Clan del Golfo secuestra a un niño y dos mujeres, una de ellas embarazada, en Antioquia

Supuestos integrantes de la organización delincuencial del Clan del Golfo secuestraron a una familia en el departamento de Antioquia cuando se movilizaban en un bus de servicio público. Las autoridades activaron un plan de búsqueda urgente para encontrarlos en las montañas del occidente de la región, donde se presume que están en cautiverio.

La emergencia se presentó en las últimas horas en la vía que conduce del municipio de Sabanalarga hacia la ciudad de Medellín. Cuando el vehículo cruzaba por el sector de La Honda del municipio de Liborina, fue interceptado por sujetos que estaban fuertemente armados y que se presentaron como miembros del grupo que comandó alias Otoniel.

De acuerdo con la denuncia que reposa en la Policía Nacional, los delincuentes frenaron el recorrido del automotor con la seguridad de que sus objetivos estaban dentro. Un niño de tan solo dos años y dos mujeres, una de ellas en embarazo, fueron obligados a descender mientras los intimidaban con palabras de alto calibre, según los testigos.

Las dos adultas fueron identificadas como Valeria Pérez Estrada de 20 años y Dina Dirley Pérez Amariles de 26 años, está última tiene tres meses de gestación. Fueron sus parientes los que denunciaron en el municipio de Sabanalarga la extraña desaparición y, de inmediato, se extendió la alarma por los territorios que recorrió para encontrarlos.

La administración municipal de Liborina confirmó que las autoridades judiciales están haciendo esfuerzos importantes para rescatar a los tres ciudadanos. Sin embargo, de momento, no se ha confirmado la autoría del Clan del Golfo. Fueron los otros pasajeros del bus quienes les advirtieron que ellos se mostraron como miembros del grupo.

“Fue la Policía Nacional quien nos informó de la situación y se extendió el llamado al Ejército Nacional para que trabajaran en conjunto para dar con el paradero de estas personas. El tema está en proceso de investigación y no tenemos mayores detalles, solo sabemos que son tres personas que iban en un bus”, dijo la alcaldesa Adriana Maya.

Se conoció que la familia estaba retornando del municipio de Sabanalarga hacia la capital del departamento luego de participar en las exequias de dos integrantes de su núcleo cercano, quienes murieron violentamente en medio de confrontaciones armadas protagonizadas por supuestos grupos delincuenciales en esa zona de Antioquia.

Se trata de Wilson Andrés Pérez Amariles de 23 años y Diego Albertos Pérez Amariles de 19 años. De acuerdo con la información que llegó a la Policía Nacional, ambos fueron dados de baja por sujetos desconocidos tras señalarlos como integrantes de uno de los brazos ilegales de las disidencias de la Farc, así lo expresó la familia al denunciar el caso.

Aunque el secuestro apenas es materia de investigación, los uniformados que están a cargo del estudio revelaron que hay altas hipótesis de que las tres personas estén bajo el poder de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia y que podrían estar motivadas por la supuesta relación que tendrían los allegados de las víctimas con las disidencias de las Farc.

“El sitio donde se presume que fueron interceptadas estas personas y el menor de edad tiene alta injerencia el grupo armando ilegal AGC, subestructura Edwin Román Velásquez Valle, al mano de un sujeto conocido con el alias de Chicharro, presunto cabecilla de la zona del occidente antioqueño”, se lee en el informe conocido por SEMANA.

En las próximas horas se adelantará un consejo de seguridad extraordinario para definir la estrategia que seguirán las autoridades para dar con el paradero de las víctimas. De momento, no se ha ofrecido una recompensa a cambio de información para agilizar el proceso de investigación.