Medellín
Aterrador: otro cadáver apareció dentro de un costal en Medellín
Las autoridades respondieron que la práctica no es sistemática, contrario a lo que ocurre en la capital del país.
La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá confirmó el hallazgo de un cuerpo sin vida dentro un costal en Medellín. El hecho se registró en la tarde de este viernes, en las inmediaciones de la Placita Zea, en pleno de centro de la ciudad. Al parecer, el cadáver fue abandonado por una persona que estaba manejando una carretilla.
El incidente fue reportado a través de la línea de emergencia 123 por un barrendero del servicio de aseo público de la capital de Antioquia. Mientras él cumplía con sus obligaciones, se percató de un paquete sospechoso que estaba abandonado a un lado de la carretera. Cuando se acercó, vio a un hombre muerto acomodado dentro del costal de fibra.
El informe emitido por las unidades del cuadrante de la estación de Policía de la comuna de La Candelaria da cuenta que el cadáver tenía signos de violencia, con marcas de sangre en varias partes de su cuerpo. Sin embargo, se desconocen los detalles del suceso que dejó a esta persona muerta, porque apenas las autoridades están adelantando las inspecciones técnicas.
En cuanto al avance de las investigaciones, los uniformados pudieron establecer que a las 10:53 de la mañana de este siete de octubre, un sujeto que tenía una carreterilla en la mano arrojó el costal y luego lo dejó abandonado, como quedó registrado en las cámaras de seguridad del sector. Se espera la individualización de esta persona para que responda.
En lo que va corrido del año, en la subregión del Área Metropolitana del Valle de Aburrá se han presentado 25 homicidios con este tipo de características: los cadáveres aparecen envueltos dentro de bolsas o costales. El caso más reciente tuvo lugar en Bello, donde dos jóvenes oriundos del Urabá antioqueño fueron acomodados en paquetes negros.
Ellos fueron identificados como Jonathan Serpa, de 21 años, y Jean Carlos García, de 24. Ambos salieron hace unos días del municipio de Apartadó hacia Medellín con el objetivo de encontrar nuevas oportunidades. Pero habrían sido secuestrados y sus raptores contactaron a sus familias para que entregaran dinero a cambio de la liberación.
Un par de fotografías tomadas por los delincuentes es el único recuerdo que les queda a sus allegados. Esa fue la manera que utilizaron para presionarlos con el fin de consignar el dinero. Luego volvieron a saber de los suyos este jueves, cuando Medicina Legal confirmó que los nombres correspondían a los cadáveres que fueron embolsados.
Frente a la repetición de estos casos y el temor que hay en las calles por los niveles de la delincuencia, la Policía Metropolitana aseguró que no se trataría de una práctica sistemática que estaría cometiendo una organización delincuencial en especial, contrario a lo que se logró establecer en la capital del país con el Tren de Aragua.
Cada caso tendría particularidades. Sin embargo, toda la evidencia recopilada está siendo materia de estudio, por lo que no hay conclusiones fijas a la vista. Pero expertos en seguridad relacionan que los embolsados no son un “cuento” nuevo en Medellín y el resto de los municipios del Aburrá, pues afirman que es una herencia ilegal que dejó la guerra más intensa.
En palabras del exsecretario de Seguridad de la ciudad, Andrés Tobón, este fenómeno se presenta con mayor frecuencia con el objetivo de enviar mensajes entre los grupos ilegales. Los cadáveres embolsados serían señales para que las personas que tienen relación con el cuerpo capten las consecuencias que habría tenido su comportamiento.
Entre el primero de enero y el seis de octubre de 2022, en Medellín han perdido la vida violentamente cerca de 289 personas. Los casos están asociados a hurtos, enfrentamientos de organizaciones, intolerancia y violencias en hogares. El alcalde Daniel Quintero Calle celebró este viernes que la ciudad ajustó 365 días no consecutivos sin homicidios.