Daniel Quintero se despacha y aboga por María Camila Villamizar, su mano de derecha que habría ‘atornillado’ a EPM

El exalcalde Daniel Quintero se pronunció tras el escándalo que estalló en Medellín por cuenta de los supuestos funcionarios que habrían quedado atornillados a EPM, incluida María Camila Villamizar; ella fue su secretaria Privada y mano derecha durante su paso por la administración distrital.

La mujer es la actual directora de Gestión de Relaciones Nacionales de la compañía de servicios públicos, un cargo que desempeña desde la ciudad de Bogotá y que fue creado cuando Quintero figuró como el presidente de la junta directiva. Al parecer, su salario supera los 25 millones de pesos y tendría transporte oficial.

La crítica del concejal Alejandro de Bedout es que, tras el cambio de la administración distrital, ella no ha presentado la carta de renuncia porque no es de libre nombramiento. Esto le ha valido una cascada de críticas y, por su parte, el exalcalde salió en su defensa y refutó lo que está pasando con ella.

En respuesta a un internauta que le preguntó sobre el papel que desempaña Villamizar en EPM, aseguró que sus operaciones son de carrera y comentó lo que hay detrás de esta coyuntura que sacude a los cargos directivos de la segunda compañía más importante de Colombia, después de Ecopetrol.

“Lo que hay contra ella es una persecución laboral por razones políticas por parte de un gerente que fue condenado por Hidroituango y un alcalde que rompió el gobierno corporativo por sacar a los que pusieron la demanda de Hidroituango”, escribió Quintero por medio de su cuenta de X.

Sin mencionar a Empresas Públicas de Medellín, se despachó contra las últimas decisiones que se han tomado: “Doble moral. Gana un gobierno alternativo y hablan de ruptura del gobierno corporativo, toma hostil y masacre laboral. Ganan ellos y rompen el gobierno corporativo, entregan las juntas a carteles privados y piden renuncia hasta a funcionarios de carrera”.

Lo cierto es que las quejas solo se han emitido desde el Concejo de la capital de Antioquia y, de momento, la compañía guarda silencio. Aunque en las redes sociales se multiplican mensajes a favor y en contra de Villamizar, recordada por defender a capa y espada a Quintero durante la suspensión que le impuso la Procuraduría.

Todo tiene su origen en una alerta que encendió el concejal de Bedout. Además de María Camila, otros cuatro empleados de EPM estarían esquivando la dimisión.

En todos los casos, los trabajadores ostentan millonarios salarios y beneficios. Por ahora, la nueva gerencia no quiere que realicen las funciones por la cercanía que tuvieron con el exmandatario.

Así lo mencionó el concejal del partido Creemos, quien hizo parte del empalme de la compañía de servicios públicos: “Hay varias personas, cercanas al exalcalde, atornilladas a la empresa para que, una vez se diera el cambio, pudieran seguir disfrutando las mieles del poder. Ya vamos en el cinco de enero y ellos no se han dignado a renunciar”.

En la lista del político se encuentran Juliana Zapata, vicepresidenta de Talento Humano y Desarrollo Organizacional; Daniel Arango, presidente de la filial de EPM en Panamá; Andrés Felipe Uribe, vicepresidente de Riesgos; Rosa Margarita Rodríguez, directora de Direccionamiento Local; aunque habría otros por identificar.