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Atención: Gobierno Petro anunció que está dispuesto a dialogar con las Fuerzas Revolucionarias Mexicanas y las Fuerzas Armadas RPS - Cartel del Norte, que operan en el Chocó
Se trata de las Fuerzas Revolucionarias Mexicanas y las Fuerzas Armadas RPS - Cartel del Norte, dos agrupaciones armadas que operan en la ciudad de Quibdó (Chocó).
En la tarde de este viernes 16 de diciembre, se conoció que el Gobierno nacional está dispuesto a dialogar con grupos armados con presencia en el Chocó. Se trata de las Fuerzas Revolucionarias Mexicanas y las Fuerzas Armadas RPS - Cartel del Norte, dos agrupaciones armadas que operan en la ciudad de Quibdó (Chocó).
De acuerdo con comunicados de ambas agrupaciones, anuncian cese de fuegos unilaterales en los barrios de la capital chocoana donde, respectivamente, tiene influencia cada grupo. De acuerdo con el Gobierno, esto mitigará la grave situación de violencia e inseguridad que viven los habitantes de Quibdó y sus alrededores.
“A las Fuerzas Armadas RPS - Cartel del norte y a las Fuerzas Revolucionarias Mexicanas les reiteramos que, vía la mediación de la Iglesia o de sus propios voceros, el gobierno del presidente Gustavo Petro está dispuesto, a través de esta Oficina de Paz, a iniciar un proceso de acercamiento”, anunciaron desde el Gobierno nacional.
Además, desde el gobierno de Gustavo Petro se comprometieron con los habitantes de los barrios que han padecido las agresiones y violencias de estos grupos armados, estar prestos a verificar el cumplimiento del compromiso que han asumido desde ahora por medio de su palabra escrita.
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“Valoramos el papel primordial que han jugado en este proceso el Consejo Municipal de Juventudes de Quibdó, las Juntas de Acción Comunal de los barrios y la comunidad quibdoseña en general, quienes reiteradamente han reclamado a los armados un cese de la violencia contra la población”, agregaron en un comunicado del Gobierno nacional.
Paro armado en el Chocó
Este paro armado del ELN lo confirmó el investigador sénior para Colombia de la División de las Américas de Human Rights Watch Juan Pappier, quien contó que se llevaría a cabo en el sur del departamento, específicamente entre los ríos San Juan y Calima, el pasado 15 de diciembre de 2022. Sin embargo, las autoridades no han reportado hechos violentos en la zona. Eso sí, hay poca movilidad y muchas personas confinadas en sus viviendas por el temor de que algo pueda pasar y ponga en riesgo sus vidas.
“Hemos podido confirmar con fuentes en terreno que el ELN ha anunciado un paro armado que iniciaría hoy a las 6:00 p. m. en la zona del Bajo San Juan, Chocó. Ha hecho bien el alto comisionado de paz, Danilo Rueda, en pedirle ‘coherencia’ al ELN. No tiene presentación que el 12 de diciembre este grupo armado anuncie que se tomarían medidas a partir de enero para frenar la violencia en la zona y al día siguiente anuncia un paro armado indefinido en la misma zona”, confirmó Pappier.
Agregó que también es crucial desarrollar una política de seguridad que proteja a la población civil, en particular en zonas tan afectadas, y crear los incentivos correctos para que los grupos armados se sienten a negociar.
Las comunidades que más nos preocupan son Doidó (Istmina), Puerto Murillo, Santa María La Loma, Isla de Cruz (Medio San Juan), Chambacú, San Agustín y Las Brisas (Sipí).
Esta situación llama la atención porque el pasado 12 de diciembre las delegaciones de paz del Gobierno y el ELN cerraron el primer ciclo de paz. Las partes estaban entusiasmadas porque en poco tiempo hubo cuatro acuerdos, que fueron dados a conocer públicamente. Uno de los puntos acordados consistió en que desde enero se aplicarán alivios humanitarios en zonas específicas del Valle del Cauca y Chocó.
“Las partes reconocen la grave situación de violencia que se presenta en los territorios y decidieron poner en ejecución un acuerdo parcial de atención de emergencias, que iniciará a partir de enero de 2023 sobre el Bajo Calima (Valle del Cauca) y el Medio San Juan (Chocó). Así mismo, reconocen la grave situación humanitaria que se vive en las cárceles y acordaron la atención de emergencia humanitaria a un grupo de presos políticos del Ejército de Liberación Nacional (ELN)”, dice el tercer acuerdo revelado en Caracas (Venezuela).