Concejales piden revisar polémico contrato en el aeropuerto Olaya Herrera

Crece la polémica en el Concejo de Medellín por el contrato de casi 6.500 millones de pesos que fue celebrado por el Aeropuerto Olaya Herrera con la empresa Terminales de Transporte de Medellín, para que se conozca la viabilidad técnica y se lleve a cabo un análisis de los costos que implicaría el traslado de esta terminal aérea a otro lugar de la ciudad o alguno de los municipios vecinos.

Justamente, el concejal del Centro Democrático Alfredo Ramos ha dado a conocer en sus redes sociales que existe un millonario contrato para tal fin y cuestiona la experiencia de Terminales de Transporte de Medellín para su ejecución. En su cuenta de Twitter señala: “¿Qué tramarán con esta perlita que encontramos? El pasado viernes 14 de octubre, firmaron contrato interadministrativo por $ 6.500 millones entre el aeropuerto Olaya Herrera y la Terminal de Transportes para estudios del traslado del aeropuerto de Medellín”.

Otros concejales de la capital antioqueña también han cuestionado la idoneidad de la empresa para desempeñar estas labores y, por supuesto, el monto de la contratación para ubicar un terreno adecuado para el nuevo aeropuerto, ya que asciende a los 6.496 millones de pesos.

Por su parte, el gerente del Aeropuerto Olaya Herrera, Jesús Alberto Sánchez Restrepo, manifestó que se realizó este contrato con Terminales de Transporte de Medellín porque su objeto social lo permite. Además que en el caso de hacer una licitación pública, los tiempos de contratación podrían extenderse más allá de los seis meses.

El alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle, busca apoyo desde hace mucho tiempo para llevar a cabo esta iniciativa que impactaría directamente a los habitantes de la ciudad ahora y para las siguientes décadas, ya que existen varios estudios que demuestran que no es seguro realizar operaciones aéreas en plena zona urbana de la capital antioqueña y que es muy elevado el daño ambiental.

Recientemente, sostuvo un encuentro con varios delegados de la Aeronáutica Civil y el ministro de Transporte, Guillermo Francisco Reyes González, en el que buscó apoyo para materializar esta iniciativa. Por medio de su cuenta de Twitter indicó: “Nos reunimos con @MinistroReyes para apoyar la construcción de segunda pista de Rionegro, la construcción del aeropuerto de San Pedro de los Milagros y el traslado del Olaya Herrera”.

También se pronunció el gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa, quien afirmó que el traslado del aeropuerto favorecería económicamente a Medellín y a todo el Valle de Aburrá. “El traslado puede ser a San Pedro de los Milagros o puede ser en otro sector del departamento que lo dará ese estudio. El futuro de Medellín y el Valle de Aburrá debe incluir ese traslado de las operaciones del Olaya, tanto para la entrega de este espectacular espacio público a Medellín y al Área Metropolitana como la operaciones urbanísticas, generando recursos para Medellín y el Valle de Aburrá”.

El Aeropuerto Olaya Herrera tiene 90 años y actualmente está a cargo de su operación la empresa Airplan S. A. que también maneja los de Rionegro, Carepa, Montería, Quibdó y Corozal. Se calcula que moviliza más de 1.300.000 viajeros cada año en aproximadamente 80.000 vuelos.

Para aterrizar o despegar en su pista las maniobras son muy complejas por la cercanía de barrios como Guayabal, Belén y Laureles, donde las construcciones cada vez requieren de mayor altura para darles soluciones a los problemas habitacionales de espacio de los habitantes de Medellín. Aunque quienes defienden su actual ubicación señalan que hay poblaciones en la zona de Urabá que reciben con frecuencia visitantes gracias a la posibilidad de la comunicación aérea, lo cual desaparecería si esta terminal es llevada a otro lugar del departamento.

A esto se suma la ventaja de que los usuarios ahorren unas sumas importantes en desplazamientos hacia o desde el aeropuerto a varias zonas de Medellín, pues bien sea por el valor de las carreras de taxi, los peajes o las distancias que se deben recorrer, no es lo mismo salir o llegar a la propia ciudad que tener obligatoriamente que desplazarse hasta Rionegro para viajar por el José María Córdova.