos estaban departiendo en la vía pública. En medio de la conversación, fueron sorprendidos por una persona que se movilizaba en una motocicleta, quien accionó una pistola en repetidas oportunidades.
Una vez los dejó tendidos en el suelo, se fugó. Tras la balacera, la comunidad se abalanzó sobre la calle para socorrerlos. Si bien lograron trasladarlos a un servicio de urgencias, los especialistas no pudieron salvar a dos de los pacientes por el compromiso de las lesiones.
De manera extraoficial, se conoció que las víctimas mortales serían integrantes de la banda delincuencial de Los Joaquinillos, que opera con amplio despliegue en el sur de la ciudad de Medellín. Todo indicaría que el doble crimen tendría relación con esto.
Se sospecha que ya habían mostrado el interés de salir de esas filas para reincorporarse a la legalidad, pero les arrebataron el supuesto deseo por orden de uno de los cabecillas de la estructura. Esta información está siendo investigada por la Fiscalía General de la Nación.
Además de este ataque que habría sido protagonizado por este grupo, los defensores de derechos humanos contaron que sus miembros están reclutando a jóvenes para que se unan a sus actividades ilegales de manera forzada, lo que ha generado desplazamiento.
Con base en el Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia de la Alcaldía distrital, entre el 1 de enero y el 16 de febrero, perdieron la vida de manera violenta 46 personas. Frente a las estadísticas del año pasado, se mantiene la misma cifra de muertes.
Los estudios adelantados por las autoridades judiciales revelan que los homicidios que han tenido lugar tienen relación con hurtos (seis casos), organizaciones delincuenciales (diez casos), convivencia (siete casos), violencia de género (un caso), violencia intrafamiliar (un caso).
Mientras esta estructura ilegal hace estragos, la oficina del alto comisionado para la paz entregó detalles del proceso de paz urbano que está adelantando en las calles de la ciudad de Medellín y en los municipios del Valle de Aburrá. Doce grupos delincuenciales levantaron la mano para transitar hacia la legalidad.
En un comunicado de ocho párrafos anunció que, el pasado 13 de febrero, se reunió en la capital del país con los siete facilitadores que fueron nombrados para tender puentes entre el Gobierno nacional y los sujetos que se mantienen al margen de la ley.
Se dio el encuentro en medio del escándalo sobre supuestos desórdenes que se estarían dando en la negociación, reveladas por un abogado que representaba los intereses de dos estructuras de la subregión. A diferencia, el comisionado mostró avances en el diálogo.
Dijo que las 12 organizaciones reiteraron la disposición de paz frente a su equipo de trabajo y un senador de la República. Frente a los hechos, junto a los facilitadores y teniendo en cuenta a los grupos, se tomó la decisión de dar un paso hacia adelante.
Así lo manifestó el comisionado: “A través de sus siete facilitadores, las 12 estructuras reiteraron su voluntad de hacer parte de la paz urbana. Las 12 estructuras manifestaron su disposición de pasar de la fase de exploración y acercamientos a una fase dialógica”.
Paralelamente, con el respaldo de varias instituciones de educación superior, se acordó el desarrollo de foros en el Valle de Aburrá para debatir sobre las transformaciones sociales para complementar el proyecto que está impulsando el Gobierno con los grupos ilegales.